MI PEOR ERROR

16. No sueltes mis manos

-Me gustaría saber algo.

Al escucharlo plasme toda mi atención en él.

-Claro dime.- sonreí.

Se puso algo nervioso, paso su mano por su cabeza, revolviendo su cabello. Planto su vista de inmediato en mi y mordió sus labios.

Oh vaya! Esto me llevara a la locura.

-Paula!.- escuche a Shirley detrás de mi.

El ligue de mi mejor amigo acaba de romper este grandioso momento.¡Rayos!

Frunci mis labios y resople. Di media vuelta para poder saludarla, mientras Mateo se dio una vuelta entera, mostrandose algo molesto.

-Hola hermanita.- Damian se acerco a saludarme y poder revolver mi cabello.- Hey Hermano!.- se dirigió hacia Mateo, no recuerdo tanto afecto hacia él.

-Hermano, ¡Te extrañe!.- respondió Mateo con una sonrisa y lo abrazó.

Busque por todos lados a mi mejor amiga y no la encontre, hasta que divise unas sombras en el coche de Damian.

-Sam.- grite confundida.

-Ya salimos en un momento.- gritó alegre.

Esto iba a ser muy raro, Sam esta con Chase y no creo que sea agradable el que su nuevo ligue y su ex novio se conozcan.

-¿Estas bien?.- escuche a Mateo detrás de mi.

Eso me hizo pegar un respingon.

-Si lo estoy.- saque mi lengua en señal de diversión.

-Me alegra.- sonrió. - Sam y Chase ¿Donde están?.

Aquello me desconcerto por completo, ¿Mateo ya sabía sobre el romance de Sam? ¿Cómo es esto posible?.

— ¿Lo-lo sabes?.— no pude evitar el tartamudeo.

Él me miro arqueando una ceja.

—Si, hemos decidido ser buenos amigos. Lo primero que me confeso fue sobre su relación con Chase.

Esto no lo puedo creer. Debo buscar un sitio sólido, necesito apoyarme en algo o creo que caere.

Me dirigí hacia el coche de Mateo. Soy su mejor amiga, y amiga de Mateo. ¿Por qué me ocultan las cosas entonces?

Mateo se dirigió hacia mi. No tengo ganas de hablar con él, no me siento bien.

—Paula, ¿Qué pasa? Estas muy blanca...

Me miro, tenía un gesto de preocupación. Sus ojos de cerca se veían aun mas marrones y sus pestañas eran tan abundantes, rizadas y largas. Era imposible no perderme en ellos...

Samantha y Chase decidieron salir al fin del coche. De inmediato puedo imaginarme lo que estaban haciendo, los dos tienen sus mejillas rojas y Sam tiene corrido su pinta labios.

Eso hizo que riéramos todos...

—No es nada, me sentí un poco mareada es todo.— respondí a Mateo.

Es mejor no darle importancia, a fin de cuentas son problemas de pareja y ex novio. Pero de verdad espero que Sam no se este equivicando.

—Vamos al parque tortolitos.

Damian ya había comprado las pulseras para poder ingresar al parque. Y adicional nos dio otro ticket.

—Y esto, ¿Qué es?.— pregunté

Damian me miro y puso cara de perrito.

>>Damian, no me digas que...

Él sonrio mostrando todos sus dientes.