Dos en uno [Draco/Ron]

Navidad y cambios

Al día siguiente, me desperté con el odioso sonido del despertador. Si, usaba cosas muggles, siempre llevaba el despertador al colegio, ya que vivía con muggles.

Me levanté lentamente, estaba muy cansada por el partido, y además tenía que entrenar. Un domingo, cuando lo único que quería hacer era dormir.

Bajé a la Sala Común, y me encontré una cosa no muy agradable. Lavender y Ron dandose amor. ¿Es que no podían irse a otro sitio? Lo tenían que hacer en sitios públicos.

'Yo no haría eso con Malfoy' pensé. No sabía ni cómo podía pensar tal cosa.

Cuando pasé por delante de la parejita, Lavender paró y me miró.

-Cariño, ¿no vas a ir con ella? Yo ire dentro de diez minutos.- dijo, con un tono de voz insoportable.

Ron miró a su novia y luego a mi, muy cabreado. Se levantó, mosqueado.

-Vale. Vamos, ___.

No me lo podía creer, Ron, el que había estado una semana entera ignorandome, iba a ir conmigo al estadio.

Se despidió (dándole un beso a Lavender, que evité mirar la escena) y fuimos al campo de Quidditch.

-¿Harry ha venido antes?- pregunté, para evitar el silencio incómodo.

No me respondió. ''Vale, si lo que quieres es perder a una amiga, lo has conseguido´´ pensé, y empecé a andar más rápido que él, para dejarlo atrás. Entré al vestuario y me cambié rápidamente, estaba muy cabreado, no iba a volver a hablar a Ron en la vida. Maldito idiota...

-Bueno, vamos a empezar.- dijo Harry, cuando estabamos todos en el campo, ya vestidos.

Lanzó todas las pelotas al aire y empezamos a entrenar, cada uno por su lado. Lo peor fue que yo tuve que entrenar con Ron, lanzándole la pelota para que no se metiese por el aro. Mientras estaba jugando, oía los animos de Lavender que venían desde el estadio, que estaba sentada. A su lado, estaba Malfoy con otros cuatro de Slytherin que no conocía.

No podía concentrarme con la idiota de Lavender, no paraba de gritar cosas extremadamente cursis, y le lanzé la pelota tan fuerte a Ron, que le dí en toda la cara, y casi se cayó de la escoba.

-¡Maldita! ¡Cuidado con lo que haces!- gritaba Lavender.

Malfoy empezó a aplaudir y reír, por lo visto disfrutaba ver como me vengaba.

| Narra Malfoy |

Me encantaba como jugaba ___, era muy buena, y más cuando se ponía celosa. Al parecer, Ron y ella ya no eran amigos, o eso me habían dicho mis amigos. Eso quería decir que tenía más posibilidades de que ella fuese mía.

Bueno, la verdad era que me había fijado en ella el primer año de Hogwarts, pero nunca tuve la oportunidad de hablar con ella. Siempre estaba con Ron, pensé que eran novios, así que me rendí lo más rápido posible. Pero aquel año cambió todo. Me dí cuenta de que necesitaba estar con ella. No sabía por qué, pero lo tenía claro.

Me encantaba. Todo, pero lo que más me gustaba de ella eran sus ojos y su carácter. La necesitaba, cuando estaba con ella podía ser yo mismo, y no el Malfoy que quería ver mi padre. Me odiaba a mí mismo, hasta que empecé a hablar con ella.

|Narra ___ |

Después de un mes todo seguía igual, solo que se acercaba la Navidad. Ron seguía ignorandome, y Harry ya estaba harto de los dos. Al parecer, Ron se estaba mosqueando con Lavender porque no le dejaba en paz, y siempre la evitaba. Según Ginny pronto dejarían de estar juntos y volvería a hablar conmigo, pero eso no iba a ocurrir, ya que no quería volver a ser su amiga. Me daba igual lo que haría para conseguirlo. Él mismo había conseguido que le odiara.

Había pasado mucho tiempo con Malfoy, y según él éramos muy amigos.

-¿Quieres que te regale algo por Navidad? -me susurró en clase de Pociones, que tuve que sentarme con él.

-Claro que no. No te gastes dinero en mí. -dije.

Y era verdad. Aunque estaba segura de que aún así me compraría algo, decidí pensar qué comprarle cuando visitamos Hogsmeade.

No se me daba bien comprar regalos, y menos para Malfoy. Al final, compre un llavero de una escoba para Harry y otra cosa para Malfoy.

El día de Navidad, me desperté y vi bastantes regalos al lado de mi cama, y, muy emocionada, decidí abrirlos.

La primera era de la señora Weasley, un jersey azul con mi nombre. Como todos los años, lo usaría como una prenda para usar por la habitación. El otro regalo era de Harry, me regaló un libro sobre Criaturas Mágicas, sabía que me llamaban la atención.

Abrí muchos regalos, menos uno. Podía ser el de Ron, pero no era muy posible. Estaba empalelado con un papel verde muy oscuro, casi negro. Lo abri y estaba una caja con el mismo color, y le quité la tapa.

Me quedé asombrada. Era un colgante precioso, era de un fénix verde y negro, no tenía ni idea de quién podría haberme regalado eso...

Me lo puse y me mire al espejo, era mucho mas bonito puesto. Se veía muy bien.

Baje a la Sala Común y abracé a Harry.

-Felíz Navidad, Harry.- sonreí- Y muchas gracias por el regalo.

-Feliz Navidad y gracias ti tambien, me encanta- dijo él, y se fijó en mi cuello- ¿Y ese collar?

-No se quién me lo ha regalado...

-Interesante... igual ha sido Ron.

-Esta claro que no.-suspire- Seguro que esta con su novia.

Entonces, Ron bajó rápidamente de su habitación mientras miraba a los lados.

-¿Qué pasa?- dijo Harry.

-¿Está Lavender aquí?- susurró.

-No, ¿es qué te da miedo?- dije, harta.

Ron me miró con cara de culpable, y añadió:

-No, es que esta obsesionada. No la aguanto.

-¿Por qué no cortas con ella?

-No puedo.

-Cobarde...- dije, y salí a los pasillos.

Menudo idiota, ahora era capaz de hablarme. No le entendía, ni a mi misma.

Me senté a comer al lado de Ginny, que estaba muy entusiasmada porque era Navidad.

-¿Que Ron no la quiere?- dijo, muy sorprendida al contarle lo de Lavender- Pues la siguiente eres tú.

-¿Qué? No entiendo nada.

-Mira, estoy segura de que esta enamorado de ti.

-Sí, claro.

-¡Lo digo en serio!- dijo, dejando el tenedor en el plato.-¿Crees que te mentiría?

-Pues... claro que no. Pero, solo somos amigos. Bueno, éramos.

-A ver. -suspiró- dejó de hablarte porque se puso celoso, todo tiene sentido, ___.

-Es normal que se ponga celoso, no le conté nada...

-Espera.- entonces tienes novio?- dijo, con los ojos como platos.

-Pues claro que no, Ginny.

-Ya... - dijo, con una sonrisita burlona- ya verás como me entero en seguida.

La mire anonadada. Ginny era muy lista para esos temas, estaba segura de que se enteraría de que tenía algo con Malfoy. Pero si sólo éramos amigos, ¿cómo iba a enterarse? A demás, siempre veía al rubio a solas. Era imposible que lo descubriera. ¿O no?