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Jamás había pensando que se le iban a olvidar las tortillas de mamá, era lo más importante en ese momento, pero se había entrenido con su propuesta. Connor iba caminando hacía su casa, inventando una escusa, no se sabe qué podría pasar. Tal vez un castigo de un año, o peor, conociendo a su madre.

Estaba enfrente de la puerta de su casa, quizás su mamá estaba de buen humor hoy, y no le iba a preguntar. O, estaba de mal humor y le iba a ir bien mal. Abrió suavemente la puerta pensando en qué nadie lo iba a descubrir, las llaves sonaban a la hora de abrir la puerta, pero intentaba hacer la mínimo sonido, pero no funcionó. Su mamá estaba detrás de él, y Connor no se había dado cuenta, entonces dio un pequeño salto al mirar a su mamá así.

Mala suerte para él.

-Oh madre -, la madre de Connor le dio una mirada de desaprobación -mira, esque a Daniel se le cayó un pie, tuvimos que ir al hospital y después el doctor le dijo que tenía adenosín de trisfofato -el chico habló algo agitado, y nervioso, quizás su mamá ni le crea, que buena escusa

- ¿Como que a Daniel se le cayó el pie? ¿no le avisaste a sus padres? y ¿que es adenosin de...? olvidalo -su mamá estaba preocupada sí le había creído, por ahora - ¡Connor por qué no me dijiste nada! ¡las tortillas!

-Aquí están... -sonrió inocentemente.

Tal vez era hora de decirle a su madre que después de siglos, al fin le pedirá a la chica que quiere ser su novio. Pero le daría miedo de como reaccionaría su madre, se volvería extremadamente feliz. Era su sueño, el sueño hecho realidad, para una madre.

Habían terminado de cenar, estaba ellos tres; su madre, su padre y él.

-Madre...-susurró apenas audible - ¿Crees que ya era hora de tener novia?

La madre se sorprendió, creyó qué esto no lo iba escuchar nunca, estaba esperando esté momento desde hace vario tiempo, y a fin había llegado.

- ¿Por qué lo dices? -preguntó curiosa.

-Me enamoré de una chica -soltó y su mamá por tercera vez, sonrió. -Quiero hacerle una sorpresa, pedirle ser mi novia, estoy muy nervioso.

-Henry, nuestro hijo ha crecido, ya era hora de que se enamorará de alguien, pensé que iba morir soltero, y me quedaría esperando, pero llegó la hora, sólo dinos en ¿que podemos ayudarte? -lo apoyo, y su papá también lo hizo dándole la mano a su madre en forma cariñosa. Pero algo en ella se veía un tanto curiosa, entonces entre ellos se dieron una mirada, como sí ya lo habían planeado. -Cariño, llama a toda la familia, y diles qué nuestro hijo al fin se casara.

Oh no.

Chats con mi crush [Pausada Temporalmente]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora