✨|F i f t e e n|✨

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—¡Harry! ¡Espérame! —gritó un asfixiado Liam desde unos metros más atrás de donde ellos estaban corriendo.

—¡Mueve el culo, Payne! —ordenó su profesor de educación física, que también corría junto a ellos alrededor del campo. El castaño gruñó con desesperación. Se estaba cociendo bajo el maldito sol y correr durante veinte largos minutos lo tenía casi sin respiración. Gotas de sudor resbalaban por su frente mientras hacía un intento de correr, pero si seguía iba a desplomarse sobre el suelo de asfalto.

—Vamos, Li. No te detengas. Sólo unos minutos más y habremos terminado —dijo su mejor amigo ralentizando su paso hasta quedar justo al lado de su amigo, animándolo.

—No puedo con mi vida, Hazz —murmuró, sacando fuerzas de donde no las tenía para continuar.

—Oh venga, no seas- Hey, mira. El señor Malik se acerca —señaló el de ojos verdes.

¡Plaf!

Del susto que se dio, Liam tropezó con sus propios pies y acabó dándose de morros con el suelo. Harry en seguida se detuvo junto a él y empezó a preocuparse cuando notó el shockeado rostro de su mejor amigo que comenzó a tomar un color rojizo.

—Au —siseó el castaño de ojos marrones mirando la herida que se había abierto en su rodilla.

—¡Liam! ¿Te encuentras bien? —escuchó la voz de Zayn Malik aproximarse y su nivel de nerviosismo se disparó. Intentó sujetarse rápidamente en su mejor amigo para levantarse, pero torpemente se cayó y soltó un gemido frustrado—. Déjame ayudarte.

El profesor de rasgos árabes se agachó a su lado y con cuidado lo ayudó a ponerse de pies sujetándose a él para no perder el equilibrio.

—Estoy bien —murmuró avergonzado, mintiendo, ya que obviamente sentía el escozor en su rodilla y un hilito de sangre recorrer su pierna.

—Yo puedo acompañarle a la secretaria para curarle la herida, señor —se ofreció Harry, observando a su profesor sostener con delicadeza a su mejor amigo.

—No hace falta, Harry. Yo iré y le curaré la rodilla. Continua con la clase y haz el favor de decirle al señor Cooper que me he llevado a Liam a la secretaria —contestó con su afamado tono serio que a Liam le parecía tan sexy y picante.

—Uh... está bien —dijo algo confuso, mirándolos por última vez antes de girarse y continuar con la carrera.

—Apoya todo tu peso en mi, Liam —ordenó en una voz lenta, muy cerca de su oído. El castaño sólo pudo obedecerle y despacio consiguieron llegar al edificio. La secretaria estaba vacía y Zayn aprovechó para cerrar la puerta después de sentar a Liam en una silla. El castaño observaba desde su sitio como Malik rebuscaba en el botiquín todo lo necesario para desinfectar la herida y luego cubrirla y evitar cualquier infección.

Cuando lo tuvo todo se arrodilló frente a su alumno, humedeciendo con agua oxigenada un algodoncito. Lo pasó con delicadeza, acariciando con su otra mano el muslo izquierdo de Liam mientras el chico gemía por el escozor que le proporcionaba el algodón.

—Joder —murmuró con los ojos fuertemente apretados. Inmediatamente, los ojos del profesor Malik se encontraron con los suyos. La mirada ámbar de Zayn mostraba una seriedad intimidadora, aunque Liam pudo reconocer un toque de lujuria en ella. El castaño mordía su grueso labio inferior, mientras que la mano del moreno que no estaba curando su pierna apretaba con un poco de fuerza su muslo izquierdo. La boca de Liam se entreabrió, pero no dijo nada. Observó con atención como Zayn terminaba de curar su rodilla.

—No me gusta que maldigas —murmuró con la vista pegada en el trozo de venda que usaría para cubrir la herida.

—Uh... Yo...

—A la próxima te pondré sobre mis rodillas y azotaré tu bonito culo hasta dejarlo de un color más rojo que el de tus mejillas ahora mismo, ¿Entendido? —murmuró poniéndose en pie.

Liam balbuceó un pequeño sí, pero a penas fue entendible, debido a que se encontraba fuertemente avergonzado. A pesar de que le dejó duro debajo de sus pantaloncitos de gimnasia.

—¿Sí qué? —agachó su cuerpo hasta dejar su rostro a pocos centímetros del de Liam.

—Sí, daddy —dijo acompañado de un pequeño jadeo cuando los labios de su profesor chocaron con lo suyos de una manera violenta y salvaje. La boca de Liam se abrió, dejando paso a la lengua del mayor que exploraba ágilmente cada rinconcito en la boca de su amante y conseguía aumentar su ritmo cardíaco considerablemente. Una de las manos de Zayn lo tomó por la nuca, intensificando aquel primer beso entre ellos, mientras que las de Liam descansaban en su pecho cubierto por una camisa de un grupo de rock antiguo.

—Mierda, eso fue caliente —comentó Zayn, repartiendo pequeños besos por el cuello y las clavículas del menor—. Por desgracia, aún tengo clases que dar y tú igual.

Liam hizo un pequeño puchero.

—Yo quería otro beso —ronroneó acariciando el pecho de Zayn de manera insinuante.

—¿Qué tal si te recojo a la salida? —murmuró el profesor en su oido. Liam sonrió, dejando un pequeño beso sobre sus labios cerezas.

—Claro, daddy.


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Algo corto, lo sé.

Quiero deciros que antes de escribir esto tenía otro cap entero hecho y va Wattpad y me lo borra. Ugh, es la cosa más estresante del mundo 😑

En fin, cjauuuu

love u, daddy «ziam mayne» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora