Se busca una Reina EN EDICIÓN

Cap 13/ reinar para ustedes y por ustedes

Suni sacó uno de los vestidos que nunca había enseñado a nadie, era de color bronce, ceñido al cuerpo con escote en la espalda y cuello alto, marco donde debía hacer la modificaciones y me dijo que lo tendría en casa dentro de dos días. Después escogemos los zapatos en unas de las tienda favoritas de Sam me llevo a casa.

— gracias por todo Sam. —dije antes de salir del auto.

— no hay de que Enara, ¿sabes?, estoy muy feliz por ti.

— me gustaría que lo de ustedes se dé muy pronto. — dije viendo que mi hermano salía de la casa con Izan, mi corazon se acelero y sali del auto, cuando el me vio no pudo ocultar su alegría con esa sonrisa tan bonita.

— Izan.— dije para correr abrazarlo y así saciar la ganas tan grandes que tenía de sentirlo cerca.

— mi amor.— dijo, aunque tenemos muy poco días justos nunca me había dicho así , sonaba tan lindo.

— ¿que haces aqui?—pregunté.

— hermana yo muy bien ¿y tu?— dijo Gael.

— hermano.— dije para colocarme a la par de Izan y el me tono de la cintura y me trajo hacia si. — Sam está en el auto. — el cambio de color y se le noto por encima la nervioso que estaba.— anda.— se acercó al auto y comenzó a hablar con Samantha.

— debemos organizar una cita doble. — dijo Izan.

— sí, entonces, ¿qué haces aquí?.

— oh, sí, vine a traerte algo, quería dártelo pero como no llegabas te lo deje con Mirta, ven te lo daré.— entramos a la casa y en la mesa de la cocina estaba una caja de tamaño considerable, de color púrpura oscuro de terciopelo. — es para ti.— Abrí la caja y en ella había una tiara, era muy delicada, sin llevar muchos diamantes ni nada exagerada, era tan bonita, como si yo la hubiera escogido. — es tuya.— dijo dejándome sin palabras. — desde el viernes serás la princesa de Erianthe, la mande hacer para ti.

— wow, Izan yo no sé qué decir. Sabes que no es mi estilo.

— Solo la llevaras en eventos importantes, como en mi coronación, la usarás hasta el día de nuestra boda ese día llevas una diferente, ya que serás la reina. — eran tantas cosas al mismo tiempo. — siempre será tuya.

— gracias.— dije, tratando parecer serena, aunque en fondo me muero de los nervios

— yo también estoy aterrado.— trato de tranquilizarme.

— pues disimulas muy bien. — sonrío falsamente y se acercó a mí, me tomo las manos y me miró a los ojos.

— tengo que disimular, pero ante ti no puedo, mi En, nunca te lo he dicho, pero eres mi cable a tierra.

— me estás colocando mucha responsabilidad Izan tu serás el mejor rey.

— porque tú estarás conmigo. — dijo acortando la distancia que había entre nosotros.

— creo que yo necesitaré mas de ti que tú de mí.

— eso lo veremos cuando seas mi esposa y estemos gobernando, tal vez tenga al frente la reina más resaltante de la historia de Erianthe. — dicho esto me beso.

Sus palabras eran como una inyección de ánimo, saber que para él era importante mi presencia en su vida me llenaba de coraje para enfrentar todo lo que se nos venía.

Un matrimonio y un reinado en los cuales no quiero fallar.

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POV IZAN

Mis manos están mojadas, mi estómago está revuelto, todo esto sumado a que no he dormido mucho estos últimos días pensando en la relación del pueblo cuando se anuncie que en dos meses me coronan como rey de Erianthe. Estoy esperando a mis padres para entrar juntos a la gala, Enara me envió un mensaje diciendo que ya estaba aquí, al igual que yo se que esta muy nerviosa. Mis padres entraron por el pasillo que está custodiado por guardias ellos se ven muy tranquilos, mi madre siempre muy elegante y mi padre la lleva de la mano siempre se han visto muy enamorados.

— hijo.— dijo mi padre.— es hora.— yo asentí con la cabeza, ellos pasaron delante de mi, los anuncian y luego a mi. Había un podio para dar el anuncio la gente hacía una reverencia hacia nosotros y en primera fila la vi, del brazo de su hermano llevaba un vestido de color bronce que se le veía espectacular, cuando nuestras miradas se cruzaron ella me dedicó una sonrisa tranquilizadora, me perdí en ella por unos segundos, hasta que mi madre me sacó del trance.

—¿listo?— pregunto , se coloco a mi lado y yo asentí.

— querido pueblo de Erianthe.— dijo mi padre.— estamos aquí para celebrar nuestra gala benéfica este año está dedicada a los niños del hospital oncológico infantil de la provincia de Axelia, donde se atiende más de 100 casos de niños que padecen de esta enfermedad al mes. Para ellos y sus familias, todo nuestro apoyo y respeto. — la gente comenzó a aplaudir. — por otro lado queremos hacer dos anuncios. — mi madre me apretó el brazo levemente. — llevo 27 años reinado, hemos tenido momentos buenos y malos, justo ustedes he vivido los mejores momentos de mi vida y también los peores, ustedes vieron nacer y crecer a mi hijo, quien hoy en día es un hombre, para mi es un placer anunciar que en dos meses el asumirá el reinado.— se escuchaba la murmuración de la gente mi corazón se aceleró. — para dar el otro anuncio les presento al futuro rey de Erianthe, Izan Martin Jones.— la gente aplaudía y sonreía, muchas de esas sonrisa son falsas pero son cosas que como príncipe he vivido ya, ahora era tiempo de hablarles.

Pov Enara.

— Pueblo de Erianthe, quiero que sepan que para mi será un placer reinar para ustedes y por ustedes, además se que contare con el apoyo del parlamento y el de mis padres.— se que Izan está muy nervioso, no deja mover los dedos mientras habla al pueblo. — Como saben por ley para asumir el trono debo estar casado o comprometido.— le gente empezó a murmurar de nuevo. — pues quiero aquí frente a ustedes presentarles a mi futura esposa.— mi corazón se quería salir del pecho — ella será su reina y espero que se robe sus corazones como lo hizo conmigo. Hoy aquí la coronaremos como la princesa de Erianthe hasta que nos casemos y sea oficialmente mi reina. — mientras decía esto entraron lo guardias que custodiaban mi tiara y colocaron el cojín en el suelo para la juramentación.

— es tu turno hermanita, se feliz.— me susurro Gael al oído.

— les presento a Enara Bellamy.— al decir esto Gael me todo de la mano y me ayudo a subir al podio, mis ojos estaba fijo en Izan quien me esperaba con una sonrisa enorme. Al llegar frente a él tomó mi mano y nos colocamos frente a frente para que el pueblo viera lo que estaba apunto de suceder.

— hola.— le dije bajito.

— hola amor.— me dijo bajito también mientras sacaba algo de su bolsillo. Colocó una de sus rodillas en el suelo y me miró fijo a los ojos.— Erana, ¿me darías el honor de ser mi esposa?— me quedé en silencio, no esperaba verlo así, en sus manos llevaba una cajita, cuando la abrió vi el anillo más hermoso que he visto, me quedé unos segundo viéndolo, era tan lindo, muy sencillo y delicado, me impresiona saber que Izan sabe mis gustos.

— sí acepto.— prácticamente grité de la emoción. Y mi impulso fue besarlo frente a todo el mundo.

— gracias.— me dijo mientras me colocaba el anillo.

Luego de eso se inició la breve ceremonia donde me nombraron princesa, La reina me hizo repetir un juramento y luego colocó la tiara en mi cabeza, pesa más de lo que pensé, pero el peso físico no se compara con el peso moral y político que hay en mi cabeza en estos momentos.

La gala pasó tan rápido que no tuve tiempo de disfrutarla, la gente no paraba de felicitarme y hacerme preguntas imprudentes y fuera de lugar. Sin duda alguna el mejor momento fue cuando Izan me pido matrimonio y cuando bailamos fueron solo unos cortos minutos, pero fueron los mejores de toda la gala. Cuando llegue a casa caí rendida y no supe mas de mi hasta el día siguiente a las 11 de la mañana. 

Actualizado el 1/03/2019