I'm Not Okay //Gerard y Tu//

Tu propiedad

Salgo de mi nueva casa con un gran suéter azul holgado, camino con él cachorro en mis brazos.

No sería difícil encontrar a la familia Lee, tal parece que todos aquí se conocen, camino varias calles admirando las áreas verdes muy cuidadas, las pequeñas pero lindas cafeterías con ese olor tan casero, los mercados con personas tan amigables definitivamente un buen lugar para vivir.

Un señor de edad mayor sentado en una banca pronuncia él nombre del pequeño animal asiendo que este salte de mis brazos lo persigo como una loca, hasta llegar con él señor que ya lo tiene en sus brazos.

—Hola — saludo agitada.

—Hola linda — me sonríe dulcemente y no evito pensar en Ana.

—Es su cacharro — él niega —Sabe donde puedo encontrar al dueño —

—Claro cariño, a tres calles de aquí, una casa roja — sonríe entregándome al cachorro.

Me despido y comienzo mi búsqueda, una casa dos casas verdes azules, pero no rojas. Comienzo a caminar mas a fondo cada ves mas desanimada, talves él señor me estaba trolleando.
Desanimada me doy la vuelta, encontrándome con la casa estaba detrás de mi todo este tiempo, la pintura roja desgastada la hacen ser desapercibida, respiro profundo antes de subir los escalones de manera.

Tocó tres veces, nada tocó otras tres veces. La puerta se abre mostrando a un chico con su cabello desordenado y sus anteojos chuecos. Señal de que estaba durmiendo me siento culpable.

—Es tuyo — preguntó nerviosa alzando al cachorro.

—Spenser pequeño travieso donde te habías metido — dice con un tono extraño tomando al cachorro entre sus delgados brazos.

—Gracias — deja al cachorro en él suelo y este corre adentro de la casa.

—No agradezcas— susurro nerviosa.

—Eres nueva por aqui— pregunta acomodando su cabello hacia enfrente. Asiento —Te gustaría pasar — dice con una sonrisa de lado.

No estaría mal conocer a nuevas personas, se ve buena persona él chico lo pienso por varios segundos pero al final aceptó.

Me guía a la gran sala, la casa es muy bonita por fuera da un aspecto pero por dentro es otra cosa.

—Te gustaría tomar algo — me mira y juega con sus dedos, señal de nerviosismo, lo que no quiero es causar incomodidad así que decido entablar una platica.

—Agua estaría bien — asiente, desaparece por él gran pasillo, me limitó a mirar las fotografías que están sobre la chimenea, dos niños en cada una uno un poco mayor y mas regordete, tal parece que tiene un hermano.

—Aqui tienes — me ofrece él vaso con la bebida.

—Por cierto soy ____ — le extiendo mi mano con una gran sonrisa.

—Lindo nombre — sonrió un poco sonrojada. —Soy Mikey un placer —toma mi mano.

—El placer es mio Mikey — le regalo mi mejor sonrisa, sus ojos me recuerdan a los de Gerard, suspiró al pensar en aquel beso al pensar en cada momento a su lado, y este chico me lo recuerda demasiado.

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