De haber escuchado a Rubén en no hubiera pasado por uno de los momentos más incómodos de toda mi vida.
Estaba en una cena con los padres de Adam y Kath ¿Qué hacía yo acá? pues eso tiene una historia un tanto peculiar que incluye a Rosie, Adam y Klahr.
Una semana antes...
Vamos de una vez, Mark, tu puedes tu puedes
Oye no es tan difícil llamarla, preguntarle cómo está e invitarla a cenar
Vamos de una vez, hombre, tu puedes, tu puedes
Eso me repetía internamente, llevaba una hora con el teléfono en mano hace unos días luego de aceptar ser el padrino en la boda de Kath, me había topado con Rosie y luego de un momento muy pero muy incómodo donde ella ni siquiera me volteaba a ver - cuando ella había sido la del error en primer lugar- todo había vuelto a la normalidad y habíamos pasado unas buenas horas hablando en la terraza de Watson en cuanto ella y sus abuelos habían cerrado la cafetería.
Las miradas picaras de Doña Rosita no se me habían pasado desapercibidas ni tampoco el como Rosie se ponía colorada y le hacía señas para que dejara de estar molestando.
Me causo gracias esa situación y aproveche para molestarla diciéndole que parecía un tomate y que si seguía hacía lo más probable era que explotará y las paredes resultaran con Ketchup...
Ya saben porque la Ketchup está hecha de tomates machacados...déjenme yo sé que da risa.
Pero al parecer a ella mi chiste no le causó gracia y solo se me quedó viendo con cara de ¿Pero qué rayos? así que mejor decidí no volver a decirle otros de mis chistes por esa noche. Al parecer no estaba preparada para mi humor.
La estaba llamando porque ella me había mencionado que tenía ganas de ver esa película animada de un toro que estaba en cartelera y yo pues ... Yo quería estar con ella
Había echado de menos a Rosie, no voy a negarlo. Era una muy buena amiga y pasaba muy buenos momentos a su lado, no voy a negar lo hermosa que es porque no soy ciego . Puedo admitir que es una de las mujeres más bellas que he visto en mi vida y que siento una innegable atracción hacia ella.
No estoy de acuerdo en cómo se comportó con Katherine la otra noche, pero ellas han de tener su motivos y algo que mi abuela siempre me enseñó es que en líos de faldas es mejor no meterse y por un momento ya había olvidado el consejo de mi abuelita.
Si ella se hubiese dado cuenta un chancletazo hubiera sido lo más suave que hubiera recibido.
¿Por qué no la llamaba? Estaba demasiado nervioso de que me rechazará
¡LLÁMALA YA!
Tocan a mi puerta justo cuando estaba por presionar el botón de llamada, ni tiempo de ver quien era me dio por que en cuanto abrí la puerta alguien entra y me pasa empujando
¿Qué diablos?
--Yo no sé qué estabas pensando, pero no te permitiré que estés con esa chica, no es buena y si de verdad te quisieras un poco, te alejarás de ella...
--Hola a ti también-- le digo-- en primera no se entra así al apartamento de otra persona en segunda ¿Quién te crees para venir a hablarme así? ---estoy molesto que ella sea amiga de mi amiga no quiere decir que tengamos esa confianza, Sara nunca ha sido de mi total agrado pero hasta hoy no habíamos tenido ningún problema.
--Pues me considero tu amiga—error, no somos amigos--y si te digo las cosas es porque me preocupo por ti esa chica no es buena para ti, te va a hacer daño

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Dos Cafés, por favor
Ficción GeneralMark siempre ha estado enamorado de su mejor amiga, ella nunca lo ha visto como algo más que eso...Si es otro caído en la batalla contra la friendzone, pero como a todos llega alguien que le hace ver más allá de Katherine Watson, alguien que cambia...