Mi Propio Demonio (+18) |Harry Styles|

Capítulo 11: No quiero que te vayas

—Adiós—abro mis ojos y aquellas manos en mi cintura me detienen

—¡Demonios!— mi cuerpo se estremece y veo aquellos ojos verdes mirarme con ira pura

—¿Qué tratabas de hacer? — me reprocha y parpadeo incontables veces para que desaparezca

—Estás aquí —susurro y doy un paso hacia atrás, pero siento como entierra sus dedos en mi cintura acercándome más hacia él

—¿Qué carajos estás haciendo Hope? — esta vez me grita y es en ese momento que comprendo que estuve a punto de morir

—¡Suéltame! —le ordeno, pero no lo hace, se que sueno como una niña malcriada y estúpida

—¿Qué estás haciendo Hope? — esta vez su voz es serena y hasta cierto punto luce tierno, sus ojos brillan en esta oscuridad y sin más me abrazo a él

—Solo quiero que deje de doler — susurro en su pecho y sus cálidos brazos me sostienen en el momento en que siento que me desmoronare, comienzo a llorar como si jamás lo hubiese hecho antes, me consuelo en su pecho como con nadie, dejo que toda la mierda que llevo cargando dentro de mí se esfume con aquellas lágrimas y que el dolor se desvanezca con las caricias de sus manos sobre mi espalda

—Hay mucho por que vivir Hope, piensa en tu madre, en lo que deseas hacer, piensa en ti maldita sea, esta es una salida fácil, tu eres fuerte y puedes lograrlo, yo creo en ti—sus palabras son como una bofetada y un alivio a la vez, él tiene razón, no puedo darme por vencida ahora que apenas voy empezando, pero el dolor no cesa

—Me llevas a casa—le pido y me separo de él, quita con su suave mano el rastro de lágrimas sobre mi mejilla y sonríe como si yo fuera lo más importante para él, no entiendo como lo hace, pero me siento diferente y completa cuando está aquí

—No me mires así por favor— baja la mirada y soy incapaz de imaginar cuanto tiempo lo he mirado

—Lo siento, es solo que— me detengo y veo como aquel brillo en sus ojos de pronto se desvanece volviendo su mirada oscura y ahora se que quien me mira es alguien completamente diferente

—No soy nada Hope, no debería estar aquí ahora contigo, lamento que todo se este yendo al carajo— baja la mirada y camina deprisa justo por donde llegue

—Espera—corro detrás de él e intento tomarlo del brazo pero es mas rápido y me evade, sin embargo, logro llamar su atención de nuevo

—Gracias—se detiene abruptamente cuando me escucha y me mira de nuevo expectante a lo que diré

—No se quien demonios eres, no se siquiera si eres real, pero te agradezco que estés aquí conmigo ahora cuando más te necesito— termino de decir aquello sintiendo mi corazón latir a toda prisa, mis piernas tiemblan y la forma en que me mira me provoca querer lanzarme a sus brazos y besar aquellos rosados labios

—No tienes idea de cuantas cosas quiero decir y hacerte sentir cariño, no sabes lo difícil que es esto para mí, así que por favor, no lo hagas más complicado—sus palabras apuñalan mi corazón una vez más y sin poder evitarlo una lágrima traicionera le hace ver cuánto me ha dolido. Él camina deprisa y lo sigo sin decir nada más por aquel camino de oscuridad...

—Ve a descansar Hope— lo escucho nuevamente cuando llegamos a donde me he hospedado y busco su mirada, pero se gira para evitar que lo haga

—Pero— me detengo y veo que comienza a alejarse para que entre

—No quiero que te vayas— se detiene justo cuando aquellas palabras salen de mis labios y doy unos pasos hacia él

—Quiero que te quedes— susurro más para mi que para él, porque me es difícil haber confesado aquel deseo, que se que jamás se hará realidad, por que de todos modos el se marchara. Y así lo veo seguir su andar mientras se pierde en la oscuridad de la noche y yo me quedo sola de nuevo...