I'm Not Okay //Gerard y Tu//

Encarcelado

Despierto con un dolor de cabeza horrible, abro los ojos y lo primero que me recibe es la brillante luz blanquecina que me encandila, tardo pocos segundos en acostumbrarme, cuando lo logro todo cobra forma, estoy en una habitación completamente blanca, varios aparatos que cuya función desconozco me rodean. ¿Esto es un hospital?

Alado de la que ahora se que es mi camilla, esta Sarah que rápido se percata que la observo, todo vuelve de golpe, Gerard me a defendido, una sonrisa involuntaria se forma en mi rostro.

—Como te sientes — pregunta, apartando un mechón rosa de su rostro.

—Donde esta Gerard— le respondo con otra pregunta, la idea de que Bob le haya hecho daño me preocupa.

—Donde debe de estar— responde con un poco de furia en su voz, me sorprendo al escucharla, ¿Porque se expresa así? Debería de estar orgullosa de su amigo.

—A que te refieres — preguntó confundida.

—Esta en la cárcel ____— me informa, mis ojos se abren a más no poder.

—Pero porque? El me salvo de Bob Sarah— le cuento, la preocupación me sube hasta la garganta.

—El te trato de violar, Bob llegó a ayudarte y Gerard le dio una tremenda golpisa, solo están esperando a que Bob levante cargos para llevar a Gee a una cárcel de verdad — pasa sus manos varias veces por su cabello irritada y decepcionada.

(...)

El sentimiento de culpa me atormenta, después de haberle contado todo a Sarah me ayudó a burlar a los doctores para salir del hospital.

Llego literal corriendo hasta la cerda donde se encuentra el esmeralda, sacarlo de esta sera difícil, Gerard alado de Bob no es nadie. 

El nudo en mi garganta me asfixia al verlo sentado en el sucio suelo con la cabeza oculta entre sus rodillas. 

—Gerard — murmuró, las lágrimas hacen su aparición una ves mas es imposible contenerlas, es sentimiento de culpa es muy grande. Sus ojos encuentran los míos, a paso rápido se acerca, verlo a través de estos fríos barrotes es demasiado para mi. 

—Como estas — pregunta, es sorprendente que a estas alturas aún se preocupe por mi.

—Gracias— susurro mirándolo a sus perfectos ojos. Las lágrimas ya han empapado mi rostro, todo para mi ha quedado en él pasado, lo importante es que Gerard me ha defendido y para mi eso es más que suficiente.

—No agradezcas, joder ____ no lo hagas— sus manos atrapan las mías, una lágrima se desliza por su mejilla, pero la limpia rápidamente — No se que hubiera hecho si s-si mierda no puedo ni pensarlo — suelta mis manos y golpea con fuerza la pared, acción que me estremece un poco.

—Te sacare de aquí — sollozo esto es demasiado duro. Se acerca nuevamente envuelve mi rostro con sus frías manos y sus pulgares limpian mis lágrimas.

—No llores — su voz es suave y tan acogedora.

—Te sacare de aquí — repito segura, en su rostro aparece una sonrisa, una pequeña sonrisa de resignación.

—Eso no es posible, ese bastardo tiene a los mejores abogados — contesta desilusionado, y aunque me niege a admitirlo, se que tiene razón.

—Porque llegaste a mi casa — preguntó desviando él tema y limpiando mis lágrimas.

—No creo que sea apropiado decírtelo en este momento — ríe por lo bajo.

—Dímelo — ordenó

—Bueno, primero creés que me creí tu noviazgo con Frank— mis ojos se abren como platos, miro el suelo nerviosa, tratando de buscar alguna excusa pero no me permite contestar ya que dice — Estoy enamorado de ti — confirma, mi corazón se paraliza pero a la ves late a gran velocidad, una descarga eléctrica recorre todo mi cuerpo, es como regresar a casa después de estar perdida y desahuciada por una larga temporada, me obligó a mirarlo buscando algún rastro que me indique que esto es una broma de mal gusto, pero no la ahí. —Y se que tu también lo estas — me sonríe ampliamente, todos los problemas, las preocupaciones, él sitio en él que nos encontramos y los fríos barrotes que nos separan desaparecen, una ves mas solo somos él y yo.

Se acerca a mi, cierro mis ojos por inercia, sus labios rosan los mios, esos labios que tanto anhele volver a sentir, dejó escapar una pequeña sonrisa deseosa de besarlo, pero temerosa de arruinar este momento.

—Alejate de él ____! — una voz se hace presente, conozco perfectamente esa voz, giro sobre mis talones, me encuentro a mi madre aproximándose a paso veloz, el sonido de sus tacones sobre él mármol resuena por el largo corredor, podría jurar que chipas salen de ella, decir que esta furiosa es poco; Pero eso no es todo, no viene sola detrás de ella la sigue Frank y Lin-z.

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