Capítulo veintitrés

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Un par de horas después Louis y Zayn estaban en Jossi's, una inmersión abarrotada en una calle lateral a pocas cuadras de TwistCorp. No iban ahí muy seguido—era un bar de sótano, tan obscuro y sucio que se sentía como una cripta, pero la obscuridad recorrió un largo camino hasta hacer una tarde temprana de beber en un día laboral menos inapropiada. Así que ahí estaban, lado a lado en taburetes de alto respaldo sorprendentemente cómodos con una jarra vacía de cerveza y el acuerdo de compra para la venta de la tierra de Harry en la barra entre ellos.

Zayn abrió un cacahuate salado de cortesía y se reclinó en su taburete mientras se lo metía en la boca. El negó con la cabeza, lanzando un suspiro de resignación. "Bueno..."

Louis asintió, agachando la cabeza. Su cara se retorció en una mueca emocional mientras observaba fijamente la firma en la última página del documento en el espacio marcado como "VENDEDOR". "Sip," ahogó un susurro de acuerdo, permitiéndose pasar un dedo sensible por la tinta relativamente fresca, aunque fuera un cuchillo al corazón. H. E Styles en negrita, con letras cursivas. Suave y fuerte todo al mismo tiempo. "Sip."

Zayn había estado en lo correcto. No encontrarían ninguna laguna. No había una. Habían ido por las diez páginas del contrato línea por línea, dos veces, y todo parecía ser seguro y al nivel. No había mucho margen de maniobra, si existía alguno. El cuerpo de Louis se sentía pesado y más pesado, su espíritu se hundía cada vez más mientras la decepción se asentaba. Había pensado que era una posibilidad remota todo el tiempo, inconscientemente al menos, pero aún necesitaba saberlo con certeza. Necesitaba verificarlo, por él y por Harry. Y ahora lo había hecho y ahora lo sabía.

"Quiero decir, ¿hay contingencias?" dijo Zayn, tallando con su mano su nuca mientras tomaba otro sorbo de cerveza. Se inclinó hacia adelante y retrocedió algunas páginas, pasando por el seguro de título a la sección corta que enumeró los motivos que National Energy Group sostuvo por retirarse del contrato. Si resultara que en realidad no hay nada de petróleo en la tierra, o si de alguna forma no pudieran obtener los permisos para perforar, todo el terreno sería regresado a Harry y todo el dinero a Walter Mohs. Zayn hizo una cara, dándole a Louis una mirada dudosa. "Bueno, voy a descartar lo del petróleo. Quiero decir, hay—"

"Definitivamente hay petróleo," finalizó Louis, rodando sus ojos con Zayn y estirando su cuello para ver si podía captar la atención del camarero y pedir otra jarra, tal vez algo más fuerte con eso. Muchos shots de vodka o tal vez un doble—no, un triple—whiskey, genial. Mierda. El corazón de Louis se apretó cuando un recuerdo de Harry resonó en su mente, su voz en su mejor tono retumbante y lento.

"Una señorita siempre ordena un whiskey amargo," le había informado una noche a Louis en el bar de Liam unas tres semanas antes. Lo había dicho hinchado con una falsa, aristocrática presunción antes de disolverse en risitas y arrugar la nariz, rodando los ojos afectuosamente mientras explicaba. "Eso es lo que decía la abuela loca de mi compañero de cuarto en la universidad. Es más o menos la razón por la que es mi bebida."

Eran tiempos más felices. Pensó Louis, su corazón apretándose de nuevo. Tiempos mucho más felices.

Zayn trajo a Louis devuelta al presente colocando su vaso de cerveza manchado con huellas digitales en la barra con un repentino ruido sordo. "Quiero decir, ¿cuál sería el plan, de todas formas?" preguntó, mirando al bajo techo mientras intentaba procesar las cosas. "Como, aún si encontráramos...quiero decir, él aún—"

"Si, lo sé. Lo sé," dijo Louis. Movió una mano hacia Zayn con una muñeca floja por el alcohol y frunció el ceño. Era verdad. Aún si Louis encontrara alguna clase de milagrosa laguna en el contrato, los impuestos de la propiedad aún se avecinarían. Harry necesitaba la venta para poder mantener el rancho a flote. Lo mejor que Louis pudo haber esperado era tal vez ser capa de maniobrar a Harry en una posición donde tuviera algún grado de influencia de nuevo, a un punto en el que pudiera de alguna forma arreglárselas para recuperar los derechos de la superficie y renegociar para que la perforación fuera hecha al menos parcialmente en sus términos.

Wild And Unruly (Larry Stylinson AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora