One Shots Tom Holland/ Spider-man

Tal vez en otra vida.

Personaje: Tom Holland

Advertencia: No

Observe detenidamente el anillo que portaba un brillante diamante en mi dedo, era precioso, muy caro y completamente exagerado para mi gusto, pero era mío, él lo había puesto ahí como símbolo de nuestra promesa de amor. El anillo sólo me recordaba lo pronto que estaba por llegar la boda, estaba lista para decir el sí frente al altar, estaba lista para convertirme en su esposa.

¿Realmente estoy lista?

Por supuesto que lo estoy, he esperado esto toda mi vida, es mi sueño, lo he deseado tanto y al fin la vida me lo ha dado.

La bocina de un auto se hizo escuchar, tome mis llaves y mi bolso sabiendo que habían llegado por mí. Salí de la casa y me encontré con el Audi negro de mi prometido estacionado frente a mi casa, Tom me esperaba parado junto a la puerta de copiloto, ahí estaba él luciendo completamente impecable, se veía perfecto, como siempre.

Una sonrisa apareció en sus labios al verme, me acerqué a él murmurando un hola y deje un casto beso en sus labios, abrió la puerta de copiloto y yo me adentre en el interior del vehículo, el rodeó el auto e ingresó también en el auto, me dio una pequeña sonrisa de labios sellados antes de poner en marcha el vehículo.

-Pensé que tardarías más en salir -murmuró tratando de comenzar una conversación para eliminar el incómodo silencio.

- Me arregle con tiempo ¿Dónde iremos a cenar?

- A casa de mis padres, ellos están ansiosos por verte, mamá está muy emocionada con todo el asunto - Me detuve a observar su perfil por un par de segundos, él se veía realmente bien sin importar en que ángulo lo vieras.

- ¿Todo el asunto? - pregunte sin dejar de mirarlo, el hizo una ligera mueca y luego sonrió dándome una rápida mirada.

- La boda, nuestra boda -murmuró soltando un pequeño suspiro.

-Ah. Todo el mundo parece estar muy emocionado por eso ¿Tú lo estás también? -pregunte sabiendo su respuesta, él sonrió y asintió dando un par de golpecitos al volante.

-Estoy eufórico mi amor -respondió colocando su mano en mi muslo, le sonreí de vuelta, aunque él no me estaba viendo.

A veces me pregunto si Tom algún día tendrá el valor para dejar de mentirme.

18 años atrás

Era mi cumpleaños número seis, la casa estaba llena de todos mis compañeros de clases, mi madre se había encargado de invitar a todos, incluso a niños que no me habían hablado antes. No quería una fiesta, quería ir a Disney, pero mamá había dicho que eso no era posible y en su lugar organizó una fiesta de disfraces con temática de princesas y príncipes.

Mamá había invitado a los nuevos vecinos también, decía que era correcto ya que vivían alado de nosotros, yo no creía lo mismo, nunca había hablado con los hijos de la vecina, los había visto jugar entre ellos, pero nunca había jugado con ellos, creo que yo no les agradaba mucho.

Vi al hijo mayor de la vecina acercarse a mí, pensé en salir corriendo a esconderme, pero vi que traía entre sus manos una caja rosa con un gran moño, mi parte favorita era cuando me daban regalos, en realidad mi parte favorita era abrir los regalos. Me mantuve ahí esperando que llegará hasta mí, el niño era mayor que yo, mamá había dicho que tenía dos años más que yo, el me observo con algo de recelo y extendió la caja hacia mi esperando que la tomará.

-Mamá me obligó a venir a tu fiesta, toma tu regalo -no sabía que decir, no era muy buena tratando con niños mayores que yo, extendí mi mano y tomé la caja.