En el mundo de Naruto

CAPÍTULO 19

Al día siguiente...

Me desperté y olía a una mezcla entre arena, sudor y más arena (mejor que los perfumes de Carolina Herrera). Seguía medio dormida escuchando los gritos y golpes a la puerta de Kei.

-Mei, Chieko está en un bardo con Hinata- me gritó
-¿Están haciendo qué?- pregunté aún dormida
-El equipo 8 llegó y parece que Hinata hizo alguna cagada y Chieko la está retando- me comentó
-¿Bardo?- me pregunté así que me cambié rápidamente y salí-¿Dónde está el bardo?
-En el pasillo- me contestó así que caminé hasta allí

El vozarrón de mí amiga me despertó del todo. Ella estaba que se agarraba de los pelos con Hinata.

-¡¿Te crees muy valiente para estar lengüetando con un traidor?!- le gritó mi amiga
-A mí me gusta Naruto-kun, ¿Cómo puedes decir eso?- le respondió Hinata
-Pues porque los vi maldita perra- le comentó mi amiga mostrando una foto de ella con Sasuke en su celular

Y ahí saltaron con un tema que nada que ver con el Sasuhina.

-Al menos no me cojo mapaches- le reprendió la Hyuga, a lo cual las dos se empezaron a insultar, agarrarse de los pelos y golpearse

-Habría que separarlas- comentó un ninja cualquiera de Suna
-Yo no lo haré, quiero bardo- le respondí

Neji y Gaara vinieron y preguntaron qué estaba pasando.

-Chieko y Hinata se despertaron de mal humor- comenté

Neji separó a Hinata y Gaara a Chieko, me fui con ellos.

-Gracias por tu interés por mí situación de agresividad- me reprendió sarcásticamente mí amiga
-De nada, sabes que te quiero- le respondí con una sonrisa inocente y ella me miró como lo haría un Uchiha y me mostraba el dedo corazón

Me revolvió el pelo y yo me quejé.

-Estúpida mi pelo idiota- le dije y empezamos a pelear con las manos

Gaara nos miró raro, entonces recordé que Hinata comentó la relación entre el mapache y Chieko y ella se puso roja, parece que también recordó eso. Nos dimos una mirada cómplice y nos fuimos gritando:

-¡Nada pasó aquí, pueden irse!

Vimos que Gaara y Neji nos miraban con cara de: ¿Y nosotros qué?, nosotras le tiramos un beso con la mano, nos hicimos un saludo que nos hacemos siempre y después nos fuimos a entrenar. Ya en el campo de entrenamiento nos cagamos a pedo pero con amor de amigas.

Un rato después aparecieron Neji, Kankuro, Temari y Kei quién la miraba embobado, los hermanos del desierto miraban fijamente a Chieko quién les mostró el dedo corazón y una sonrisa inocente junto a un sonrojo en la cara.

-No hace falta la agresividad pendeja- le dijo Temari- por cierto, ¿Viste lo bien dotados que estamos en esta familia?

Yo me reí como foca retrasada con cáncer al igual que los presentes, salvo Chieko que nos miraba con odio.

-¿Seguimos con el entrenamiento?- pregunté, todos asintieron

Decidimos enfrentarnos todos contra todos, es decir yo podía atacar a todos y ellos a los otros. Estuvimos así un rato hasta que nos cansamos, decidimos ir a comer a un lugar de barbacoa. Luego paseamos un rato por la aldea, y como aún era de día Temari decidió ayudarme a practicar con mi nuevo abanico. Después nos fuimos a dormir, yo al hotel y ella a su casa.