Past Lives |Derek Hale|

18: Kate Argent

Limpio mi chaqueta quitando las pequeñas gotas de agua que han caído en ella. El clima en Beacon Hills era un completo asco, ya que estaba lloviendo y el viento helado no ayudaba en mucho.

Abro la puerta principal de casa entrando, quito mi chaqueta dejándola en el pequeño armario detrás de la puerta.

Vuelvo a caminar sintiendo un aroma familiar dentro de casa, mi madre había decidido regresar a nuestra casa después de pasar al rededor de tres días en la casa de los Hale en donde yo principalmente estaba nerviosa.

Una vez que estoy frente a la sala de estar subo mi rostro lentamente. No puedo evitar correr hacia mi Billy abrazandolo con fuerza, en verdad tenía meses de no verlo, en cuanto me separo de él hago lo mismo con el idiota de Steven, que ha sido de gran ayuda para mi.

-¿Qué los ha hecho regresar?.-preguntó sin ocultar la emoción que siento al ver a ambos.

-Solo venimos a darles una sorpresa.-responde Billy con una sonrisita en los labios.

-Aunque la sorpresa nos la llevamos nosotros.-balbucea Steven mirando detrás mío.

Doy media vuelta mirando a mamá, Talia y Derek salir de la cocina, este último tenía los ojos humedos y sus mejillas enrojecidas, apestaba a tristeza y preocupación.
Trato de no tener ninguna reacción por verlo así.

-Madd...-alarga mi madre sonando tan seria que eso asustada.-No se como tomes esto pero, Derek te necesita.-frunzo mi ceño con desagrado.

-Paige lleva desaparecida más de 12 horas.-continua Talia acariciando el cabello de Derek.-Ya la buscamos prácticamente por cada rincón de Beacon Hills, pero necesitamos a alguien con el olfato y los sentidos más desarrollados.-

Ruedo mis ojos al saber a donde iba todo esto.

-No.-emitó cruzandome de brazos.

Los ojos de Derek se vuelven oscuros por unos segundos para después regresar a su tono café normal.

-No sé, si esta herida, sí ha caído en una trampa de cazadores, sí esta en peligro. No sé que esta pasando con ella.-Hale sorbe su nariz.-Pero por favor, Maddison, en verdad necesito que  me ayudes a encontrarla, no sobrevivirá mucho con este frío.-rogó sujetando con fuerza una chaqueta de Paige.-Se que no merezco tu ayuda, pero en verdad la necesito.-

Muerdo el interior de mis mejillas al ver la cara de cachorrito herido que ha puesto.

-Lo siento, pero no, no quiero hacerlo.-musitó dándoles una rápida mirada a los tres.

-Es más fácil decirle a los Argent's que nos ayuden.-susurro Steven en tono juguetón hacia mi hermano.

Camino hacia los escalones pero justo cuando solo he subido tres de ellos la voz de un Derek herido se vuelve a escuchar.

-No me hagas más daño, Maddi.-exclamo junto a un gemido de dolor.-No me rezco que me ayudes, pero Paige no se merece morir así.-

Aprieto mis ojos al igual que mis puños tratando de contenerme, no quería hacerlo, no quería ayudarlo. Paige no me importaba en lo más mínimo. Pero estaba una parte mía que aun lucía con sentido común, la cual gritaba en cada parte que lo ayudara,  y que ignorará todo el daño y sufrimiento que he pasado. Así que no tenia sentido luchar contra ese sentimiento ya que se que muy en el fondo de mi sabía que me gustaba ver a Derek feliz aunque no fuera conmigo.

-No tengo de otra de todas formas.-digo regresando a la sala de estar.

Derek limpia un par de lagrimas que se han deslizado por su regordeta mejilla.