23.

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Decido terminar los deberes antes de tocar la puerta de la habitación de Spark y preguntarle si quiere salir un rato con Miroku, Jak y conmigo. Hace tiempo que no íbamos de bar en bar, viendo algún que otro partido de fútbol o hablando de cualquier gilipollez.

La verdad es que la época de exámenes acaba de comenzar, y aunque, pronto estarán aquí las fiestas de fin de curso, he decidido ponerme a tope a estudiar para que no me pille el toro. Cuando termino de medio ordenar mi escritorio, agarro mi cartera y las llaves y salgo directo a la habitación de la derecha, para llamar a Jak, este contesta gritando que está echándose colonia. Así que voy a la habitación de enfrente, la de Miroku, que sale como un rayo y, después de sonreírme de oreja a oreja decide hacer que nuestro querido amigo amante de los videojuegso se separe de su apreciada colonia mientras yo llamo a Spark.

El rubio de bote sale rápidamente y mira divertido cómo Miroku corre escaleras abajo con la colonia de Jak seguido por su propietario, cosa que nos hace reír.

- ¡Ven aquí, cabrón!- le grita al moreno- ¡Déjame echarme colonia tranquilo!

-¡Pero es que apestas!-contestó- ¡Le hago un favor a la humanidad! La colonia huele fatal...¡y llevas más de un kilo encima! - exclamó mientras volvía a subir las escaleras

- Dramático... - escupió Jak mientras subía las escaleras al mismo ritmo que Miroku.- Inuyasha, Spark, haced algo.

Los dos nos miramos y al final decidí hablar yo.

- Nosotros vamos bajando, estamos en el coche - les dije mientras bajaba las escaleras seguido por Spark que se aguantaba la risa después de ver la cara que se le había quedado al pobre Jak.

Spark no se aguanta la risa y, cuando cruzamos la puerta de la fraternidad empieza a reírse a carcajadas. Nunca entenderemos a Jak y a su amor por las colonias.

Por fin entramos todos al coche de Spark, quien conduce tranquilo, con gafas de sol y un brazo apoyado en la ventanilla bajada. Ayer salí con Kagome y me lo pasé muy bien, y, por la cara con la que me miraron todos cuando llegué a casa, quieren saber qué tal me fue con Kagome.

Pero no, todavía no la he pedido salir y, que nos hayamos dado un par de besos no significa que estamos en una relación seria, porque ni siquiera estamos en una relación. Suspiro mirando por la ventana. De lo único que me puedo alegrar es de que no volverá con el imbécil de Bankotsu si lo nuestro no sale bien. Toda esta semana he estado saliendo con Kagome: yendo al cine, a comer, a pasear, a ver Juego de Tronos y, a estudiar... y me lo he pasado genial, pero no hemos hablado de tener una relación.

Cuando entramos en el bar y nos pedimos unas cervezas les empiezo a contar esto, mientras todos parecen querer escucharme con atención.

- No sé si lo has pensado pero, ¿y si solo querías a Kagome porque era inalcanzable? - pregunta Miroku quedándome de piedra.- Kagome te empezó a gustar cuando entraste a la universidad y viste que era mayor que tú, y después descubriste que tenía novio...

Jak, quien no suele darme consejos ni meterse en la vida amorosa de los demás, también habla:

- Miroku, es una buena teoría, pero se hubiera cansado antes y, ¿tú sigues enamorado, cierto?

Joder, ahora mismo estoy jodidamente confundido.

- Claro que la quiero, digo, quiero que sea mi novia, quiero besarla y abrazar y...

- ¿Preferirías una tarde de mimos con ella que una noche con ella en la cama? - me pregunta Spark.

Todos lo miramos como si fuera un bicho raro. ¿Qué tipo de comparación es esa?

- Parece que la cerveza y tu cabeza recién teñida no combinan muy bien, colega...- dice Miroku pasando un brazo por mis hombros - ¿Qué quieres decir?

- Piénsalo, Inuyasha y cuando tengas la respuesta dímelo. - me contestó con una sonrisa de hermano mayor- Pero piénsalo bien.

 ¿Abrazarla y besarla o estar en la cama con ella?  La respuesta es simple, ¿no?


Empieza un maratón de un capítulo al día, espero que lo disfruten~~


El Diario De Un Ojidorado {InuKag}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora