La Resistencia

Capítulo 14

Los nervios comienzan a aparecer.

Falta una hora para que Charlotte aparezca por la puerta y comunique a los demás que tengo algo que decir. La idea no me entusiasma, nunca he hablado en público ni he tenido que convencer a otras personas de que hagan algo que yo quiera.

No tengo preparado las palabras exactas que voy a decir y eso me aterra. Desde que Charlotte me dijo lo que tenia que hacer, no he querido hablar con nadie y solo me he limitado a correr para intentar olvidar la ansiedad que me genera.

-¿Estas bien? Tienes mala cara- dice Colin sacándome de mis pensamientos.

Parece preocupado, desde que estoy aquí siempre lo está y no sé si es por el simple echo de que yo esté aquí o por lo de luchar.

-Si- miento y él, como no, se da cuenta.

-Sabes que a mi no me puedes mentir. Llevas así todo el día; no has hablado con nadie, no has comido, hasta estás pálida.

-¿Has vuelto a hablar con Charlotte?

-Hablo todos los días con ella.

-Entonces, ¿sabes su plan?

-¿El de matar a varias personas para que no nos maten a nosotros? Claro.

-Pues la primera parte del plan es convencer a todos de que estén dispuestos a luchar y lo tengo que hacer yo y no sé como hacerlo sin que me desmaye o vomite. Nunca he hablado en público.

-En eso te equivocas. Hablaste en público cuando plantaste cara al chico que se enfrentó a Charlotte, por eso ella cree que eres la más indicada para esto.

-Pero era diferente.

-No tanto, los demás te escucharon aunque tu no lo vieras

-Pero esta vez si que les voy a ver.

-Pues intenta a mirar solo a una persona o si te incomoda tanto mira mas arriba de ellos, hacia la pared, así parecerá que les estas observando cuando no es así.

-Lo intentaré.

Después de una hora, Charlotte se presenta ante todos ya que cuando salí de su habitación nos convocó a todos en el salón para darnos un comunicado.

-Hola, muchos os estaréis preguntando que es lo que os voy a decir pero en realidad yo no voy a hablar. Alex por favor ven aquí.

Cuando voy hacia ella veo como todos me siguen con la mirada. 

"-Ya no hay vuelta atrás- me digo a mí misma- así que hazlo rápido y terminará antes".

-Todos sabemos por qué estamos aquí, cada uno tiene su razón.

Veo a todos con los ojos clavados en mí y se me olvida lo que tenía que decir así que paro un segundo para tranquilizarme y mirar al frente, hacia la pared del fondo y sigo.

-El momento de atacar ha llegado- suelto de golpe y no sé lo que piensan los demás porque sigo mirando la pared- pero si queremos cumplir nuestro objetivo, tenemos que empezar desde abajo, ¿verdad?

Escucho palabras de asentimiento y de apoyo.

-Entonces todavía no podemos atacar a Crouch, es un enemigo fuerte y nos aplastaría. Por eso Charlotte propone atacar a sus aliados para dejarle solo.

Todos empiezan a hablar en murmullos, quieren manifestar su opinión, pues yo también daré la mía, así dialogaremos y les convenceré sin dar un discurso. Hasta ahora ni Charlotte ni nadie les han pedido su opinión así que yo seré diferente.

-Creo que es un buen plan- me siento en una mesa y los miro a todos- ¿qué opináis?

-Yo opino que perdemos el tiempo- dice una voz entre la multitud- miles de vidas están en juego y no debemos andar con tonterías y seguir a sus aliados. Puede que Crouch lo haya hecho a posta, puede que centrarnos en los aliados sea una trampa.

-Es una forma de verlo pero si atacamos a Crouch directamente, será una pérdida de tiempo y de vidas porque nadie saldrá con vida por muy fuertes y entrenados que estemos. Y puede que sea una trampa eso de los aliados pero puede que no y no sé vosotros pero no estoy dispuesta a arriesgarme. Yo no pido que luchéis, solo os  informo de la situación y si queréis ayudar seréis bienvenidos.

Todo el mundo se queda en silencio, un silencio que para mi dura horas.

-Yo ayudaré- dice alguien que no puedo ver pero que conozco su voz perfectamente, es Axel.- He venido aquí para luchar y creo que ha llegado el momento de demostrar lo que sé con esos aliados.

-Yo también.- dice Fin que está justo detrás de Axel- ¿hay algún plan?

-De momento no- dice Charlotte- solo os puedo decir que hay cinco aliados y a cada uno se le asignará dos personas, por lo que tenemos que trabajar en equipo. Por la mañana tendréis un nuevo horario que compartiréis con otra persona, esa persona será vuestro compañero de combate.

-¿No podemos elegir a nuestro compañero nosotros?- dice una voz.

-No porque vuestro compañero será asignado según vuestros puntos débiles y fuertes. Por ejemplo, si vuestro punto fuerte es el arco, vuestro compañero deberá dominar el combate cuerpo a cuerpo para que las parejas sean equilibradas y se complementen el uno a otro.

Después de eso, ya es tarde para volver a entrenar o para cualquier cosa, así que lo único que nos queda es dormir, aunque a los demás se les ocurren que podemos hablar. Hablamos durante un rato sobre quien nos puede tocar como pareja o con quien queremos que nos toque. A mi me da igual, solo quiero que sea lo bastante bueno para que me dejen ir a por uno de los aliados y acabar con el.

Cuando me consigo quedar dormida, no sueño nada, solo veo oscuridad. Es normal en mí, desde que pasó todo solo tengo pesadillas y cuando me dejan tranquila solo veo oscuridad. 

Quizá algún día vuelva a soñar.

Cuando despierto al día siguiente, veo mi nuevo horario en la cama. Charlotte es muy eficaz en lo que respecta a horarios.

Dentro del horario estará el nombre de mi compañero de combate que seguro que no conoceré pero me sorprendo al ver el nombre  que contiene ya que lo conozco bastante.

Es Axel.