Capítulo 1 - ¿Por qué no apareciste hasta ahora?

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POV Y FECHA DESCONOCIDA

Subí rápidamente a mi dormitorio y me lancé desconsolada en mi cama, definitivamente no sabía que hacer.

Estaba tan perdida que llegué hasta el pensamiento de abandonarlo todo y empezar una nueva vida en otro sitio.

Hasta que de repente vi algo rodar por debajo de mi cama, era aquel objeto mágico del cual no sabía de su existencia desde mi infancia, y me sorprendió encontrarlo allí.

Nada más que lo cogí, empezó a desprender halos rojos de luz y sonidos, lo cual me empezó a inquietar ligeramente, pero lo que sí que me heló la sangre de arriba a abajo fue la figura que tenía en frente de mí en cuanto alcé la vista.

—¿No sabes quién soy, verdad?—simplemente negué, dándome cuenta que su mirada me resultaba familiar y su voz era grave y persuasiva—Escúchame.

...

En cuanto empezamos a oir pasos hacia mi dormitorio, me prometió jurarle fidelidad y así hice, desapareciendo su silueta mágicamente de la atmósfera en cuanto la puerta se abrió.

—¿Todo bien?

—Sí—le respondí desde el borde de la cama, sintiendo en mí una energía imparable—Ven aquí, te voy a contar algo.

POV LÍA

Un més después...

Cada día que pasaba era igual de monótono que el anterior, a diferencia que cada vez estábamos más y más cargados de exámenes y trabajos.

A veces creía que al estar Kyle lejos de mí, hacía que me concentrase mejor y me dejase de distracciones, pero ese hecho también tenía sus consecuencias al final del día.

Muchas noches me quedaba en vela, pensando en lo bien que lo se estaría pasando mientras nosotros estábamos muertos del asco, y como no, en si cometería alguna "tontería".

Ese pensamiento empezó a cobrar todavía más fuerza desde haría poco menos de una semana, cuando Kyle dejo de responder a los mensajes y llamadas. Keko me explicó que llegaba un punto tarde o temprano en el que los entrenadores les confiscaban toda la tecnología para que así estuviesen centrados al cien por cien, hecho que Kyle no me comentó nunca.

No sabía muy bien a ciencia cierta por qué, pero tenía un mal presentimiento al respecto.

Y básicamente en eso se basaban mis semanas, además de los reinos intentar dar con la identidad de la sirena blanca, cuyos avances no progresaban. Había seguridad por todos los rincones del mar, incluso en nuestros entrenamientos, que de lo intensos que eran muchas veces al día siguiente no rendíamos en clase.

Crystal y Nadia se dieron cuenta de ello un día que nos fueron a ver, y les sugirieron a Hayley y Amanda que relajasen un poco, por lo que nos quitaron un día, y estuvimos eternamente agradecidas.

Por lo demás, a Amber no se le volvió a ver el pelo por el instituto y mi amistad con Sean se enfrió considerablemente, preguntándome muchas veces por mi extraño comportamiento con él.

—Me ha dicho Keko que se rumorea que Amber ha dejado el instituto y ya no vive en su casa—explicó Tanya mientras caminábamos todas por el pasillo.

—Desaparecida está mejor—sonrió falsamente Heather.

—Pues no creáis—replicó Cora—Así ya no podemos tenerla vigilada.

—¿Dejó solo a Sean?—alzó Sydney una ceja.

—No me extrañaría...—añadí pensando en sus chocantes personalidades—La verdad, me da pena.

Aguas Profundas (AS#2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora