I'm Not Okay //Gerard y Tu//

Lo Que Tu No Sabes...

Suspire cerrando los ojos y bajando mi cabeza, estaba agotada en todos los sentidos, esto no tuvo que haber pasado, escuchó como Gerard cuenta lo sucedido al médico, niega repetidas veces frustrado al tener que repetir lo que acaba de decir gracias a la estupidez del doctor.

—¿Estas bien? — Gerard se reúne conmigo, con su pulgar acaricia mi mejilla, disfrutó de su caricia cerrando los ojos por un momento, dejándome perder por él amor que le tengo al chico frente ami.

—¿Como estas tu?— preguntó apartando su mano con cuidado.

—Bien, supongo — responde pero es evidente que no lo esta, quien estaría bien al casi arrebatarle la vida a una chica enamorada.

—Tienes que localizar a su familia — ordeno removiendome en mi asiento. Notó como se tensa y despia la mirada, pero lo dejo pasar.

—Ella no tiene familia — susurra, pasa sus manos por su rostro después las posa en sus rodillas impulsándose para incorporase. —Regreso en un momento — anuncia sin mirarme, y sale por él largo pasillo, algo dentro de mi esta alerta, se que algo me oculta pero no es él momento para preguntar, trató de calmarme.

(...)

Tres horas han pasado y Gerard no regresa, yo me reuso a ir en su búsqueda, con un vaso de café humeante en mi mano espero un poco más.

Él doctor sale de la habitación, llenando una hoja color crema, me acercó rápidamente llamando su atención.

—¿Como esta?— preguntó temerosa.

—Bien no hay de que preocuparse, en unos momentos se hara él alta. — suelto todo él aire retenido, me alegra haber llamado rápido a la ambulancia.

—Puedes entrar— me informa y comienza a caminar, mis manos comienzan a sudar, me preguntó si sera bueno entrar, pero ahí tantas preguntas que ella me podría responder y sin pensar entro.

—Hola— murmuro cerrando la puerta detrás de mi, me quedo quieta esperando un grito pero me sorprendo al escucharla hablar con tranquilidad.

—Hola— contesta mirándome mientas juega con un hilo que sale de la manta que la cubre.

—Lo siento — ámbito, no se que decir mas que disculparme por todo él daño.

—No es tu culpa — suelta desganada. —Es de él — murmura con un poco de enfado.

—¿Porque lo dices? — me acercó un poco más, no se queja así que término sentándome al borde de la camilla.

—Yo siempre se lo di todo y no fue suficiente— suspira — Creí que esta ves seria diferente. — la ansiedad me consume ante sus palabras quiero preguntar y preguntar pero solo me quedó en silencio sin encontrar las palabras adecuadas. —Sabes él era mi novio él me amaba tanto como te ama ahora a ti — suelta una pequeña risa ante él recuerdo, nose que pensar talves este alucinando. —Me abandonó esa noche y se que también te abandonara a ti— sus palabras me hacen enfadar tanto, pero me controló.

—¿Porque crees eso? — susurro, quiero saber más, en este momento soy una niña pequeña e indefensa, Linz sabe cosas que yo no eso me hace indefensa ante ella.

—¿Porque?— suelta una risotada, logra intimidarme. — Yo era todo para él, hasta que él alcohol y las drogas lo consumieron. — su voz comienza a romperse pero continua. —Aun así yo estaba con él... siempre— limpia unas cuantas lágrimas de sus pálidas mejillas, me ordeno seguir aquí y escucharla aunque lo que tenga que revelar no sea de mi agrado. — Una noche después de ignorarme como siempre lo hacia, me pide dinero yo no tenía ese fue mi error — frunce los labios, claro esta que le duele recordarlo, me siento culpable por haberle preguntarlo.

—¿Y que paso? — tomo su mano, en este momento solo veo dolor en ella, en una chica que a pesar de todo esta enamorada.

—Comenzó a gritarme, su aspecto era fatal, me dolía verlo así sólo por no tener dinero para sus vicios— le da un leve apretón a mi mano y me ve directo a los ojos — Me propuso robar un local y acepte, lo amaba tanto no podía verlo así de ansioso por no poder consumir más— su mirada cambia a una inexpresiva cargada de decepción y aparta mi mano bruscamente. —La policía llegó — suelta una risa irónica antes de continuar. — Y me dejo ahí, no me ayudó a salir... Aún así yo no lo delate, mi padre me hecho de casa, creí que Gerard estaría esperando por mi pero él ya se había ido de New Jersey sin siquiera avisarme — rompe en llanto, y noto que lágrimas también salen de mi. — Y como la adolescente enamorada lo seguí hasta aquí — tira de sus cabellos negros frustrada y destrozada. — ¡Y tu me lo has quitado!— grita bañada en lágrimas, me incorporó sin saber que hacer, toma él pequeño florero y lo hace añicos en él suelo.

Salgo de ahí temblando, sin saber quien es realmente él chico que amo, limpio mis lágrimas, camino veloz a la salida, miró a todos lados, me encuentro con Gerard aproximándose con sus manos en los bolsillos, sonríe al verme pero aparto la mirada y comienzo a caminar.

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