Capítulo 12: ¿Quién eres?

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—¿Estás bien?— pregunta y me limito a asentir, se acerca más a mi y lo veo inspeccionar mi rostro con cuidado, pero yo solo puedo oler su aroma a menta y cigarrillo

—Estoy bien— susurro y quito su mano de mi cuello, puedo ver sus dedos con un poco de mi sangre y todo el parece oscurecerse, las tonalidades verdes de sus ojos desaparecen y el negro profundo en su mirada me hace caer dentro de el

—Eres una tonta Hope— aquellas palabras terminan con el encanto, me levanta del suelo con brusquedad y mi vista se fija en todos los destellos brillantes del cielo

—Tenemos que irnos de aquí— me remuevo sobre el y termino enrollando mis piernas en su cintura, me acomodo sobre su pecho y suspiro tranquila

—No recuerdo donde vivo— susurro y me aferro a el, se que mis uñas de cierta manera se clavan en su piel, pero no parece importarle, así que dejo de lado el respeto y me reconforto con el calor que emana a mi cuerpo

—Hope no te duermas— su voz hace vibrar su pecho y suelto mi agarre hacia el provocando que resbale un poco, el me sostiene enseguida tomándome del trasero e intento no pensar en lo que eso me ha hecho sentir por dentro

—No puedo, nunca antes me había sentido en paz— le confieso y escucho como abre una puerta

—Tendrás que quedarte conmigo esta noche— me separa de él y siento la cama debajo de mi

—Bien, vamos a dormir — le digo e intento levantarme, pero no me lo permite y siento como todo me hace ver pequeña e indefensa

—Intenta relajarte pero aun no duermas, estas drogada, no sabes lo que dices— se que se ira, asi que lo sujeto del brazo antes de que lo haga y me mira nuevamente, puedo ver el pesar en sus ojos, pero también algo mas que no logro descifrar

—Te quitaré los zapatos para que estés más cómoda — se suelta de mi agarre y levanta uno de mis pies apoyándolo cerca de su cintura, él no tarda en quitar mi zapato y me mira cuando su mano acaricia suavemente mi pierna, no digo nada, pero su tacto acelera mi respiración en segundos

—Hope — su voz ligeramente un poco más ronca de lo usual me llama, su mirada penetrante observándome solo provoca que su mano acaricie un poco más allá de lo que debería, pero no lo evitó, el placer y todas aquellas sensaciones que provoca en mí me hacen jalarlo y el no se detiene, sus enormes manos recorren mi espalda y lo tomo del cuello para acercarlo a mis labios, un roce basta para que se suba por completo en mi y me observe como un lobo frente a su presa

—No te detengas por favor —le suplico y desabrocho su camiseta viendo todos aquellos tatuajes sobre su piel, él no se mueve, solo me observa esperando mi próximo movimiento, así que con las yemas de mis dedos acaricio algunos de sus tatuajes, él es realmente hermoso

—Por favor Hope, detente ahora, me estas volviendo loco, tu aroma me sacia, tu piel me está matando y besarte Hope, sería condenarte — clavo mis uñas en su cintura al escucharlo, se que esto está mal, pero soy consciente de todo lo que estoy haciendo y lo que ocurrirá al desabrochar el botón de su pantalón

—Te estas equivocando— susurra acercándose a mis labios y cuando rozo con mis manos aquello que esconde debajo de sus pantalones me gira dejándome arriba de él, me sujeta de las caderas y quito mi blusa mientras comienzo a moverme sobre él, acaricia mis pechos y me arqueo hacia atrás al sentir lo que provoca en mí

—Hope— me gira de nuevo y saca el short que llevo puesto, acaricia mis piernas desnudas y me es imposible no ver el temor en su mirada con cada caricia que deja en mi cuerpo, entonces se detiene y me mira como si yo no fuese real, me observa con deseo y con ese brillo inusual de sus ojos, así que lo acerco a mi hasta que nuestros pechos se juntan y me permito acariciar su cabello mientras nuestras respiraciones se regulan

Mi Propio Demonio (+18) |Harry Styles|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora