Así que Lee Félix sería su compañero de grupo, dormitorio, piso y rap. Genial ¿no?
Estaba solo dentro del dormitorio, pues ambos australianos estaban preparando la cena para cuatro. Desempacaba no con muchos ánimos, y no era porque la noticia de que aquella obra maestra fuera su compañero desde allí en adelante, si no que la incomodidad que le producía tan sólo mirarlo a los ojos lo carcomía por dentro.
Las camisetas solamente las dejaba apiladas una sobre la otra al igual que con todo el resto de su ropa que no era muy poco. Se levantó, sus piernas se estaban acalambrando y ya dolía así que revisó cada espacio de la habitación para ver qué arreglo podía hacer con ella. Era demasiado colorida y aniñada para su gusto, no estaba conforme con esto si no tenía un toque más dark.
Sin más que hacer, se sentó bajo una litera con su laptop sobre sus muslos revisando Facebook y acechando la cuenta personal de Félix. Nada mal, huh.
ㅡEres ardiente, amigoㅡmordió su labio inferior comenzando a meter una de sus manos dentro de su pantalón y posarla sobre su ropa interior.
Revisó más las fotos del menor, viendo datos personales entre medio y relaciones anteriores. Había una foto del chico con una camisa azul y su cabello teñido hacia arriba, pantalones de vestir que se le ajustaba bastante bien a sus piernas y entrepierna.
ㅡDemonios, Lee. Me tienesㅡmasajeó sobre su creciente erección ladeando levemente su cabeza y admirando más las imágenes frente a sus ojos.
ㅡNo sé cómo debería reaccionar si entro a mi habitación y veo a mi futuro compañero masturbándose mientras ve mis fotosㅡFélix ingresó a la habitación con algo de harina en sus mejillas y un delantal de cocina, mientras en su rostro reflejaba nada más que asco y desprecio.
Changbin inmediatamente cerró su laptop y se tapó la entrepierna con una almohada, sintiendo como la sangre hervía en sus mejillas haciendo que se pusieran tan coloradas que no se pudiera distinguir un tomate de su rostro.
ㅡA cenarㅡcerró de un portazo.
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Changbin se había mantenido en su habitación un par de minutos buscando alguna capucha que le ayudara a ocultar su bulto antes de salir a saludar a sus amigos y enfrentar al actor porno que le había traído tantos problemas desde su última borrachera.
Estaba incómodo, sentía fijamente la mirada de burla y superioridad que concentraba el australiano sobre él, queriendo hacerlo sonrojar un poco más como si tuviera poder absoluto sobre él. Como si no bastara solamente haberlo pillado ebrio y tocándose por él.
Sus amigos conversaban animadamente entre sí, proponiendo futuros proyectos y ayudando a escoger trainees para la siguiente audición que se llevaría a cabo en no más de una semana donde Jisung y Changbin ayudarían con ello y Félix quedaría de espectador.
Bin tomaba su sopa tan rápidamente que ni siquiera tomaba en cuenta las tantas veces que se había quemado, teniendo su lengua totalmente ardiente y en parte herida. En su cabeza sólo rondaban ésos pensamientos sobre qué hacer para quebrar ésa sensación dentro de sí de timidez, si de todas formas no había hecho algo muy extraño.
¿O sí?
ㅡ¡Changbin!ㅡChan golpeó la mesa con la palma de su mano para que el sonido fuera más fuerte y sobresaltara al castaño. Pestañeó reiteradas veces antes de concentrar su atención en el pálido chico.
ㅡHyung, lo siento...ㅡse disculpó, tomando algo de agua para suavizar el dolor que le quemaba, pero no fue de mucha ayuda.
ㅡNecesitamos saber tu opiniónㅡvolvió a hablar el mayor, quién seguía esperando que su pregunta fuera respondida.
ㅡ¿Mi opinión?ㅡpreguntó incrédulo.
ㅡDe que Félix quede como tu compañero de cuarto, Jisung con Jeongin y yo estaré a la espera de que otro trainee se una y así trabajaré con las canciones durante la noche y no los molesto con el ruidoㅡsonrió levantándose para dejar su plato usado en el lavavajillas, provocando un leve sonido contra el metal que irritó los oídos de Changbin.
ㅡY-Yo...ㅡdirigió su vista hacia Félix, quién le miraba divertido con la cuchara entre sus dedos.
ㅡPatéticoㅡescuchó el murmullo del contrario, y apretó sus dientes con enojo.
ㅡEstá bien por míㅡse levantó de golpe, dejando la comida servida todavía sobre la mesa sin intenciones de acabarla.
ㅡ¿A dónde vas? ¿Sabes lo que me costó prepararla?ㅡJisung se quejó. Pero Changbin ya estaba lo suficientemente avergonzado para seguir allí.
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No sabía qué demonios se suponía que tendría que hacer, si no que solamente se dedicaba a mirar el techo oscuro que tan sólo tenía un destello de claridad gracias a lo que la luna alcanzaba a iluminar allí dentro. Eran más de las diez de la noche, y permanecía meditando boca arriba maldiciendo aquella vez que bebió en exceso y nadie lo detuvo.
Estaba loco.
Ahora, cómo si aquello no bastara, tendría que convivir con el chico que además de confundirlo con un actor porno también quería llevarlo a la cama de una manera no muy atractiva porque vamos, nadie queda enamorado de alguien que apenas puede mantenerse parado y repele nada más que olor a cerveza de sí. Éso es asqueroso al menos para Félix.
ㅡ¡Gol!ㅡpodía escuchar gritos provenientes de la sala de estar gracias al FIFA que se habían mantenido jugando toda la tarde sus amigos más Félix, y es que le hubiera encantado estar allí si no fuera por el último.
Así estuvo, varios instantes maldiciéndose por lo idiota que era hasta que escuchó la cerradura abrirse. Félix habría ingresado a la habitación así que Changbin solamente cerró sus ojos rápidamente y se quedó estático.
Escuchaba la cremallera de los pantalones bajar y abrió levemente los ojos, lo cual fue agradable para sus oídos y vista, y la camisa siendo arrojada lejos más un leve suspiro salir de sus labios.
ㅡBuenas noches, Changbin. Sé que estabas observándomeㅡsoltó una leve carcajada antes de apagar la luz.
