Capitulo 2

643 56 3
                                    

Terminó la clase que considero la mas aburrida de todas la clases aburridas; Matemáticas. Esto de estudiar es trabajo duro y complicado, hubiese tomado el camino de Marcie, ocupar las esquinas tratando de conseguir algún tipo con dinero. Salgo y voy a casa, estoy que me muero.

-¡Vaya! Mi día definitivamente no ha podido estar más horrible como para conseguirme con esta imbécil cola -- Dije, dándole un manotazo al volante, si me hubiera oido alguna viejita me hubiese dicho: "¿Con esa boca besas a tu madre?"....

Sigo esperando hasta que...

-¡Hey chica! Buena combinación; hermosa mujer con un hermoso carro -- En una camioneta dijo un viejo con.... ¿Un frijol en el diente? ... Ugh! ... ¿Que se creía?

-Gracias, viejo verde -- Le dije poniendo los ojos en blanco. Hombres buscando jovencitas. El mundo esta en picado.

-Tonta -- Dijo el entre dientes y arrancando su camioneta.

-¡LO HE OÍDO! - Grité.

Llegue a casa tratando de que no fuera tan evidente mi mal humor.

¡Hija llegaste! -- Dijo mi madre, Tatiana Rojas, ella es... ¿Como decirlo? ... ¿Alegre?, si, es muy alegre en cualquier momento, no es que me moleste, es mi madre, pero a veces me pregunto si está loca o mi padre le da drogas en las noches. Además de lo cotidiano, claro está.

-Si mama, llegué, Wujuuuu! -- Dije con un buen actuado entusiasmo. 

-¿Como te ha ido?..... Tu padre ha salido a comprar algún aperitivo, ¿sabias que a él le encanta comer chocolate con miel?, ya veo porque el baño es su lugar favorito, el otro día encontré la computadora allá -- Dijo riendo.

-Que bien, mamá. Por favor, trata que no se acerque a mi baño. - Dije soltando una risa, estar con mi madre y sus efusivas palabras es confortante, no se que haría sin esta mujer. -- Iré a darme un baño.

-Vale, ve y yo esperare a tu padre, de seguro se esta comiendo chocolate encerrado en el carro afuera.

Subí las escaleras caminando a paso rápido para llegar a mi habitación y poder darme un baño que me anime, y poder dejar ademas de la suciedad, el humor tan lindo que llevo hoy.

No es que sea una persona que en su vida reine el estrés o que no me guste socializar, pero, en algunos casos me preguntó cómo la sociedad pudo caer tan bajo. 

El mundo está loco. 

No creo que la loca sea yo. 

Los Lobos... ¿Hablan? (Incompleta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora