❤❤¿¿DULCE??❤❤ (Luffy Y Tú) {Terminada}

~❤1❤~

Era... Una hermosa y fresca mañana en el gran Merry. El silencio reinaba tranquila, cálida y dulcemente... Ahora bien esa solemne claridad no duraría mucho, pues un pequeño y lindo monito la interrumpió.

-¡¡Sanji!!- grito a su amigo- ¡¡Tengo hambre!!

-¡¿Luffy?!- gritó sorprendido- ¿Qué clase de psicópata eres?

-shishishi no soy un psicópata Sanji... ¡¡Pero tengo hambre!!

El pequeño dio un pequeño puchero que lo hacia ver tan lindo, que el cocinero se levantó y fue directo a preparar el desayuno. Después de unos (aproximados 15) minutos, todos se encontraban en la cocina disfrutando de las delicias que solo el cocinero podría hacer. Sin embargo el pequeño estaba lleno de ansias, pues la navegante Nami, había declarado que llegaban a una nueva isla.

-¿Qué clase de isla es Nami?- cuestionó el capitán

-no lo se,- respondió la navegante- no tiene mucha pinta de ser una isla común

-¿Por qué lo dices?

-no lo se, su campo magnético es débil, como si no quisieran que fuese encontrada

La navegante quedó en silencio un momento, un silencio que (como siempre) fue roto por el mismo capitán.

-¡Vamos a esa extraña isla!- gritó con orgullo

Y así fue como después del almuerzo tomaron rumbo a la nueva isla. La costa era una maravilla, el color del agua y la brisa de las olas, eran únicas y perfectas.

-ahora,- habló la navegante- tenemos que dividirnos

-¡Yo quiero ir!- gritó el azabache

-esta bien, Luffy, Zoro, Robin y yo iremos. Los demás se quedan en el Merry

-¡Claro que si Nami-swan!- dijo el cocinero con sus típicos ojos de corazón

-¡Vamos!- y seguidas de sus palabras, el capitán corrió hasta la nueva isla

-¡Espera Luffy!- grito la pelinaranja-

-Capitán-san no tiere remedio- río bajo la arqueóloga

-sera mejor que vayamos tras él entes de que nos meta en lios- hablo el espadachín- no quiero liderar con esos inútiles marines

Dando un profundo respiro, los tres chicos fueron directo hacia el capitán, quien ya había sido detenido por uno de los guardias de la isla.

-¿Qué haces?- cuestionaba molesto- ¡Sueltame!

-¿Dónde estan sus nakamas?- cuestionó el hombre

-¿Para qué quieres a mis nakamas?

-señor, me temo que no lo puedo dejar entrar si no trae a sus nakamas. Por cierto ¿Qué lugar ocupa usted?

-¿Yo? Bueno yo estoy en la cama a la derecha de Sanji

-me refiero a... Sinceramente debería olvidarlo

-¡Luffy!- gritó la navegante- ¿Quien es usted? ¿Por qué ha detenido a Luffy?

-yo señorita, soy uno de los guardias de esta isla. Y me temo que no puedo dejarlos entrar

-¿Qué? ¿Y por qué no?

-solo puede entrar el medico, el capitán, el cocinero y la navegante del barco

-¿Qué?

-señorita ¿No entiende nada de lo que le digo?

-¡Si! Es solo que... Robin

-¿Si Navegante-san?

-llama a Chopper y Sanji, diles que no podemos entrar sin ellos

-¡Claro!

La arqueóloga y el espadachín regresaron al Merry y llamaron a los chicos, quienes no tardaron en ir hasta donde sus amigos, quienes seguían sin entender por qué solo ellos podían entrar

-¡Nami-swan!- grito rubio- ¡Ya estamos aquí Nami-swan!

-¿Ellos son su cocinero y su medico señorita?- cuestionó el hombre

-si, así es- respondió la pelinaranja dando un suspiro

-¿Y este inquieto chico que es?- dijo señalando a Luffy

-el...

-¡Yo soy el capitán!- dijo orgulloso

-¿Este niño es su capitán? Es sorprendente, por suerte no es mio. Ahora adelante, pueden entrar

-¿Qué necesitaban Nami-san?- preguntó el cocinero

-nada importante Sanji-kun, ese hombre no nos dejaba pasar

-creí que alguien esta herido- hablo el pequeño reno

-nada de eso, todo esta bien...

Los cuatro chicos siguieron su camino, haciendo compras y viendo la maravilla de esa isla. Que realmente así era, no solo la cálida brisa, el cielo azul y el brillante sol, si no que todo en esa isla era hermoso. Sin embargo, esa maravilla no duraría ni 5 minutos mas, ya que al ser piratas, tenían que ser detidos. Un grupo de hombres los siguieron a lo largo del camino, y sin que los demás se dieran cuenta la navegante había sido secuestrada junto al pequeño reno.

-Sanji, ¿Dónde están Nami y Chopper?- cuestionó el capitán

-creí que estaban junto a ti. Probablemente solo se separaron de nosotros, vamos a buscarlos.

El medico y la navegante se encontraban en un cuarto oscuro atados de pies y manos con una cintilla en la boca.

-¿Asi que la gata ladrona, Nami y la mascota Tony Tony Chopper?- habló una voz femenina

-Si, son ellos. También está el capitán Monkey D. Luffy y vismoke Sanji- respondió otra voz femenina un poco mas suave

-capturemoslos, recuerda usar los señuelos... Y no te olvides de no dejar evidencia alguna

-si, yo me encargaré del capitán, tú encargate del mujeriego

Ambas voces terminaron ahí. Y mientras tanto, Luffy y Sanji continuaban buscando a Nami y Chopper. En alguna parte del camino un olor peculiar llegó a Luffy, ese enigmático olor a...

-¡Carne!- gritó fascinado

-ya llevamos suficiente carne- riñó el rubio- no compra... ¡Pero que hermosas damas!

-¡Buen día!- saludó una chica rubia- ¿Quiere probar un poco de carne?

-¡Si, nos gustaría!- continuaba el rubio sin quitar esa mirada de enamorado

-¡Aun mejor! Puede venir a nuestro restaurante para comer tanta carne como pueda o venir al gran spa por un buen masaje con alguna de nuestras hermosas chicas

-¡Me gustaría un buen masaje!

-¡Entonces sigame!

El rubio siguió a la chica mientras el pequeño monito seguía a la otra para "comer cuanta carne quisiese". Pero al llegar al lugar, la chica atacó al pequeño dejándolo inmóvil.

-¿Esto es parte de la comida?- cuestionó el chico

-¡Claro que no torpe!- gritó la chica- ¡Vaya que eres idiota!

-¡Muy idiotas!- hablo la otra chica llegando con el rubio que, al igual que el pequeño estaba inmóvil e inconsciente- menuda clase de piratas, por el precio de sus cabezas creí que seria más difícil

-¿Y ahora?

-¡Ahora mi querida (t/n)____ llamaremos a la marina!