12-Tierra Trágame

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Hoy vuelta a la rutina. El puente de Halloween ya ha pasado, y para mi desgracia, empiezan los exámenes en solo 1 mes y medio.

Termino de abrocharme los botones de la camisa del uniforme y cojo la mochila para bajar a desayunar.

Veo a mis padres sentados desayunando y les doy un beso en la mejilla a cada uno.

–Buenos días– les digo un poco cansada.

–Cielo, estas navidades las pasaremos con la familia en España. ¿Te cogemos un billete no?– pregunta mi madre sonriente. Mis ojos se abren como platos.

–Dios siiiiiiiii– la abrazo.

Hace 4 años que no veo a mis primos, mis tíos y mis abuelos maternos. Cuando la hermana de mi abuela murió perdimos un poco el contacto, pero este año volvemos otra vez a Mallorca.

Mi hermano baja con cara de pocos amigos.

–Eres una maldita gritona– me dice sobandose la frente. Yo ruedo los ojos.

–Es que papá y mamá me han dicho que pasaremos las navidades en Mallorca con la familia– le digo sonriente. Él me mira sin expresión alguna.

–Paso– suelta cogiendo una pera. Todos fruncimos el ceño.

–Hijo, hace cuatro años que no los vemos y vamos a pasar allí todas las navidades. Antes te encantaba estar con la familia– dice mi padre.

–Ya, si no es que no quiera, pero mis amigos me habían invitado a una casa en el lago que tiene Eric en las vacaciones de navidad– suelta mirándonos.

–Ya te hemos comprado un billete, Theo, y vas a venir– dice mi madre ya más enfadada. Mi hermano tira el hueso de la fruta a la basura y vuelve a mirarnos a los tres.

–No pasa nada, aún se puede devolver un billete, y a parte, yo ya tengo planes. ¿Que día sería de irnos?– pregunta.

–El día 22: 1 día antes de acabar las clases, y volveríamos el día 10– responde mi padre.

–Puuf, es que habíamos quedado en estar en la casa esa el 23 por la mañana hasta el 26 por la mañana– vuelve a decir. Mi madre tiene la vena de la cabeza y del cuello muy hinchadas.

–Pues hacemos una cosa, nosotros nos vamos el 20 y el que venga el 26 y así todos contentos– propongo intentando quitarle hierro al asunto.

–Ni hablar voy a dejarte aquí solo con los delincuentes de tus amigos. Te vienes el día 20 con nosotros y se acabó– finaliza mi madre.

–Bueno, eso ya lo veremos. Hasta luego– y sin decir una palabra más sale de la cocina y al momento, de casa.

Mi madre se pone a "echar veneno" sobre mis hermano por la boca y mi padre le grita un "Basta ya" y mi madre calla.

–Mira, no te fías de tu hijo ni de sus amigos, pero te fías de Abby– dice mi padre y mamá asiente.– Pues que ella vaya a la casa del lago con Theo y se vengan los dos el día 26–

NO
PUEDE
ESTAR
PASÁNDOME
ESTO
A
MI

–Eh a ver, que yo sí que quiero ir el día 22. Y no quiero pasar Nochebuena con ellos papá. ¡¡No es justo!!– replico.

–Me parece bien– dice mi madre satisfecha antes de salir de la cocina.

–Cielo, haznos ese favor. Tú madre lleva muchos años sin ver a sus padres y hermanos y demás, por favor, cariño– me pide mi padre con ojitos de carnero degollado.

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