La historia de mis madres (Barbica)

Capítulo 11

Lo invento, seguro lo hizo, seguro no quería ir con ella y se inventó un pretendiente falso. Dios mi mamá.

Me acerqué a ella un poco mas, abarcando el espacio que había dejado mi madre.

-¿Porque le mentiste? .

-No le menti. Julian me invito hace mucho, estaba pensando en rechazar la invitación, pero prefiero ir con el a que ir con Barbara, además no quiero ir sola, es deprimente hacer el mal tercio con Pablo y Kevin y ahora que Karen va a ir con Agustín con mucha más razón- presione mis puños contra la mesa ¿Cómo se puede ser tan egoísta?

-¡No es justo!- dije, ella me miro como si estuviera loca -Barbara es muy linda- Ella rodó los ojos.

-¿Entonces porque no salis vos con ella Vos le gustas más- volvió la mirada a su plato.

-No, no le gusto, vos si- me acerque hasta su oído -Micaela vos...- trate de decirle algo pero fui interrumpida por mi madre.

-Nicole- estaba parada detrás de nosotras -Tenemos que hablar.

-Si. Claro- me levante y ella me llevo a un lugar alejado.

-Décime por favor que sólo lo invento para no ir conmigo. - dijo Barbara, parecía algo irritada.

-No, el tal Serrano es real- dije cruzando los brazos, ella me agarro de los hombros.

-Ella no puede ir con el, no puede, no puedo dejar que lo haga- me empezaba a asustar, Barbara parecía preocupada y estresada.

-¿Que pasa?

-Julian tienen una orden de restricción de una chica de otro colegio, intento violarla, Micaela es su tipo. Una típica chica insegura, que no se ve hermosa por mas que lo sea, lo conozco- Ella caminaba de un lado a otro, estaba preocupada, y ahora yo estaba más preocupada.

-¿Que? No podemos permitir que la toque - Ella se quedo callada.

-No, el no la tocará, me encargaré de que no lo haga. Si le pone una mano encima le parto la cara- Barbara estaba furiosa -¿Vos pensas que a ella enserio le gusta?- se detuvo un momento y me miro.

-Sólo acepto porque no quiere ir sola, además te tiene una fobia exagerada - Ella rodó los ojos.

-Esa chica cada vez me importa más, es la única que se animo a rechazarme, no se porque pero necesito que se fije en mi.- sonreí.

-Y lo hará, te lo prometo- me acerque y ella pego su espalda a la pared y se deslizó hasta el suelo.

-Ella es la única que no ve a la falsa Barbara encantadora, ella me odia, tal vez es la única que logra ver que es solo un disfraz- me senté a su lado.

-¿La falsa Barbara? -Ella sonrió mirando al piso.

-Esto es solo un disfraz, yo no soy perfecta como todos creen. Mica lo sabe, ella lo ve, pero tampoco se ha dado la tarea de conocer a la verdadera Barbara–Yo reí un poco.

-¿Y cómo es la verdadera Barbara? –Pregunté.

-Toda una nerd. –Yo reí alto, ella me sonrió, traté de desviar la mirada pero ella giró mi cara y presionó sus labios contra los míos. En el momento en que lo hizo se alejó como si mis labios estuvieran en llamas, lo miré con los ojos abiertos, ella parecía aterrada.

-¡Mierda! –Exclamó luego de un minuto de silencio- No te ofendas pero fue horrible

-Te comprendo.

-Fue como si besara a mi madre o a mi hermana. Fue tan... incestuoso. –Reí nerviosamente.

-Sí lo fue. –No fue hasta que giré mi cara que vi a mi madre en la puerta de la cafetería con la mirada perdida en nosotras- Oh no. –Ella empezó a correr hacia el baño, yo me levanté sin avisar y la seguí mientras gritaba su nombre.

-¡Micaela! –Grité al llegar al baño, estaba encerrada en un cubículo- Mica, ya sé, lo he arruinado todo, pero ella no me gusta, el beso fue horrible, ella mismo lo dijo.

-Cállate ¿sí? –Ella salió del cubículo dando un portazo estruendoso.
-¿Por qué lo haces? –Se giró a verme- ¿Por qué me dices todas esas cosas acerca de Bárbara? ¿Por qué insistes en hacer crecer esa estúpida esperanza? –Ella se miró en el espejo- Ella me gustaba sabes. –Sus lágrimas corrían por sus mejillas ruborizadas- Cuando llegué a esta escuela era una del montón. Esperando que Barbara Martinez se fijara en mí, suspirando por ella, mirándola fijamente hasta que ella se diera cuenta y tuviera que dejar de hacerlo–Ella secó esas lágrimas- pero luego me di cuenta de que no pasaría, empecé a verle el lado a malo a Martinez, ella no es quien dice ser, es solo una tonta que gusta de complacer a los demás. –Abrió la canilla y se lavó la cara.

Mamá jamás me había dicho eso, jamás me había contado esa parte de la historia, me acerqué a ella y acaricié sus hombros, seguía contemplándose en el espejo.

-Lamento haberla besado, créeme, vos  le gustas. –Ella rió sarcásticamente.

-No, a ella le gustan las chicas como vos; bonitas, interesantes, valientes. –Su tono de voz se quebraba. La giré y la hice verme a los ojos.

-¡No! Mírame Micaela, vos sos todo eso y mucho más; sos bonita, interesante, valiente, inteligente, carismática, tierna, cualquier chica mataría por tener esa sonrisa y esa mirada, cualquiera mataría por poder hacer esos pucheros y caras de perrito triste tan convincentes que dan ganas de darte todo. –Escupí todas esas verdades en su cara, tal vez cambie algunas cosas en el futuro pero esto es lo que haré ahora, le daré ánimos a mi madre, la convertiré en la chica segura que siempre debió ser.

-¿En serio pensas todo eso? –Me preguntó mirando el piso.

-Sí. –La abracé muy fuerte. Por unos minutos estuvimos así, ella sollozaba en mi hombro y yo acariciaba su cabello.

-Chicas... -Barbara apareció algo avergonzada por la puerta del baño- ¿Estás bien Micaela? –Mamá levantó la mirada, no sin antes secar fuertemente sus lágrimas.

-Sí, no tenes nada de qué preocuparte. –Mamá tomó su bolso que descansaba a un lado del lavamanos.

  -Ey, acerca de lo que pasó afuera...-

-¿Qué pasó afuera? –Mamá lo miró con una ceja levantada.

-Nada supongo.

-Genial, me tengo que ir, debo arreglarme para la fiesta. –Dijo con una sonrisa fingida, trató de salir pero mi madre se atravesó en su camino.

-Tenemos que hablar acerca de eso. –Ella la miró como si estuviera loca-. No irás con Julian–Dijo de forma imperativa, mamá se rió en su cara.

-Yo... me voy. –Salí del baño pero solo para pegar la oreja a la puerta. Después de la metida de pata hace un rato no me puedo arriesgar.

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Gracias a Barbica4ever que me ayudó a escribir este capítulo. Te quiero beba💞

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