—Aún hay tiempo. —musité.
—¡¿Que?! —exclamó Giggles.— ¡¿Cómo?!
—La oigo respirar. —susurré. Mi mente volvió a conciencia, llevé mis manos a su cuello, palpando hasta que logré sentir un milagroso latido.— ¡Su corazón sigue latiendo!
La emoción en mi fue inigualable al igual que la que se hallaba reflejada en el iluminado rostro de Giggles quien se enjugó las lágrimas de golpe.
—¡Hay que llevarla al hospital! —Giggles se giró y tomó una toalla de baño que había doblada y me la entregó. Cubrí el cuerpo de Flaky con ella.
—Pero rápido, su latido es muy sutil. —exclamé mientras hacía un nudo con la toalla.
Recosté suavemente a Flaky sobre mis piernas y procedí a arrancar mi corbata la cual corté a la mitad con la navaja que aún se hallaba en el suelo.
Giggles se arrodilló junto a mí y levantó uno de los brazos de Flaky sabiendo que era lo que yo haría y eso me facilitó mucho las cosas; tomé uno de los trozos de tela y lo coloqué en su muñeca haciendo un torniquete lo suficientemente resistente para el camino al hospital e hice lo mismo con la otra mano.—¡Entonces será mejor que nos apuremos, vamos rápido! —exclamó desesperada.
Giggles se levantó de golpe y se dirigió a la entrada del baño la cual comenzó a abrir aún más para darme paso mientras cargaba el frágil cuerpo de Flaky el cual se hallaba envuelto solamente por aquella toalla.
Comencé a correr por el pasillo mientras oía los tacones de Giggles que resonaban en la madera del suelo mientras ella me seguía.
—El hospital está a unos 20 minutos de aquí. —la voz de Giggles se distorsionaba mientras bajaba las escaleras.
—No tenemos 20 minutos. —musité. Comenzaba a morderme los labios por la angustia. — a juzgar por la perdida de sangre y la sutileza de sus latidos, puedo deducir que a lo mucho tiene unos 10 minutos; el torniquete quizá nos consiga otros 5.
—¿Qué hacemos entonces? —Giggles se había acercado de golpe a la puerta principal y la había abierto, dándome paso.
Me encontraba rebuscando en mi mente una forma de solucionar las cosas. Corriendo jamás llegaríamos, en auto quedaríamos atrapados en el tráfico. Fue entonces que recordé algo primordial, algo que iluminó mi mirada.
—¡Giggles! —le empujé emocionado.— ¡Lo tengo!
—¡Auch! —soltó un quejido molesto.— ¿Que tienes?
—La academia está cerca, mucho de hecho. — apunté por encima de los árboles, donde se podía divisar a dura vista un edificio. — podemos llevarla ahí.
—¡Es verdad, su padre era director! —Giggles se llevó una palmada a la frente, reprochandose el no haberlo recordado antes.
Me acerqué rápidamente al auto y deposité el frágil cuerpo de Flaky en los asientos traseros para después subirme en el asiento del conductor. Giggles se se sentó atrás, recostando la cabeza de Flaky en sus piernas.
Mientras, yo encendía el auto.—No seré discreto al conducir así que agarra bien a Flaky ¿ok? —dicho esto tomé el volante y presioné a fondo el acelerador haciendo que el auto arrancara y se dirigiera a toda velocidad por el camino que llevaba a la academia.
El tiempo transcurria y yo me encontraba sentado en la sala que se hallaba fuera del cuarto dónde habían llevado a Flaky recostada en una camilla y rodeada de doctores, temía que esa fuese la última vez que la viera aún con vida.
Por suerte para nosotros no me retuvieron en la entrada, creía que por ir vestido como estoy no me darían paso pero acabaron por reconocerme, incluso Flaky recibió atención especial por ser la hija del difunto Marcus.
Internamente me comencé a cuestionar si la suerte estaría de mi lado todo este tiempo, además cuestionaba si traerla fue la mejor opción, yo esperaba que si.En cuanto a Giggles, ella se abstuvo de hacer un drama cuando le negaron el paso por no pertenecer aquí, ciertamente estoy orgulloso de eso.
Nos dijeron que solamente podría entrar en caso de que Flaky despertara y confirmara su paso a las instalaciones.
Giggles se retiró diciéndome que iría a avisar a los demás, que yo le mantuviera al tanto desde el celular a lo que yo asentí.Llevo más de una hora y media aquí sentado, los médicos se retiraron de la habitación hace media hora, me dijeron que ella estaba inconsciente y algo delicada, aunque fuera de peligro, también me dijeron que ya tenía permitido entrar.
Heme aquí, con los codos recargados en mis rodillas y la cabeza baja, lidiando con mi culpabilidad ¿Realmente merezco entrar y verla después de todo esto? ¿Lo causé yo? ¿Podrá perdonarme?
Mientras las ideas rondaran mi cabeza, me impedirían tener la voluntad de levantarme para verla.Después de todo esto, así fuese yo el culpable o no, así recibiese condena por mis acciones, asi no obtenga su perdón, me encuentro sonriendo por lo bajo, feliz de no haberla perdido aún, feliz de haber actuado a tiempo, feliz de haberle salvado la vida, porque eso hicimos ¿no? Supongo que es el mejor logro que puedo tener, y quizá el único por el que valga la pena recibir una medalla.
Después de esto no me queda duda que recibí algo en lo que he vuelto a creer... Segundas oportunidades./////
Actualización
27/01/2021:A casi cuatro años desde que escribí este capítulo, vengo a editarlo para ponerle un dibujo hecho por mi :> ❤️
(Son libres de descargarlo y compartirlo PERO dándome créditos y sin borrar mis firmas.
Si es posible, háganme publicidad del fanfic, jsksaksj (?) ❤️)
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[EDITANDO]Un Amor Para Morir. [FlippyXFlaky] (HTF fanfic)
Fanfiction"-¿Me prometes que volverás? -dijo la pelirroja entre sollozos. -¿Alguna vez te he mentido? -musitó el joven mientras besaba con ternura la mejilla de la chica-. Estaré bien, Flaky, tranquila. No me olvidaré de ti, ni mucho menos de volver, te lo ju...