Crucify my love (Yaoi)

Capitulo 10: ''Regreso del mal''

Pov. Eques

No sé si yo me perdí o estoy loco, cuando fui a tomar desayuno a la mañana siguiente había una cosa rara en la mesa, era como si dos tablas se hundieran, era negro y tenia teclas en la parte inferíor, Aless parecía utilizarlo con mucha facilidad, como si escribiera algo en un idioma inentendible para mí, me puse a mirarlo desde el marco de la puerta… en silencio, su silueta iluminada por la refulgente luz de la mañana era sublime, tenia puesto una bufanda negra que hacía bastante juego con su abrigo color ceniza, además de unos pantalones algo ajustados a sus piernas de color negro también, lo contemple por largo rato… pero el maldito de Kiyo me delato, más bien se lanzo sobre mi y caí como un saco de papas al piso, ya que no estaba muy bien posicionado, se sorprendió al verme y rio como un estúpido –no es por ser malo pero así fue,  aunque tampoco niego que fue lindo reír cuando ayer estaba muy mal –

Salimos a recorrer toda la ciudad, no somos de aquellos vampiros que existen en los libros, tenemos vida y mucha, no somos muertos andantes, podemos estar a la luz del sol y no necesitamos siempre la sangre, más bien según me explicaron se usa para esas relaciones.

La gente no nos conocía muy bien, pensé que por ser de las familias pilares nos conocerían, pero no fue así, no obstante luego pensé que sería estúpido, porque si los conocieran deberían conocerme a mí también siendo que yo estuve dormido por varios siglos.

Pasamos a un restaurante a comer, quería hablar fuera de la ciudad, me he aburrido mucho estando en las mansiones y esas cosas, quería cambiar el ambiente.

-Y bien Eques, ¿Qué has hecho de nuevo? –Dice Yana con una enorme sonrisa.

-Pues… solo esto… el maldito de Aless no me dejaba salir -Cruzo mis brazos y se ponen a reír.

-Oh, y en ¿Qué se divertían juntos? –Sonríe de forma picarona, me sonrojo.

-Déjate de estupideces… -Tartamudeo, no soy bueno escondiendo este tipo de cosas.

-Generalmente nos poníamos en la biblioteca o lo molestaba –Dice Aless y ríe.

-De seguro Karo les acompañaría con gusto –Expresa Yana sonriendo.

-Eh… -Los miro, Aless también se puso nostálgico pero lo noto triste.

-Oh, perdón –Dice Yana—Karo era muy amigo tuyo y de todos… y mi hermano.

-Lo siento… yo -Me interrumpe.

-No, descuida, sé que no recuerdas, he estado en contacto con Aless desde que apareciste –Sonríe.

-Igual me siento un poco mal por todo pero no signifique que no recuerde nada por la eternidad –Le digo y sonrió.

Pov. Aless

Mi corazón se estremeció al escuchar esas palabras tan mágicas y atestadas de satisfacción, desde que hable con el ayer con mi ataque de ansiedad… nunca pensé que podría ser así de escurridizo como para poder escucharme, realmente ha cambiado mucho desde la última vez que mire sus luceros… por eso nunca pude prever que estaba observándonos, realmente todo esto se adelanto muchísimo de lo que yo pensaba, mi plan era desde un principio hacer que entienda todo, para que no me abandone, lo he esperado mucho más de lo que puedo recordar, cuando se apagaron sus luceros no lo podía creer, lo más importante para mi yacía frio… me hizo recordar esa vez que me salvo de morir, podría incluso afirmar que ahora entiendo porque tanta desesperación al verme muriendo, pues yo reaccione de igual forma.

Terminamos de comer y nos encaminamos hacia la salida, note el aire muy raro, olía a sangre, mire a Kiyo con Yana pero al parecer no se han dado cuenta, o eso creo… Eques quizás lo sintió pero esta tan absorto en la conversación que no le da importancia, lo noto… en sus ojos.

-¡Hey! Chicos iré un poco al baño así que sigan sin mi –Sonrió y muevo mi dedo índice para darle una señal a Yana de que algo anda mal y deben salir de aquí.

-Bueno, vámonos –Dice Eques—Al muy idiota su vejiga lo odia –Eso me ayuda bastante, lo que menos quiero es que se quede o me siga.

-Nos vemos luego –Dice Yana y alza su mano para decirme adiós, también mueve su dedo índice lo que me dice que entendió el mensaje.

Me dirijo a la parte trasera del restaurante y es un total asco, todo está sucio, lo único elegante y bonito es la parte delantera.

Sigo avanzando y me encuentro con un enorme charco de sangre… y todas las paredes con el líquido encarnado, las luces se encendían y apagaban, algo que le daba un toque bastante tenebroso…  conjure mi espada para protegerme y en el peor de los casos matar al que hizo todo esto en el caso de que me ataque.

Percibí más adelante segmentos de entes humanoides, no tarde en darme cuenta de el lio que me metí, sin embargo demasiado tarde como para reaccionar, solo pude ver algo abalanzándose sobre mí con algo en la mano, me abatió y caí en la oscuridad.

Pov. Eques

Esperamos a Aless bastante tiempo de lo normal, así que Yana dijo que lo dejáramos solo al espécimen, pero… me preocupa, está bien Aless tiene muchas cosas que hacer y todo eso pero al menos me avisaría, sabe que tan nervioso soy y no haría nada de esas cosas ni en broma.

Al llegar a mi habitación la ventana estaba abierta… y la espada de Aless reposaba en la cama que compartíamos, junto a una nota.