Capítulo O4.

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Capítulo O4.

Llevaba en la puerta del insti como diez minutos, y Cam no salía. Cogí mi iphone y le mandé mensages, audios, le llamé...

Otros cinco minutos mas tarde, comenzaba a cansarme, a si que me senté en las escaleras, apoyé mis manos en el suelo y eché mi cabeza unos centímetros para atrás.

 ¡Ouch! - grité ahogadamente. Sentí una presión en mi mano derecha, como si alguien me la hubiera pisado.

- ¡Lo siento!, lo siento, no te vi. Creía que...

Giré mi cabeza para ver quien era el desafortunado que me había pisado.

Dispuesta a sacar todo mi enfado acumulado por no solo aquel incidente, me llevé una grata sorpresa: No era ningun pringado de los que andan por el instituto, solo era aquel chico que vimos en el comedor. El que hizo que sus encantos llegasen hasta mis ojos.

- Oh, no- no te preocupes no duele tanto como parece...

En realidad si dolía.

Me llevé la mano al pecho e intenté moverla delicadamente

- De verdad que lo siento. No iba mirando. Ya sabes, cuando sales de clase lo unico que quieres es correr a casa ¿no? - dijo un poco avergonzado, regalandome una sonrisa para que me sintiera mejor.

En ese momento me fijé mas en su físico:

Era muy alto. Su pelo estaba despeinado, pero a la vez le daba un toque elegante. Tenía unas cuantas mechas rubias. Sus ojos eran azules, como el mar; más bien como el cielo: lejanos a mi.

- Te entiendo... - no sabía que decir. Estaba muy pillada mirándole. Noté que la situación empezaba a ser incómoda, y veía que en un futuro muy cercano el chico se iría y no tendría mas oportunidad de hablar con él... a si que dije lo primero que se me pasó por la cabeza – Ah, oye, ¿Conoces a Cameron Dallas? Tenía clase justo ahora, supongo que contigo y llevo esperándole por casi media hora – exageré un poco -

- Cameron Dallas... Oh si. Se fue hace bastante rato. En realidad la clase terminó mucho antes, yo me quedé para dar clases particulares, es lo que toca cuando eres nuevo.

- ¡¿QUÉ?! - mi enfado crecía y crecía – Me dijo que le esperase aquí ¿y va y se marcha?.

Estaba roja de la ira. ¿Enserio estaba tan enfadado como para plantarme?

- ¿Es tu novio? - el chico estaba desconcertado. Le entiendo...

- Por desgracia – dije de muy, muy, muy mala gana. Demasiada. No quería tomarla con él, pues cambié mi tono de voz – Lo siento... Tubimos una pequeña discusión esta mañana y por lo que veo aún sigue enfadado.

- Te entiendo. - lo dijo por aliviarme, lo se - ¿Qué tal si te acompaño a casa? Aún no he hecho amigos y no me vendría mal una.

Aquel chico me ganaba cada minuto un poquito mas.

Me sonrió y andamos hasta la salida

- Hey, se me olvidó preguntarte, ¿Cuál es tu nombre?

- _____, a sí me llaman. ¿Y tú? Eras... ¿Marc?

- Nash, Nash Grier – reímos – No te culpo, mi madre siempre tiene que destacar en todo, incluso en el nombre de sus hijos

- Pues a mi me gusta. “Nash” Suena bonito

- Gracias – sus ojos se clavaron en mi, y me sentí un poco incómoda.

Le aparté la mirada y miré a mi alrededor. ¿Qué pasa si alguien me ve con Nash? Todos saben que salgo con Cameron.

- Nash – le acarré de la muñeca y estiré de él – ven por aquí – sonreí para hacerlo divertid

- ¿A dónde vamos?

- Tranquilo, es un atajo – dije mientras corría de la mano de Nash.

Me paré a pensar un momento. En realidad me da igual si me ven con Nash. Cameron se lo pierde.

Entramos a un callejón, y algo me descentró. Paré en seco y suspiré dejando escapar una lágrima.

Era Cam. Estaba con una chica. Pero no estaban como Nash y yo, es decir, nosotros nos conocemos de una hora, somos amigos, pero ellos estaban cerca. Muy cerca uno del otro, con pocos centímetros separando sus bocas.

Me dí la vuelta rapidamente, dispuesta a echar a correr pero justo me topé con Nash.

- Nash... - se me saltó una minúscula lágrima - 

- No – dijo mientras me abrazaba y me llevaba a otro lugar, lejos de allí

¿Cameron, o Nash? ~ Nash Grier y tu [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora