-Y ahora que hacemos ?-
-No lo sé...quizás...no crees que sería lógico llamar al médico- dijo Hans con sarcasmo. -Yo me quedo con ella y los dos vayan a buscarlo- sugirió Hans.
-Estas seguro de quedarte solo con ella ?, no quiero que el castillo termine congelado o tu lo hagas-
-Yo ya he tratado con esto, unas dos veces, se como calmarla- Por un momento visualizo ese momento . Cuando ella estaba apunto de matar a los dos guardias de Weselton. Y el intento calmarla.
-Y eso cuando fue, déjame pensar, antes de que le intentaras matar!- Lógicamente su hermano no confiaba mucho en Hans.
-Eso ya fue en el pasado, no le voy a ser daño, no quiero mas sentencias, además ni siquiera creo que se acuerde. Prefieres que me quede yo o otra persona ?- Hans enserio quería quedarse con ella, quería hacer preguntas, y se le hacía muy extraño verla de esa forma.
-Hans voy a confiar en ti pero si algo le llega a pasar....-Amenazó Jhon.
-Lo sé, lo sé, no pierdas tanto tiempo y comienza a buscar, si?- A Hans no le gustaban nada los sermones de su hermano. Siempre advirtiéndole y aconsejandolo. Además no podría llegar a dañar a la reina.
-Voy a ver a Ingrid, probablemente nos tardemos una hora así que...cuidala hasta que regresemos- ¿Cuidala? esa palabra nunca la había oído, al ser el menor de los trece hermanos, nunca jamás en su vida lo dejaron cuidando a algo o alguien.
Jhon llamó a Ingrid que aún seguía en la habitación, Ingrid salio. Jhon le contó lo que iban a ser y que tenia que ir con él. Ella solo, acepto. Cinco minutos más tarde ya se habían ido. Hans se había sentado afuera de la habitación en la puerta, esperando que regresarán.
Solo pasaron unos minutos hasta que oyó que algo se cayó dentro de la habitación. Como la curiosidad lo estaba consumiendo enteró, decidió entrar. Frente a la puerta, tomó una bocanada de aire se armó de valentía, y abrió la puerta.
-¿Que estas haciendo ? Oí un ruido y pensé que te había pasado algo - Reflexionó sus palabras. , dando se cuenta de lo que había dicho. Acaso se sentía preocupado por Elsa. ¿Eso era lo que significaba "cuidar"?
-Umm...nada estaba viendo esta cosita y se cayó, ¿Que se supone que es? -Aún no podía que estaba hablando con la reina de Arendell, si no estuviera así ya lo hubiera matado.
-Eso era de mi madre, lo encontré un día mientras jugaba - Dijo mientras veía la pequeña caja musical. -Es lo único recuerdo que tengo de ella-
-¿Que le pasó?-
-Nada que sea de tu preocupación. Como te sientes ?-
-Bien y mal , tú me conoces, verdad?- Aunque a Elsa se le hiciera difícil recordar, sentía conocer a ese chico en algún lugar de lo mas profundo de sus recuerdos.
Hans sabia muy bien que esa pregunta llegaría en algún momento- Si, hace algún tiempo atrás, la conocí, majestad-
-Me puedes llamar por mi nombre ?....Sabes como me llamo ?-
-Elsa, Elsa es tu nombre- Otra vez las voces volvieron a molestar. La voz de una niña pequeña.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-Elsa, Atrapame!-
-ANNA!!-
-Elsa, que has hecho-
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Entre cerró los ojos y trató de acordarse algo pero fue en vano, volvió a hacerse la misma pregunta ¿Quién era Anna?.
-Y tu eres Hans cierto ? , desde cuando me conoces ?- Preguntó mientras información tenga ,podia intentar unir las cosas.
-Ese es mi nombre- Afirmó, ahora tenía que pensar como responder la otra pregunta- La conozco desde el día que llegue a Arendell-
-¿Arendell?- Tener problemas con la memoria no ayuda a facilitar las cosas.
Elsa no se acordaba de nada así que tenia que ser paciente, no se podía desesperar- Es en donde vives, tú-
-¿Y que hacías por allá ? tiene que haber una razón. - Volvió a preguntar.
-No me recuerdas ,enserio?- Elsa asintió- Fui para el día de la coronación de la reina? - Elsa lo observó desconcertada- Tú eres la reina!-
Bromeaba o hablaba enserio.
-Espera! Me estas diciendo que soy reina de algún lugar que no es este, entonces ¿Que hago aquí ? ¿Por que se supone que estoy aquí? - Esa era la pregunta mas difícil que ella había dicho, no le iba a decir "que venía a su juzgamiento, por haberla intentado matarla". No podia decírselo.
Antes de que pueda responder una palabra, el ruido de la puerta al abrirse le salvó con las justas.
Tam Tam Tam, ¿Quien podrá ser? Voten y Comenten! , eso me da mucha felicidad.