Capítulo uno.
Ya resultaba ser su décimo séptimo vaso de licor, su aliento se basaba en vodka y whisky a pesar de que él juraba infinitamente que no estaba ebrio. Salir a clubs resultaba ser ya tan común en Seo Changbin que toda persona que entraba en ése lugar lo reconocía por ser el chico que llegaba a emborracharse esperando caerse muerto.
Por el día se dedicaba a crear música con sus amigos, pero por la noche prefería ir a su discoteca favorita a beber y escribir nuevas letras ya que sólo allí llegaba su inspiración. Ése era su famoso truco. Durante su tiempo libre se dedicaba a divagar en páginas no aptas para menores, aparte de intentar conseguir una nueva pareja cada noche para satisfacer su deseo sexual.
ㅡDame más whisky, Danielㅡun pequeño chico a su lado exigió. La mandíbula de Changbin cayó y si no fuera porque aquella no podía salir de su boca, ésta lograría estar fácilmente tres metros bajo tierra.
Tenía su cabello color azabache, y sus facciones eran definitivamente hermosas y sumamente delicadas. Quedó fascinado con su belleza, y pudo notar a la perfección de quién se trataba, no estaba ciego. De verdad quería hablarle pero no quería meter la pata con tal obra maestra como lo resultaba ser él, sería totalmente patético y estúpido de su parte aunque un ebrio no puedo controlar del todo cada acto que emite.
Estaba completamente borracho, y sus sentidos apenas sí reaccionaban. Sentía que su cabeza daba vueltas y vueltas sin parar, no estaba consciente de lo que hacía hasta que se vio a sí mismo con una mano sobre la del contrario, notando como la cara del otro representaba horror y extrañeza. Cómo no, no cualquier persona te acosa en un lugar público.
ㅡNo puedo creer que seas túㅡtapó su nariz en un intento de que fuera su boca, estaba tan ebrio que resultaba ser impresionante. Nadie desafiaba los niveles extremistas de Seo, era el mejor experto cuando se trataba del alcohol.
ㅡ¿A quién le hablas?ㅡel chico preguntó, mirando hacia atrás en caso de que no fuera a él a quien le dirigían la palabra para no lucir lo suficientemente patético.
ㅡTú eres el actor porno que tanto me gustaㅡlos ojos del otro estaban abiertos a niveles inimaginables. No sabía si era problema de su coreano y no logró entender bien lo que dijo o si realmente era lo que pensaba.ㅡEres mí ídolo, Son Minhyukㅡle sonrió con una sonrisa totalmente estúpida, sus ojos estaban más rojos que el mismísimo infierno y no emanaba más que olor a licor, siendo no muy exquisito para el chico a su lado.
ㅡ¿Disculpa?ㅡse excusó, totalmente impresionado. Él sabía de quién se trataba, y no estaba tan contento de ser confundido de ésa manera.
ㅡNo puedo creer que te acabo de conocerㅡ besó una de sus manos y el otro automáticamente la apartó. No entendía qué demonios pasaba y se sentía demasiado pasado a llevar, ése chico estaba completamente loco.
Changbin sólo no podía dejar de pensar en que tenía tal obra maestra frente a sus ojos, éso no le ocurría a cualquier persona y se sentía tan privilegiado de tenerlo frente a él, a tan sólo un par de centímetros de distancia.
ㅡ¿Podemos salir de acá? Quizás podríamos filmar nuestro propio video amateurㅡ levantó sus cejas frenéticamente y el pelinegro se impresionó tanto que simplemente se levantó y se alejó rápidamente de él sin olvidar dedicarle una mirada mortal, aunque a los ojos idos de Changbin éso quería decir un tal vez.
Estaba loco. Realmente lo estaba.
Observó cómo era tomado por un chico y él pudo imaginar que quizás estarían en proceso de filmar un video nuevo, su boca se hizo agua en pensar en ése chico mostrando su perfecta anatomía nuevamente hacia el público adulto. Notó cómo comenzaban a bailar y lo único que pudo pasar por su mente fue una imagen de él bailándole, moviéndose provocativamente sólo para él y nadie más. Su erección iba creciendo pero le importaba tan poco que los demás lo vieran que no se esmeró en ocultarlo. Ese chico realmente lo ponía mal, sólo quería levantarse y apretarlo contra su cuerpo tambaleante.
Su cabeza estaba que explotaba, pero a pesar de las dificultades, él decidió levantarse y así mismo fue caminando lentamente entre la multitud. El chico estaba dado vuelta, solo, así que sorpresivamente incrustó sus dedos en sus caderas mientras le daba un pequeño topón. De inmediato el otro volteó, empujándolo provocando que perdiera todo su equilibrio.
ㅡQué haces, amor. Creí que querías pasar un bella noche conmigoㅡsonrió maliciosamente, mientras intentaba levantarse. Para él no era más que un juego y estaba dispuesto a jugar cualquier cosa con el pelinegro.
Cuidadosamente de levantó, procurando no volver a caer para no seguir pasando el ridículo frente a él.
ㅡ¿¡Qué demonios te ocurre!?ㅡgritó, pero para suerte de Changbin, nadie escuchó debido al gran volumen de la música.
ㅡSerás la perra de papi ésta nocheㅡsonrió relamiendo sus labios a la vez que generaba fuerza y tomaba el menudo cuerpo del chico.
Hubo un gran forcejeo de parte del menor pero la fuerza y destreza de Changbin era considerablemente mayor y nada podría hacer al respecto.
ㅡSuéltame, imbécilㅡgolpeó su pecho inútilmente ya que resultaba imposible.ㅡNi creas que te tengo miedo.
La escena era divertida a los ojos de Jisung que se encontraba metros más lejos bebiendo algo de vodka, él se moderaba así que estaba a cargo de él y Chan que se encontraba en alguna habitación lejana seguramente con alguien.
ㅡMe gustó aquél video en dónde te disfrazaste de policía, pero ahora podría ser mi turno y tú serás el prisioneroㅡsonrió acercándose peligrosamente a su boca, pero antes de que sus labios llegaran a los del otro, hubo algo que se estampó en su rostro más rápidamente.
El fuerte puño del contrario impactó fuertemente en el rostro de Changbin, haciendo que éste de inmediato cayera inconsciente en el suelo, desplomado en el frío y sucio piso de la discoteca más famosa de todo Seúl.
