El torneo

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El día del torneo había llegado. No quería levantarme de la cama, no quería participar en la prueba. Tenía ganas de que el mundo entero se congelara.

-Tranquila, no va a ser tan malo...- Neville trató te consolarme, acariciandome la espalda mientras nos ibamos a desayunar.

-Tienes suerte de no estar a punto de morir.- suspiré triste.

-Vamos, no exageres, todo irá bien.

Después de desayunar, (más bien comer absolutamente nada) los participantes tuvimos que irnos al despacho de Dumbledore a hablar sobre lo que teníamos que hacer.

Y ahí estabamos los tres participantes: Fleur Delacour, Viktor Krum y yo. Me sentía débil junto a ellos, eran inteligentes y bastante fuertes, más que yo.

-Bueno, para la prueba lo único que podreis usar es la varita.- dijo Dumbledore, señalando la suya - Y tendréis que vestiros estas túnicas.

Cada uno de nosotros teníamos una camiseta con nuestro nombre en mayúsculas detrás.

-Por cierto...- siguió el director- en la prueba necesitareis salvar a alguien muy importante que forma parte de vuestra vida.

Me quedé helada. Solo había dos personas en el castillo que eran muy importantes para mí: Harry y Ron. No quería que les pasase nada. Entonces me acordé de Draco, pero era imposible que usaran a él como parte de la prueba, ya que nadie se había enterado de que eramos... '''amigos''.

Entonces, el director nos dirigió al jardín, y todos los alumnos estaban esperando ver de qué trataba. Empezaron a aplaudir muy emocionados, era la primera vez en muchos años que se celebraba una competición así. Me fijé en todos los alumnos, y logré ver a Harry. Pero estaba solo, al lado de Neville. Ron no estaba en ninguna parte. Harry me miró bastante preocupado. Tampoco ví a Draco. Algo iba mal.

Entonces, Dumbledore sacudió su varita y salió un laberinto desde la hierba del jardín. Me quedé paralizada. Aquel laberinto era gigante. Estaba segura de que tendría que encontrar a Ron y lograr salir, o algo parecido. 

-Alumnos.- dijo Dumbledore- ¡Silencio!- gritó, para que todos prestasen atención.- Bueno, la prueba consiste en que los participantes tendrán que entrar en este grande laberinto, y tendrán que encontrar a la persona que buscan.- nos miró a los  tres.- Supongo que ya os habréis fijado en quién falta.

La que más aterrada estaba era Fleur, al parecer, la persona que se encontraba dentro era muy muy importante para ella.

-Y eso no es todo.- prosiguió- Tendréis que encontrar el trofeo con vuestro acompañante.

¿Y si no encontraba a Ron? Por dios, a saber qué criaturas estaban allí dentro. Estaba a punto de estallar, cuando el director comenzó el torneo. Krum entró en seguida al laberinto, seguido de Fleur. Yo me quedé allí durante unos cinco segundos, tranquilizandome.

-¡VAMOS __!- gritaron Harry y Neville al unísono.

Entonces, entre. El laberinto se cerró. Estaba sola, sin nadie, en algo que probablemente era imposible. Una misión imposible: buscar a Ron.

Empecé a dar vueltas, a la izquierda y derecha, yendo de un lado para otro, sin mirar atrás. Estaba empezando a cansarme, no por el hecho de estar andando, sino que estaba muy nerviosa.

-¿Ron?- dije, desesperada.

Entonces, oí que las paredes estaban crujiendo, y de repente apareció una puerta a mi lado. Sin pensarmelo dos veces, susurré:

-Alohomora.

La puerta se abrió, y Ron me miró sonriente.

-Sabía que me encontrarías.

Entonces, me abrazó. Nos abrazamos como nunca antes lo habíamos hecho. No paraba de temblar, y Ron lo notó. Me acarició el pelo mientras decía: ''Todo va a salir bien, Tranquila... estoy contigo''

-Gracias.- susurré.

-Vamos, tenemos que encontrar el trofeo.

Ron me dió la mano, y, seguro de sí mismo, empezó a andar, y yo tras él. No parabamos de ir en todas las direcciones, y pensaba que estabamos dando vueltas todo el rato. Como si ya hubiera estado en cada lugar del laberinto unas mil veces.

Pero entonces, cuando giramos a la izquierda por enésima vez (si, lo conté) vimos el trofeo. Nos miramos el uno al otro, y sonreimos a la vez. Me encantaba la sonrisa de Ron, era tan... única, siempre real. Empezamos a correr hacia ella cada vez más rápido, hasta que al final nos encontrabamos frente a ella. ¿Tan fácil iba a ser la prueba? 

-¿Juntos? - preguntó Ron, señalando la copa.

-Juntos. - respondí, aún sin poder creermelo.

Los dos tocamos el trofeo a la vez, y el suelo empezó a dar mil vueltas. Cuando abrí los ojos, ví que estaba en un lugar que no me sonaba. El brazo me escocía más que nunca. La prueba aún no había terminado, todavía teníamos que hacer más cosas, y yo no estaba como para levantarme.

Ron empezó a examinar el lugar donde nos encontrabamos. Era un tipo de cementerio. Hacía mucho frío, y eso que estaba bien abrigada.

Entonces, un montón de figuras negras llenaron el cielo, y 'aterrizaron' en torno a nosotros. Todos llevaban máscaras, y no paraban de mirarnos.

-¿Esto forma parte de la prueba?- susurró Ron.

No tenía ni idea de lo que estaba pasando, pero no paraba de apretarme el brazo con mi otra mano. Algo malo estaba a punto de pasar, y lo presentía. Cada vez estaba más cerca.

Las personas empezaron a quitarse las máscaras, y logré reconocer a algunas personas. O mejor dicho, mortífagos: Lucius Malfoy, Bellatrix Lestrenge, Fenrir Greyback... Y... ¡¿DRACO MALFOY?!

[No me mateis por dejarlo así, pls xDD

Adivinad quien cumple años hoooooy :3 (Pista: yo xD)

Nos vemos en el siguiente caaap!]

Dos en uno [Draco/Ron]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora