ovi. Sarcoidosis.

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Era mitad de semana y a diferencia de todos los demás, Peter no quería que la semana acabara

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Era mitad de semana y a diferencia de todos los demás, Peter no quería que la semana acabara. Algo le hacía creer, casi asegurando, que ningún fin de semana podría ver a Maryannick y por aquella misma razón, es que prefería los días de entre semana.

Su día fue bastante normal, nada fuera de lo común, clases, Flash molestando y más clases; mientras que para Maryannick, fue un poco más pesado de lo usual, ya que estaban por pasar al segundo semestre, la escuela quería acostumbrarlos lo más rápido posible a un hospital, por lo que estaban comenzando a llevarlos a adaptarse al lugar.

—¿Empezaremos hoy?—preguntó aquella voz con aquel peculiar acento, mientras colocaba un brazo por los hombros de la chica, mientras caminaban por los pasillos de hospital, siguiendo a la mujer frente al grupo.

—Rupert, es mitad de semana—dijo Maryannick, delicadamente quitando el brazo del chico de sus hombros—. ¿No querrás esperar a la siguiente semana?

—Creí que había dejado claro cuán ambicioso era.

—Lo hiciste pero...

—Déjame adivinar. ¿Te vas a echar para atrás?

—Para nada, es solo que tengo una cita con alguien—dijo claramente pensando en Peter, si bien como a cualquiera le encantaría decir que tenía una cita con Spiderman, no podía traicionar la confianza que el muchacho le había dado y decirle el nombre de quien se encontraba bajo aquella máscara.

La chica sabía que la relación que tenía con el enmascarado tal vez no pasará de una amistad o una simple relación víctima-héroe; pero aquel chico del traje rojo la tenía completamente intrigada, aún más que la teoría del australiano.

Peter simplemente era intrigante al punto de que había sentir en Maryannick aquella misma electricidad que él sentía. Ambos se sentían realmente atraídos por el otro, y todos era más allá de atracción física, ambos veían más allá de lo que los ojos podían, el uno del otro.

—Oh, entiendo. No tenía ni idea que tenías novio—dijo el chico con una grande sonrisa de lado, sin recibir respuesta de parte de Maryannick—. ¿Cómo lo conociste?

—Eso no es de tu incumbencia.

—¿Entonces si verás a tu novio?

—¿Por qué te comportas como un chico de secundaria? Estas estudiando la carrera y tienes por resolver tu tesis que parece muy complicada, para que preguntes está clase de cosas.

—Mira, trataré de ser muy... ¿directo?¿honesto?, respecto a lo que estoy por decir—dijo parándose mientras los demás seguían caminando en aquel pasillo del hospital, y con esto, también parando a Maryannick—. Me gustas—dijo y la chica cerró los ojos suspirando—, y bueno, me ha pasado y más de una vez que chicas inventan tener un novio solo para alejarme.

EIGHTEEN » PETER PARKER [#1]. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora