Tras drogarme los secuaces de Arles me llevan a donde empezó todo, estoy de regreso en mi celda y como un jarro de agua fría despierto de mi ensoñación pensando en lo frágil que era, que sigo siendo, no se a quien engaño con todo esto.
Pasan las horas y no recibo visitas, oigo gente pasar por mi celda, ruidos a través de las paredes.
En algún momento de mi estancia viene la mano derecha de Black y me lleva a su despacho, me deposita en una silla sin ningún cuidado, amarra mis muñecas y mis pies con tal fuerza que incluso un suave movimiento me hace gruñir de dolor.
Estoy tan cansada...mi cuello no aguanta más y mi cabeza cae ligeramente hacia delante. Estoy a punto de perder el conocimiento cuando Arles entra dando un fuerte golpe a la puerta, detrás de él dos hombre llevan arrastrando a un tercero.
Giro la cabeza y reconozco al chico.
Es Aiden.Me muevo incómoda en la silla y alzó la cabeza, Aiden intenta zafarse de los tíos pero no puede. Le colocan igual que a mí, en una silla atandole por completo.
Aiden me mira y no puedo reprimir las lágrimas, le han dado una paliza, tiene la cara magullada y está lleno de sangre.
- Que bonita reunión familiar.- hace el intento de dar una palmada, ya no puedo, mientras lo dice y se acerca poco a poco a mí.
No puedo evitar el impulso y lo escupo pero no le sorprende y casi al instante le da un guantazo con su mano buena, la única que le queda.
Noto un sabor metálico bajar por mi barbilla, me ha partido el labio.Aiden intentar gritar pero de sus labios solo sale un gruñido bajo.
- ¿Pensabas que te ibas a librar?.- se carcajea- Este es tú puto lugar Farha, yo te necesito a tí y tú a mí,- me agarró del pelo y tira de él hacía arriba de manera que sus ojos quedan a pocos centímetros de los míos.
- No quería llegar a esto, pero es lo mínimo que te mereces por todo este numerito que han montado.
Sus manos van a parar a mi pecho, haciendo cortos y lentos círculos. Trago saliva y noto como una arcada va subiendo por mi garganta.
- No la toques.- logra gruñir Aiden en un susurro.
Baja mi chaqueta y rasga la camiseta que llevo debajo, dejando a la vista mi sujetador deportivo. Me remuevo intentando apartarlo pero no sirve de nada.
- Por favor...- ruega un Aiden impotente pero lo único que hace es incrementar el deseo de Black.
-Con eso no basta idiota.
Cada movimiento me repugna más, apartó la mirada y muerdo tan fuerte mi labio que sangra aún más. Black agarra mi barbilla con fuerza para que lo mire. Esta apunto de rasgar la última prenda de arriba que me queda cuando empezamos a oír jaleo detrás de la puerta, derepente oímos un fuerte golpe y la puerta cede.
- ¡¡No respireis chicos!!
Eren y otros tantos entran a zancada por la puerta tirada, lanzan botes con humo, matan a los hombres de Black y lo acortan pero éste saca de su pantalón una pistola y logra escapar.
Cuando llegan a nosotros tenemos la cara roja y los ojos llorosos por culpa del gas.
Desatan primero a Aiden y él corre hacía mí y hace lo mismo.Intento levantarme pero al hacerlo mis piernas fallan, tengo los tobillos morados al igual que las muñecas.
Me sienta en su regazo y hunde la cara en el hueco de mi cuello, yo me aferró tan fuerte a él que duele, me derrumbo y no puedo parar de llorar.
Levanto la cabeza para mirarle a los ojos, me descompone ver su cara magullada, tiene una costra en el labio y los pómulos morados.
Paso los dedos por su rostro, Aiden hace una mueca de dolor cuando rozo su piel, apartó la mano derepente y él sonríe.-----------------------------------------------------------
Tardamos un día en volver a la comunidad, hemos estado parando para recoger suministros que Eren tenía localizados y aunque no han sido gran cosa seguimos necesitandolo.
Al entrar en el recinto nos es fácil distinguir el pelo blanco de Jay viene corriendo y abraza tan fuerte a Aiden que casi lo tira al suelo.
- Que susto me has dado hermano.
Aiden recibe con gusto el abrazo, Jay no tarda en hacer lo mismo conmigo además de revolverme el pelo y no parar de reírse de mí.
- Estas loca preciosa.- y pasa su brazo por mi hombro.
Cuando llegamos es de noche, todo el mundo está dormido y me siento mal por buscar a Sally pero tiene que mirar a Aiden y curar mi labio.
Terminamos a las dos de la madrugada y Sally acaba cansada de regañarme cada vez que me disculpo.
Vamos a descansar cuando todo el mundo está en pie, llegamos a su habitación, ninguno de los dos quiere dormir solo
Aiden tapa la ventana y yo coloco un par de mantas de más encima de la cama, por suerte Jay y el consiguieron colchones de sobra y dos de matrimonio los trajeron para ellos.
Nos metemos en su cama y me cubro hasta el cuello, Aiden hace lo mismo.Nos tumbamos uno enfrente del otro y cuando Aiden posa su mano en mi cintura me acerco más a él.
- No vuelvas a hacerme eso.
Asiento con la cabeza y esta vez lo voy a cumplir de verdad.

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Trece
Teen FictionFarha Hens es una chica normal en un mundo simple y con una familia simple hasta que todo deja de ser normal. Una especie de enfermedad llega al mundo y Farha pasara de ser la chica rara a convertirse en un pilar muy importante para la salvacion...