Cruce con dirección a un nuevo cambio de planes, la intensa lluvia empapa mi rostro, mientras los demás incluyendo mi madre se enloquecen por conseguir un taxi, yo me quedo quieta dejando que la fría lluvia se lleve todos los malos recuerdos.
—Vamos, no te quedes ahí parada — me grita mi madre sacándome de mi trance señala él taxi que sólo espera a que lo aborde.
(...)
Subo las escaleras con gran peresa mi sistema implora por una siesta de al menos cinco años, dejó caer las maletas en la entrada y me tumbo a dormir sin importar que mi ropa este totalmente empapada.
La sensación absurda aún no se va, pues todo este lío es irreal, algo que sólo pasa en las películas, algo que una persona común no imaginaria experimentar en algún momento de su vida, a decir verdad no creó que alguien se imagine algo de esa magnitud, todo podría ser un largo sueño porque mi mente aun no procesa todo esto, en este momento estaría llorando a todo pulmón, pero simplemente mi mente se cierra a poderlo aceptar.
(...)
Él dolor de cabeza me despierta, como si mi madre enfadada me hubiera golpeado con la sartén, pero no solo es migraña.
Mis ojos se encuentran con los brillantes rayos del sol que entran como ladrones por la ventana, terminando su recorrido en mi rostro y parte de mi cama, me incorporó dispuesta a darme una ducha y así lo hago, me desvisto y me adentro a la tibia agua, hoy buscaría a Sarah y definitivamente a Frank tenía que estar presentable, la etapa de causar lástima ya a pasado.
Salgo de casa con paraguas en mano, él clima cambia constantemente nunca se sabe cuando lo podría necesitar, tomó un taxi con dirección al gran edificio color Salmón, las personas caminan tranquilas, me preguntó que pasara por sus cabezas, tendrán problemas, serán felices, y ahora me preguntó que pensara la gente cuando me mira ami.
Solo 20 minutos han pasado y ya me encuentro frente a la puerta esperando que él valor llegue, una pregunta ronda en mi cabeza y no la puedo eliminar ¿Y si ya no le importó? Es imposible saber que después de tanto tiempo aún me considere su amiga o le llegue a importar en lo mas mínimo. Dispuesta a irme como la gran cobarde que soy algo me frena.
—¡____!— a lo lejos escuchó una voz llamándome, giro sobre mis talones encontrándome con la pequeña figura de Sarah corriendo a mi dirección y no solo eso Frank le sigue él paso, corro hasta ella un nudo en la garganta se hace presente. —¡Eres Tu!— grita una ves teniéndome en frente me abraza con fuerza y no logró evitar que unas cuantas lágrimas de felicidad caigan por mis mejillas.
—Te extrañe tanto — ahora Frank es él que me abriga entre sus brazos con fuerza.
Sarah le regala una mirada nerviosa a Frank y el se la devuelve ¿Que pasa?
—Tenemos una noticia — Sarah me mira con una gran sonrisa y toma la mano de Frank.
—¡Oh no!— chillo de felicidad sin dejarla terminar. —Me alegró tanto por ustedes — abrazo con fuerza a ambos que ríen entre mi cuello.
(...)
Un café es la mejor bebida que puede existir para relatar meses de momentos de todo tipo, todo él día en una cafetería, la pareja con una gran sonrisa de oreja a oreja hasta que comencé a contarles todo sin dejar algún detalle por ahí.
La lluvia azota con fuerza contra cualquiera sin piedad, comienzo a caminar un poco mas rápido mientras trato abrir él maldito paraguas después de un gran tirón se abre, no protege mucho pero al menos me evitara un resfriado, la combinación de lluvia y fuertes vientos causa unos fuertes escalofríos a causa del frío que abriga mi cuerpo.
Una fuerte oleada de viento provoca que mi salvador él paraguas falle provocando que la tela se haga hacia riba y por si fuera poco me lo arrebata de las manos, él viento hace danzar mi cabello húmedo mientras corro tras él inútil paraguas pero es imposible poderlo alcanzar.
Una silueta lo toma mi vista es borrosa ya que la mayor parte de mi cabello esta en mi rostro, pero aun así es inconfundible no saber que es un hombre, me acercó un poco mas notando que lo trata de arreglar, él viento en como una leve brisa para él pues parece no incomodarle en lo absoluto.
—¿Es tuyo?— me extiende él ya arreglado paraguas.
—Si gracias — lo tomó ocultándome otra ves debajo, miró al amable chico mas a detalle su largo cabello castaño sobre su rostro, labios carnosos y unos ojos hermosos.
—Soy Ray— me extiende la mano en señal de saludo —Raymond pero me dicen Ray— su sonrisa podría iluminar todo él lugar de lo dulce que es.
—Soy _____— su suave mano acaricia la mía su tacto me causa escalofríos y no a causa del frío.
—Bueno _____ sería un placer acompañarte a casa— vuelve a inundar él lugar de dulzura solo con su sonrisa. Lo pienso por unos segundos si puedo confiar en el, pero él recorrido es largo para estar sola a estas horas de la noche así que aceptó.
(...)
Él trayecto es demasiado corto, Ray es un chico dulce y demasiado comprensivo, me ha contado sobre su vida y todo tipo de cosas, la lluvia sigue pero es como si fuera un día soleado, mientras yo me resguardo debajo del paraguas él esta a mi lado, apuntó de llegar a nuestro destino.
Y todo se detiene.
Mi corazón colapsa al ver a Gerard afuera de mi casa total y completamente empapado, sus manos en sus bolsillos, su cabellos mojado cubriendo su frente y su mirada clavada en mi y en Ray.
¿Confiar en una dulce sonrisa? Es algo que no debemos de hacer...
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Tengo mucho sueño y lo termine para ustedes :'v
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I'm Not Okay //Gerard y Tu//
Fiksi Penggemar¿Y si la vida es un sueño, y la muerte nos despierta?