EIGHTEEN » PETER PARKER [#1].

ov. Quimerismo.

La tarde había llegado, está vez Flash no le había detenido antes de salir, lo cual, Peter, lo agradeció mentalmente mientras salía de la escuela.

Pronto ya se encontraba en el edificio en que la primera vez la vio, tenía la mascara levantada, de forma que la boca estaba al descubierto, y le permitía comer un par de galletas que había comprado unos momentos antes. Mientras comía, balanceaba las piernas esperando a que la chica se presentara, aunque claro, sin el señor acento británico que la acompañaba el día anterior.

Era bastante temprano cuando la chica apareció por el callejón, este día no se había detenido a comprar un par de cosas para su clase, así como tampoco había sido detenida por Rupert. Peter al verla, se dejó caer, haciendo que está parara al verlo.

—¡Jesus!—exclamó llevando una mano a su pecho—. Tú no te cansas de asustarme, ¿no es así?—rió y el chico negó con la cabeza divertido—. Ayer no te vi—comentó.

—Estaba algo ocupado...—mintió meditando lo que decía. ¿Estuvo bien mentir? ¿O debió mencionar al chico? Tal vez después, de cualquier forma ellos no eran nada para que Peter reclamará.

—¿Mucha gente a la cual ayudar?—preguntó y el chico asintió.

—¿Qué tal estuvo tu día?

—¿Ayer u hoy?

—Ambos—dijo queriendo sacar más información posible.

—Bueno, ayer estuve con un...

—¿Amigo?

—Compañero. Practicamos sobre un proyecto, estuve investigando un poco al respecto, y bueno, hice tarea—sonrió.

—Oh, ¿de qué va este proyecto?

—Realmente no estoy segura. Quiero decir es algo bastante simple para el propósito que tiene.

—¿Qué es?

—Pareces muy interesado—dijo riendo—. Espera, ¿también estudias medicina?

¿Debería contestar que si? ¿Estaría en muchos problemas? Fueron las primeras preguntas que pasaron por su cabeza.

—Si.

Bueno, ella no lo sabrá solo pon tu "indemnidad" como prioridad si pregunta donde estudias. Se dijo a sí mismo dándose una palmada mental.

—¿Puedo preguntarte un par de cosas al respecto?

—Yo...—dijo en tono muy bajo.

—Mira, él cree que juntando un número exacto de plaquetas y glóbulos, tanto rojos como blancos, una persona puede adquirir ciertas características y habilidades; así cómo podría ser la cura del cáncer.

—Ha tocado en tu punto débil—comentó Peter cuando Maryannick le recordó que aquel chico inglés le había dicho se podría curar el cáncer con su pobre teoría—. Bueno, a primera instancia suena excelente. Quiero decir, una cura para la peor enfermedad de todas, habilidades, suena simplemente estupendo—dijo y la chica asintió mirando el perfil del enmascarado, que le acompañaba caminando hasta su edificio.