Pasa y pasa el tiempo; horas, días, meses. El imparable sonido de las manecillas del reloj tiene la cuenta de cómo es que su cuerpo a decaído tanto a causa de todos esos juegos promiscuos que debe jugar.
Su cabello comienza a caerse nuevamente, mechón tras mechón, dejando pequeños huecos por toda su cabeza, su extrema delgadez se hace más notoria a cada día que pasa, empieza a verse muchísimo más pálido; los ojos sin vida, amarillentos, los dientes frágiles, labios resecos.
Una rosa hermosa, sucia, marchita.
Su estómago siempre está revuelto debido al aspecto del pequeño lugar en donde él y otros chicos duermen:
Apesta a comida podrida mezclada con fluidos, las viejas ropas en el piso, y pequeños insectos anidando entre ellas. Nauseabundo.
La cabeza le da vueltas, sus oídos zumban, sus piernas flaquean; intenta remover su conciencia, aunque ya no sabe si esta sigue ahí realmente.
Su frágil cuerpo se rompe a pedazos.
Una rosa que se queda sin pétalos, agonizante.
Últimamente los abusos contra él son más frecuentes: palabras sucias, golpes, embestidas.
"Los chicos más lindos son quienes reciben toda la atención, no seas malagradecido con ellos, atiéndelos como se merecen".
JiSung está cansado.
JiSung ya no quiere ser bonito.
Traza largas líneas que se tiñen de rojo; brazos, piernas, abdomen.
"La mercancía debe mantenerse en perfectas condiciones".
Esto poco importa ya, no hay peor castigo que estar en aquella casa, ese infierno.
De cualquier forma terminará muerto.
Y ya nada parece funcionar para hacerlo sentir bien.
Las palabras llenas de cariño que ChenLe le dice son sustituidas por palabras obscenas.
Los abrazos y mimos por dolor y toques bruscos.
Las pocas cosas bonitas que logra expresar se convierten en súplicas y llanto incontrolable.
Todo es tan endeble a su alrededor. Los momentos felices que a podido conseguir se desmoronan cada vez que alguien está entre sus piernas, lastimando, sin poder hacer nada.
Los últimos restos de su sonrisa empiezan a desvanecerse cuando los demás chicos comienzan a acabar con sus vidas, como si de una epidemia se tratase.
Pastillas.
Cuerdas.
Cortes.
Lo único importante es salir de ahí, como sea.
Y JiSung quiere descansar, pero no quiere terminar con su vida.
Sigue negándose a irse, simplemente porque no quiere ver más oscuridad, sólo quiere ver un poco de luz en su camino.
Hay días en los que aún, antes de dormir se imagina como será viajar con ChenLe alrededor del mundo y su corazón late fuertemente, se comprime y las lágrimas colmadas de impotencia vuelven a bajar por sus lindos ojos.
"Deja de ser tan idiota, jamás pasará"
Intenta convencerse a sí mismo porque quizás así deje de doler tanto, pero esa es su única escapatoria de aquel lugar.
♡
Los cadáveres de los chicos son arrojados a fosas o lagos, deshaciéndose de la evidencia de su blasfemia, desechando los cuerpos, uno tras otro, sin culpa alguna, ante los pocos ojitos que ahora quedaban en la casa.
Monstruos.
"Los peores demonios son aquellos que se muestran como ángeles".
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a million men | marksung.
FanfictionTodo es bueno en el cielo, pero nunca lo conoceré.