Se busca una Reina EN EDICIÓN

CAP 15 /estoy orgulloso de ti.

El día de hoy estuvo agotador, cuando llegamos a la primera parada de la gira, estuvimos recorriendo los refugios de la región, vernos les daba una inyección de esperanza a la gente, además de las cosas que les pudimos dar, vi gente llorando por familiares desaparecidos o que fallecieron, algunos niños se acercaban a nosotras para darnos besos y la gracias por lo que le llevamos. Ya en el avión donde dormiremos esta noche mientras viajamos a otro destino, Sam no deja de sonreír al textear por teléfono, imagino que habla con mi hermano, mi madre y la reina ya duermen mientras yo trato de leer un bendito libro, cuando mi teléfono suena y lo que veo en la pantalla me alegra el momento.

—Ena, amor.— dijo mi prometido.

— Hola, Izan. Te extraño.

— yo igual, no sabes cuanto.

— ¿que tal tu día?— pregunte.

— terrible, de junta en junta. ¿Y tú?

— muy pesado, pero es muy lindo ver a la gente, sabes, ver la cara de la gente cuando les llega ayuda es muy bonito.

— que bueno que te guste, amor eso lo veras siempre, por eso amo esto.

— poco a poco, me acostumbrare.

Hablamos un buen rato hasta que empiece a balbucear del cansancio y nos despedimos, esa noche dormí como una bebe.

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Jueves ya llevamos 4 días de gira, extraño mi cama, extraño mi casa, a mi novio, a mis niños de la escuela, extraño la comida Mirta, extraño todo; pobre mi Izan que le toca hacer esto seguido. Por fin hoy regresaremos a casa después de esta visita, mi madre está relativamente nerviosa al igual que la reina. Mientras vamos en el auto vemos que hay grafitis y carteles en contra de la familia real en las calles de esta pueblo, Sam, me toma la mano para tranquilizarme un poco.

— la gente está pidiendo que hables tú , Enara. — dijo la reina.

— no lo veo prudente, aquí no.— contestó mi madre.

— yo no tengo problema.— trate de sonar decidida.

— no es necesario hija.— me dijo mi madre.

— por favor Marta, será mejor darles lo que pidan.— la situación era un poco confusa. Estamos en un pueblo que es la frontera con nuestro país vecino.

— lo haré.— dije, Sam asintió en apoyo a mi. .— ¿qué es lo que debo decir?.

La reina me explico, básicamente son palabras de condolencias a las familias que sufrieron pérdidas humanas y de ánimo a las solo fueron pérdidas materiales, debo decir que estamos para ellos y que cuentan con nuestro apoyo.

Cuando llegamos a la concentración, habían muchas personas, se les notaba la tristeza en la cara, la gente se veía claramente que estaba en desnutrición.

— ¿porque son diferentes aquí?— le pregunté a mi madre.

— no es bueno que lo sepas ahora, solo te digo que seas tú, dales esperanza por favor hija no metas la pata.

Mientras a acercaba al micrófono para hablar la gente se miraba entre sí, algunos sonreían, otros murmuraban, pero cuando comencé a hablar hubo un gran silencio.

— Buenas tardes, pueblo de Erianthe, para mí es un honor estar con ustedes hoy, primero quiero extender mis condolencias de parte de la familia real y el parlamento a todas esas familias que ha sufrido una pérdida, sabemos que no es fácil por lo que están pasando, pero cuentan con nosotros para levantar de nuevo este pueblo y crear un futuro mejor para nuestros niños... — mientras hablaba vi como algunas personas asienten y como otras negaban con la cabeza.—... les hemos traído insumos medicos, ropa y alimentos para el sustento de unas semanas, ya viene en camino camiones con materiales para reconstruir las casas y las carreteras.