Malú & Pablo López ~El Secreto~ 2 Temporada

Capítulo 50

Malu

Aquellos niños me regalaban momentos increíbles en aquel lugar, y como no hacerlo, si me recordaban a mi niña.
Llegamos a la orilla, y ambos soltaron mis brazos para salir ambos a correr a lados contrarios. Uno de ellos, se agachó para hacer una especie de bola con la tierra húmeda.

-Ey haber si os hacéis daño.-Dije mirandolos a ambos.-No es mejor sólo pillaros?.-Pregunte intentando convencerles un poco.

-Si mejor.-Sijo uno de ellos correteando al otro.

Me hicieron correr un poco detrás de ellos también,  estos niños tenían hoy demasiada energia, cosa que yo andaba hoy a falta de ella, si estuviera en casa ya me fuera tomado algún que otro café a escondidas para que este ánimo subiera un poco.
Pasamos un rato jugando a aquel extraño juego que se habían inventado estos dos torbellinos, para hacer su día un poco más ameno.
Al conseguir pillar a Leo el hermano más alto de los dos, me tuve que parar por unos segundos a coger aire, a normalizar mi respiración  que empezaba a volverse un poco alterada por tantas carreras, no sabía si era por  haber estado corriendo tanto, por haber estado al sol, o simplemente que aquel cansancio termino por apoderarse de mi.
Me agache levemente, mientras que no me quedo de otra que sujetarme con la mano del pequeño para no terminar de caerme del todo.

-Malu, que te pasa?.-Escuché que decía Leo, mientras que yo lo escuchaba con un poco de retumbe en mis oídos.

-Solo necesito sentarme un rato y ahora seguimos jugando.-le dije un poco fatigada.

Guillermo el otro hermano, se acercó a ver a su abuelo mientras que yo aún seguí a agachaba intentando respirar con normalidad, para que aquel calor que me estaba empezando a subir por la columna hacía mi cuello no me afectará más de lo normal, igual que ya estaba afectando a mi visión que vea como Víctor y Guille se iban acercando, haciendo que yo los viera a ambos dobles.

-*Joven Malu, Se encuentra muy blanca, sus labios no tienen color, se encuentra bien?.-* Me pregunto en aquel inglés, que si no lo podía entender estando con mis t sentidos ahora que escuchaba distorsionado y veía doble, iba a entender menos.

Yo subi mi cabeza dirigiendo mi mirada a los ojos de aquel señor, perdiendo la poca visión que me quedaba.
Todo aquello se volvió negro, tan negro como el cielo nocturno sin estrellas y sin luna.
Caí sin previo aviso sobre la arena, ya que aquel niño tan pequeño no pudo soportar mi peso, dejándome caer allí, como si me tratará de un muñeco inerte.

Víctor

Al ver como aquella muchacha se desploman de aquella manera en el suelo de la playa, y no podía llevarla a ninguna parte, no quería que me echarán la culpa a mi de algo que no he echo.
Debía de avisarle a aquel muchacho que parecía que era su pareja.
Al comprobar que tenia pulso,la cogí en brazos, apenas pesaba su cuerpo inconciente, la deje debajo de un árbol recostada a la sombra, mientras que dejaba a los niños a cargo de ella, yo fui a buscar a su pareja.
Busque por la zonas de las cabañas preguntando uno a uno si lo habían visto, el médico que estaba entre nosotros se fue a la playa, donde yo había dejado a la muchacha.
Paso un buen rato, cuando lo vi aparecer acompañado por el joven que nos ayudaba a comunicarnos con los españoles muchas veces.

-*Eres el novio de la muchacha de cabellos castaños, la joven delgados, que a mis nietos le encanta jugar con ella verdad?.*- Le dije, haciendo que el se diera la vuelta, intentando entender lo que le había dicho.

-Si, soy yo por que?.-Me contestó el  en un inglés entendible por mi, mientras que me miraba extrañado.

-*Tienes que venir a la playa conmigo, ella no está bien .-* Le dije mientras que su cara fue cambiando a una de temor completamente.