Mariposas En Plena Oscuridad.

Tormenta Acompañada De Un Corazón Roto Y Una Borrachera

"Brida"

Una pesadilla.

Es lo que deseo que fuera todo esto.

Al despertar me encuentro sobre el pequeño sofá del despacho de Sebastián. Mis ojos tardan en enfocar todo lo que se encuentra en la habitación y no es hasta después de varios segundos que noto la presencia de Sebastián.

Sebastián tiene su mirada clavada en mí, sus caderas chocan con el escritorio detrás suyo, sus brazos cruzados y esa mirada cargada de frialdad me terminan de despertar por completo y hacerme entender que nada de lo que pasó antes es una pesadilla.

Soy terca como una mula.

Y las siguientes palabras son un claro ejemplo de ello:

-Esas fotografías son una mentira, Sebastián. Están editadas, eso jamás sucedió.

Mi voz sale apenas en un murmuro, y mi garganta arde un montón.

-¿Y tú crees qué yo no las he mandado a investigar antes? Esas fotografías no tienen ninguna edición, son originales. Eres tú Brida, no hay montaje. -la calma con la que pronuncia esas palabras hace que sienta un horrible escalofrío-. Fui a casa de esos amigos tuyos a darle su merecido a ese hijo de puta. Marie es quien estaba ahí, ¿y adivina qué? Ella confesó, no sintió reparo en relatar cada detalle, cada cosa que hacías junto a Iam las veces que estaba de viaje.

Hija de puta.

¿Cómo pede prestarse para algo así?

-Nuevamente, me decepcionas Sebastián...

Alegó con voz temblorosa.

-Necesito que te marches de mi vida, no me interesa si te regresas a Panamá, solo márchate. -el corazón es solo un órgano, es solo un órgano... no se puede romper. Intento darme valor a mí misma justo en el momento en el que él pronuncia esas palabras y en mi pecho se instala una presión horrible-. Jugar con los sentimientos de otros parece ser que es uno de tus pasatiempos, Brida. Si solo veías un maldito juego en esto, entonces hubieras sido sincera y no fingir, pero no, tú decidiste mentir y jugar...

En este punto me hallo a deriva, ¿cómo puede creer que yo le he mentido con mis sentimientos?

¿cómo puede creer que yo he sido capaz de dejar que otro hombre me tocará de esa forma, mientras me entregaba a él?

Un hipócrita.

Si, eso es lo que es.

Decir que la confianza es la base de todo para después venir y llevarsela como un huracán sin darme tiempo a explicar. La persona que hizo todo esto ha logrado destruirme, herirme... No obstante, lo que más me duele, es ver como Sebastián se cree tan venenosa mentira.

Trato de acercarme a él, pero se aleja.

-Maldito idiota, es una vil mentira. Todas las veces que he dicho que te quiero, son verdaderas. Tú y Amara son las únicas personas que me han hecho sentir en casa, me han brindado las ganas de seguir sin importar el desprecio de Verónica. -ahora la idiota soy yo por seguir insistiendo-. Ahora estás haciendo lo mismo que ella, y todo por dejarte cegar por esta mentira...