Mi Protector Oscuro

Capítulo veintiséis

Severus le había preguntado a Poppy si Roz podía ser usado para vigilar a Harry mientras daba clases, ya que no podía dejar al niño solo. Ella había estado de acuerdo con la idea, Roz tenía experiencia en curación, solo pequeñas cosas, pero sería suficiente si Harry entrara en pánico, ella sabría qué hacer.

Ayudaba que Roz fuera el elfo personal de Poppy y su lealtad era solo para ella. No es que fuera a preocuparse de que los elfos de la escuela fueran a decir algo, ya que eran leales a Albus, y obviamente él estaba haciendo todo lo posible para mantener la información en secreto.

Aunque nada permanecía EB secreto para siempre, pero esperaba que, cuando terminara, Harry estuviera moderadamente mejor y pudiera cuidarse por si solo, y que fuera mayor de edad.

- ¿Roz? ~ Severus llamó, esperando que apareciera el elfo doméstico. ~

Estaba sentado bebiendo una copa de vino frente a la chimenea. Los estudiantes estarían aquí pronto, y él realmente no debería beber, pero una sola copa de vino, no lastimaría a nadie. Él estaba vestido con sus túnicas de enseñanza, estaba rígido, incómodo y lo hacían parecer aún más intimidante, honestamente no quería que Harry lo viera vestido con eso, al menos mientras pudiera evitarlo.

- ¿Cómo puede Roz ayudar al Maestro Severus? ~ Roz lo interrogó, con los ojos muy abiertos mientras miraba al hombre severo, que sabía que era más de lo que aparentaba por todo lo que había sucedido durante las vacaciones de verano. ~

- Pronto me iré al Gran Comedor, Harry ya se fue a la cama, todo lo que necesito que hagas es vigilarlo, ¿Sabes qué hacer si ocurre algo? ~ Interrogó al elfo doméstico, a pesar de que él y Poppy ya habían revisado cada detalle que creían importante. ~

- Debería ir a buscarlo, pero ser discreto, lo se maestro Severus, tendré cuidado. ~ Explicó Roz rápidamente, su discurso perfecto, fue una de las primeras cosas que su ama Poppy le había exigido. ~

Encaso de que tuviera que ir a alguna parte por alguna emergencia, podría hablar con claridad para que la gente la entendiera. Fue buena para resolver todos los términos médicos, pero ahora lo hizo sin esfuerzo y con facilidad, ayudó a que todos comprendieran ahora lo que quería decir cuando hablara. Sabía que era mejor no repetir el nombre de Harry en público, pero tampoco debía hacer que alguien sintiera curiosidad.

- Bien, él no debería despertarse. ~ Severus le informó que se pusiera de pie, desterrando su copa de vino vacía a la cocina. No, sus pesadillas parecían ser demasiado para él en las primeras horas de la mañana, si no fuera por el hechizo no habría sabido que Harry nunca gritó durante la agonía de una pesadilla, rara vez usó su voz para eso, él solo tembló y se acurrucó en una bola lo más apretado posible. Sin embargo, para su sorpresa, la presencia del pequeño familiar de Harry pareció ayudarlo mucho, pero era demasiado pronto para sacar conclusiones.

Se sonrojó solo al recordar la conversación sobre el gato... en cuestión.

-0 Flashback 0-

- Ahora tienes que quitar el domo, levantar el recogedor y agregar la caja de arena.

Severus le explicó mientras había desbloqueado para que el domo quedara de lado, un solo hechizo rápidamente esterilizó la caja de arena solo para estar seguro. Hizo una parte para mostrarle, probablemente bastante innecesariamente, antes de entregarla el recogedor rezando para que no se fuera por todos lados, abrió la arena distraídamente para disminuir la probabilidad de derrames.

Harry aceptó el recogedor azul claro que le dio su protector oscuro, y lentamente comenzó a llenar la bandeja con arena, su curiosidad evidente en cada movimiento que hacía. Levantó la vista después de echar la aerena, esperando para ver cuándo debería detenerse, pero ya estaba en el séptimo y sí, contó y sí, pudo contar mucho para su deleite, pero nada se comparaba con el orgullo que su protector oscuro le transmitía. Lo hacía sentir especial, el quería que su protector oscuro siempre estuviera orgulloso de él, era algo que le había faltado toda su vida.