Se busca una Reina EN EDICIÓN

CAP 3/para ti siempre habrá tiempo

Pov Enara

- Ella es la hija del dueño de la exportadora de maíz más grande del país, tiene 22 años, estudio sociología y es amante de los animales. - me dice la reina, llevo dos semanas en Erianthe y no he parado de trabajar, todos los días me hace salir con una chica diferente para "hacernos amigas" solo para saber si la apruebo para Izan. - mañana te veras con ella, se puntual, parece que tiene una obsesión con los horarios.

- está bien, reina, nos vemos mañana descanse.- dije antes de salir de la sala del té de la reina. Camine medio dormida por los pasillos, estos días han sido agotadores, nunca fui de salir de compras o de tomar el té en la casa de una amiga, y esas son las actividades que más hago con las chicas.

- Enara- escucho un susurro.- En.- volteo y es Izan, está de pie justo en la entrada de su ala, con una bolsa de dulces.

- debería estar descansando príncipe. - le dije igual susurrando.

- estaba esperando que salieras de hablar con mi madre, ¿podemos hablar?. - dijo y se hizo a un lado. - pasa.- negué con la cabeza.- se que son tus favoritos.- alzó la bolsa que tenía en la mano, son manies cubiertos de chocolate.

- eres un manipulador, solo un rato. -Entré y él cerró la puerta. Estaba descalzo y con su camisa desabrochada solo un par de botones, claro, pero me parecía que lucía lo suficientemente atractivo como para no sacarme esa imagen toda la noche de mi cabeza.

- siéntate.- señaló en mueble en la sala de estar y se sentó junto a mí. - ¿como te ha ido con lo de las chicas?

- que directo.- solté en broma, tomé unos dulces y me los lleve a la boca.

- ok, ¿que tal tu día?

- sabes que lo que he hecho es estar con tus candidatas estas últimas dos semanas.

- perdón por ponerte en esto.

- tranquilo, me gusta reírme de las chicas y hacer nuevas amigas.

- ¿amigas?- preguntó.

- sí , hay un par de chicas que no cumplen los requisitos, son... como decirlo, incompatibles contigo.

- ¿como incompatibles?.

- buenos una tiene novio, desde adolescente y la otra es tan parecida a ti que serán un desastre justos, además pretende irse del país.

- ¿y las otras?

- hay 3 a las que invitare a la fiesta.

-¿fiesta?.

- si, Gael cumple años la otra semana, y tú madre pensó que sería la mejor ocasión para que conozcas a alguna de la chicas.

- pobre Gael y como a él no le gustan las fiestas.- dijo sarcásticamente.

- sí... pobre.- dije riendo.

- recuerdo que cuando te fuiste te daba pena reirte.

- por la ortodoncia.

- si, ahora te ríes muchos más, pero te ves igual de bonita.- esas palabras hacían que millones de mariposas volaran mi estómago.

- gracias, o gracias a mi ortodoncista.

- sí,- el se quedo en silencio unos segundos. - yo también he estado trabajando mucho.

- eso me ha dicho Gael.

- mi padre esta poniéndome al día, con todo lo que debo hacer. Hay días en los que se me pasa la hora de la comida.

- no deberías.

- lo se. Pero estoy tan ocupado que cuando veo la hora son las 3 de la tarde y no he almorzado.

- debes cuidarte, serás el rey y nadie quiere ver a su rey enfermo.

Hablamos un par de horas sobre como había sido mi vida en la universidad, cómo me afectó estar lejos de mi familia hasta que vimos que era casi de madrugada y me acompañó junto a unos guardias hasta mi casa.

- Enara, no tengo tu numero de teléfono.

- hasta hora no había sido necesario, apuntaló.- el saco su celular y le dicte mi teléfono.

- te llamaré para que guardes el mio.

- ok, gracias por acompañarme, me iré a dormir, mañana tengo que salir con otra amiga.

- descansa.- me dijo para darme un beso en la mejilla.

- tu también.

Esperó que entrara a mi casa y se fue, siempre fui la que le ocultaba las travesuras a mi hermano y a Izan, todo el mundo decía que para poder llegar a ellos debían pasar primero por mí , si no me caían bien a mí, a ellos menos; los maestros nos llamaban los tres mosqueteros, eramos inseparables, muchas veces me buscaban cuando ellos se desaparecían, porque sabían que yo sabría dónde estarían.

Ahora esta tarea de ser la casamentera de Izan era una tarea extraña, no se por que no me gustaba esa idea de verlo con una mujer, saber que él se casará en pocos meses me causa un poco de, tristeza no se porqué.

Me coloque mi pijama, me cepille los dientes y lave la cara, cuando se acosté en la cama, me llego un mensaje.

-soy Izan, te escribí porque no se si ya duermes, puedes guardar mi número como EL Príncipe Izan o el rey Izan, como quieras o solamente Izan, el de siempre.

-aun no me duermo pero ya guardaré su numero futuro rey.- Respondí y me dormí con una sonrisa en los labios.

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Era mediodía y yo ya no soportaba a esta chica, es la más cabeza hueca de todas, creo que engaña sus padres diciéndole que estudia en la universidad. Es superficial y egocéntrica, menos mal no le he dicho que está entre las candidatas a ser la reina, saldría volando de lo inflado que quedaría su ego.

Me llego un mensaje de Izan, no se porque me emociono como si fuera la primera vez que alguien importante me escribe.

-¿como ha estado tu día?

-un poco aburrido, esta chica es cabeza hueca.

- jajaja, creo que cualquiera a tu lado es una cabeza hueca.

-ella aún más. ¿ya comiste?

-aun no, estoy esperando a Gael comeré con él.

-tendrás mejor compañía que yo.

-podemos cenar juntos, si quieres.

-¿tendrá tiempo el futuro rey para una vieja amiga?

-para ti siempre habrá tiempo, Enara.

¿Tiempo para mí ?, veamos eso cuando encuentre a su esposa, ok creo que suena como una mujer celosa, no debería celar a un amigo que es como un hermano, además es el futuro rey.

Cuando terminamos de almorzar, la candidata y yo nos despedimos en la entrada del centro comercial y me fui al castillo, en el camino me repetía las razones por las cuales la descalificaban, cuando llegue debo decirle a la reina el porque, por lo que me ha dicho no quedan sino un par de chicas.

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¿como están?... gracias por leer.