- no de nuevo - murmuró Evie
- ¿de nuevo? - preguntó Zed confundido.
- ¡¿cómo que no está?! - preguntó Ben algo alterado
- ¡ni yo sé! Se suponía que debía estar en sus asuntos reales y no esta, además de que sus padres los vi muy tranquilos, ¡¿por que están tranquilos si ella no esta?!
- es que desaparece mucho, así es - le contestó Evie.
- bueno, ¿entonces que hacemos?
- la buscaremos, esto ya paso antes y no la volveré a perder.
- mucha cursilería - Zed se estremeció.
- callate - Ben lo observó - ¿notaste algo raro antes de que desapareciera?
- no, ella estaba normal, como siempre - contestó Zed mirando un punto fijo, tratando de recordar algo que no haya notado o tomado suficiente importancia en ese momento - de hecho, si, algo paso - fruncio el seño.
- ¡¿qué paso?! - Evie le sacudió los hombros.
- ¡ya! - Zed se alejó de Evie - cuando íbamos a practicar con las espadas, Eliza encontró un jollero de madera, muy raro.
Y fue ahí cuando la respiración de los tres chicos dejo de escucharse tranquila.
- mierda - dijo Chad notablemente asustado ante la idea que se formaba en su cabeza.
- ¡¿cómo era el jollero?!
- vamos amigo, tranquilo - le dijo Zed a Ben mientras observaba el dormitorio, en el que estaba, como si buscará algo.
- ¿qué tanto ves? - preguntó Chad.
- ¿qué eso? - preguntó Zed mientras se acercaba a la ventana.
- ¿qué cosa? - Evie se acercó al chico que estaba en cuclillas, viendo algo.
Ella miró lo que el chico tenía en sus manos, no lo reconocía pero parecía que él si.
Zed bufo frustrado mientras se levantaba.
- vuelvo a preguntar, ¿Eliza no está aquí?
- nosotros ya te dijimos que no.
- maldición, lo perdió - murmuró el chico mientras guardaba un pequeño broche de oro en su bolsillo del pantalón.
- ¿qué era eso?
- un broche de Elizabeth, que por alguna razón esta manchado, bueno, por eso volví a preguntar.
- ¿manchado?
- de algo rojo, parece sangre o pintura, no lo sé.
Los tres chicos se miraron entre si, posiblemente pensando lo mismo.
- ¿que?
- un amigo nuestro fue atacado, por una persona que quería tomar algo de este dormitorio, el no pudo ver la cara de esa persona.
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Descendientes 2: No todo ha terminado
Fiksi Penggemar-Todo cambió desde que se fue.- las lágrimas empezaron a brotar de sus ojos. -Sigo sin saber el por qué se fue. -No fue su elección, lo sabes. -Siento como sí aún estuviera aquí.-su voz se escuchaba apagada, apenas audible. -Todos queremos eso. ····...
