Minino Kai ©

¿Qué es lo que estoy sintiendo?

Los dos se quedaron dormidos profundamente, Kyungsoo aun seguía confundido por todo lo que había pasado y no podía creer que lo que pidió la noche anterior se habia hecho realidad.

Pasaron algunas horas y el primero que despertó fue Kyungsoo, miró a Jongin que estaba arriba suyo y se vía realmente hermoso, o eso fue lo que penso él.

¿qué estoy pensando? cómo es que puedo creer que esto sea verdad... por dios.

El mayor intentó salir cuidadosamente de la cama sin que su ex gato, ahora todo un hombre, se despertara, pero fue un fracaso.

— ¿hyung? -bostezó levemente Jongin.
abrió sus ojos y lo primero con que se topó fue su dueño.

- Sigue durmiendo. - dijo.

Salió de la cama, y antes de que empezara a caminar por el pasillo Jongin lo agarró por la cintura y susurró acercándose a su oído.

- Eres mío como yo soy tuyo, hyung.

Al escuchar esto dio vuelta y contestó aun más confundido de lo que estaba.

- ¡Eres un gato! ¿Cómo puede ser que digas eso? ¿Cómo te convertiste en hombre? ¿Cómo? ¡¿Cómo?! explícame.

Agachó la cabeza y un momento de silencio quedó entre ellos, hasta que Jongin volvio a mirarlo.

- ¿No te alegra que sea un humano y pueda darte el calor que mereces?

Kyungsoo se había sonrojado, el en verdad quería a alguien que le diera calor pero seguía con las dudas de todo y no podía aceptarlo aún.

- Jongin no es que no me alegre que lo seas pero comprende que despertar y verte así no es algo... normal, o que hubiera esperado que sucediera.

Al decir esto se alejó sin pensarlo, estaba aturdido, no sabía qué demonios hacer y supuso que bañarse estaba bien para poder reflexionar todo.
Luego de salir de su ducha vio que Jongin estaba sentado al lado de la puerta,  se paró rápidamente con una sonrisa pero Kyungsoo ignoró y caminó hasta su cuarto.

- ¿Por qué me ignoras, hyung? ¿Qué hice? - dijo Jongin haciendo un puchero demasiado encantador.

- ¡No te ignoro! sólo que necesito pensar. -respondió fríamente.

- ¿Aceptar esto? - dijo el ex gato cruzándose de brazos. - ¿Aceptar que soy un humano por qué tú lo has pedido? Y es que me sigues viendo como... un gato.

- No me refiero a eso Jongin. - dijo Kyungsoo poniéndose una playera en su cuerpo blanco acercándose a su mascota. - Sólo que yo pedí a alguien para amarlo y apareces tú así... como humano, es raro todavía, pero supongo que me acostumbraré a ti.

Al ir deciendo esto el mayor tocaba la mejilla del menor dándole una sonrisa.

- ¿Crees que...?

- ¿Crees que, qué Jongin? - Kyungsoo lo apresuró a hablar.

- ¿Crees qué Jongin sea un nombre de humano? - dijo el menor jugando nerviosamente con sus manos.

- A mi parecer si. - respondió su dueño. - Pero si te parece mejor tu apodo podría ser... Kai ¿Qué te parece?

- ¡oh sí! me gusta, gracias hyung. - Kai lo abrazó fuertemente pero el no respondió el abrazo y cambio el tema rápidamente.

- Ahora que eres un humano tendré que botar toda la comida de gato que había comprado. - rió suavemente al escucharse así mismo y Jongin asintió con la cabeza.

Pasaron algunas horas y Kai se había quedado dormido en el sillón, Kyungsoo lo observaba con una sonrisa de tonto enamorado pero rápidamente sacudió su cabeza. ¿Por qué estoy sintiendo esto? el es un gato... bueno ahora un humano, ¡Pero aun así! ¡ah! demonios... Verlo dormir así lo hace ver tan lindo. De repente un gemido de Jongin lo sacó de sus pensamientos y el hyung se acercó a Kai cuidadosamente, cada vez estaba más cerca de él hasta el punto en donde sus respiraciones se sentían una.