Algo anda mal [ HISTORIA YAOI ]

Capítulo 18

Narra Yerai

Me fui antes que Lamia y Drina. Evan ya se había ido por lo que empezaron a hablar de quién la mamaba mejor. Yo no quería seguir escuchando así que me fui.

Llamé a la puerta de mi casa ya que se me olvidaron las llaves. Tardaron en abrir, a lo que yo empiezo a tocar el timbre infinitas veces mientras aporreo la puerta. Esta se abre furiosamente. Miré hacia arriba pensando que sería mi primo ya que la persona que me abrió tenía el cuerpo de un hombre y era alto.

Me quedé atónito.

Me había confundido de casa. ¿Desde cuándo Jackson vivía en mi calle? No cuadra con lo que ha contado Lamia en la cafetería, ya que se hubiese pasado ella a por él.

Me disculpé tan rápido que apenas me entendí y me di la vuelta para irme corriendo, pero él me agarró por la camisa arrastrándome adentro de la casa.

-No te has confundido fenómeno, esta es tú casa-

Miré alrededor y efectivamente, era mi casa. Me removí zafando me del agarre del maldito gigante. ¿Qué coño hacía este en mi casa?

-¿Qué mierda haces tú en mi casa?- Dije separando me de él lo más lejos posible.

Jackson se acercó peligrosamente a mi y me agarró por el cuello de mi camisa, levantando levemente mis pies del suelo.

-No me hables así maldito mocoso- Me tiró contra la pared y caí al suelo. Sentí un pinchazo en la muñeca que tenía lastimada y dolor en la parte trasera de la cabeza. Oh no, otra vez.

Se me llenaron los ojos de lágrimas. Ni en mi propia casa me libraba de las personas que me odiaban.

Jackson chasqueó la lengua al parecer molesto. ¿Hola? Yo tendría que estar molesto, no ese imbécil. Se acercó a mí y yo temblé inconscientemente. Le tenía mucho miedo, pero no podía evitar hablarle mal. Me levantó del brazo izquierdo y me dio leves palmadas en la cabeza, cómo si fuese un perro.

¿WHAT? ¿Se atrevía a tratarme como a un perro después de casi pegarme en mi propia casa? Si, se atrevía.

No le quité la mano. Tenía miedo de cómo iba a reaccionar.

-Vine porque tu primo me invitó- Dijo después de un rato.

Me acordé de mi corto pero raro sueño, y no pude evitar sonrojarme. ¿Por qué se conocían? Sólo se vieron una vez, y no hablaron directamente. Mi primo se asomó a la entrada, donde nosotros estábamos.

-¿Qué haces aquí?- Preguntó molesto.

Era mi casa, yo entraba y salía las veces que me daba la gana. Entonces caí en algo, ¿y si los había interrumpido?

Me volví a sonrojar. No, ninguno de estos dos pueden ser gays, o por lo menos Jackson no, ya que se a acostado con casi todas las chicas del instituto.

-¿Por qué te sonrojas? ¿Acaso te gustó?- Siguió preguntando mi primo. -Ya sé que estoy para chuparme los dedos, pero eso del incesto como que no me va-

Me puse todavía más rojo. No negaba que no le iban los hombres. OMG. Seguro que son novios y yo los he interrumpido.

-¡Lo siento! ¡No os volveré a interrumpir!- Dije yéndome corriendo de allí.

Subí las escaleras a toda prisa metiéndome en mi habitación. Ahora Jackson si que me iba a pegar por haberles interrumpido.

Narra Luca

Me avergoncé mucho de cómo me miraba ese camarero. ¿Así miraba yo a mis queridos ukes? Ahora entiendo porqué algunos de ellos se excusaban y se iban corriendo.