Capítulo 17. Niñera Con Nombre Feo

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La tensión que había en el aire podía cortarse con una tijera. El silencio era terrible y Niall y yo lo único que hacíamos era aguantar la respiración. Jamás hubiera imaginado poder ver a Harry Styles y a Chase Walker en una misma habitación. Ninguno decía nada. Las expresiones en su rostro decían más que mil palabras, y si las miradas mataran, de seguro Greg y Dylan, al igual que Sophie, serían huérfanos de padre.

—¿Qué haces aquí?—preguntó Harry a regaña dientes. Se notaba la furia que lo consumía.

—Traje a Cora—respondió Chase, con el mismo tono lleno de veneno.—Y créeme, no estoy contento con ello, Styles.

—Nadie la obligó a nada, Walker—se defendió Harry.

Creo que debería de intervenir, por el bien de los niños.

—Chase, dale un abrazo muy fuerte a las chicas de mi parte ¿si?—sonreí con nerviosismo mientras me acercaba a ambos, intentando separarlos lo antes posible. Al parecer Niall se dio de cuenta de lo que quería porque se paró a mi lado.

—Si Chase, y dile a Lucy que lamento haberla obligado a casarse contigo... digo...—golpeé a Niall disimuladamente y lo miré con reproche.

Quizás hayan pasado años, pero Niall sigue sin diferenciar entre lo que es apropiado y lo que pudiera ganarle una golpiza.

Chase dejó de mirar a Harry y luego me miró a mí con seriedad, como si estuviera advirtiéndome algo.

—Te llamaré luego—dijo con la voz más firme que jamás había escuchado proviniendo de él. Asentí en acuerdo y este pasó por el lado de Harry, no sin antes darle un leve empujón en el hombro.—Cuidado con lo que hagas Styles, porque créeme, te estaré vigilando.

—¿Es una amenaza?—preguntó Harry, girándose a ver a Chase con enojo. Temía a que se golpearan en cualquier momento.

—No—dijo él, acercándose aún más a Harry. No importaba que Harry le ganara en altura, Chase no se dejaría pisotear por nadie.—Es una advertencia.

—¡Papá!

Gracias al cielo. Los niños siempre son tan justos.

—¡Greg!—exclamó Harry, dándose la vuelta y mostrando su mejor sonrisa mientras se agachaba y tomaba al pequeño en brazos.—¿Cómo te fue con el tío Horan?

—¡Bien! Collin me persiguió y me tuve que esconder detrás del novio de Cora—dijo señalado a Chase.

—No somos novios—me apresuré a decir.

Greg levantó sus cejas e intentó susurrarle a Harry como aquella vez en la cocina, pero como aquella vez, también falló al hacerlo.

—¿Entonces es tu novia?

Mi vista se posó de Chase a Harry y luego a Niall en menos de un segundo. Chase tenía cara de perro, Harry tenía cara de no saber qué decir y Niall tenía cara de sentirse incómodo.

—¡Collin! ¡Ya nos vamos! ¡Esta telenovela no es apta para personas con problemas en el corazón!—gritó Niall.

Que sutil eres Horan, que sutil.

—Un gusto en verte Cora—dijo Niall con una sonrisa mientras depositaba un ruidoso beso en mi mejilla. Yo reí.—Pequeño G—chocó los puños con Greg.—Señor capitán—hizo un asentimiento hacia Harry.—Caminante—tomó a Chase por el brazo.—Te acompaño a la puerta.

Ni siquiera tuvo tiempo para nada más y ambos salieron de la casa dejando un incómodo silencio en la casa. Por suerte, había un pequeño niño en medio que nos sacó de ese apuro.

Niñera Otra VezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora