Amor Loco

Capítulo 17- Lost at sea

Si Lori Loud podía jactarse de algo, era que entendía a sus hermanas a la perfección, sabía sus gustos y en mayor o menor medida podia ayudarlas con sus problemas a todas menos a...... Su pequeña hermana Lucy.

Desde que había nacido había sido para ella, todo un enigma. No sólo sus gustos sino toda su persona, sabía perfectamente que bajo ese cabello oscuro y esa ropa negra, había una pequeña niña como cualquier otra, pero de igual manera, su peculiar forma de actuar le hacían creer que su hermana ocultaba algo.

Por eso es que en estos momentos se encontraba temerosa de lo que podía pasar a continuación, no sólo por que no estaba realmente segura de que decir sino, por que no estába segura de como reaccionar a un encuentro con su hermana. En su mente había imaginado el escenario una y otra vez, siempre con resultados bastante oscuros en los cuales, su hermanita terminaba refiriéndose a la muerte de Lincoln como "algo natural" En el mundo y convirtiendo un asunto horrible y serio como la muerte en algo mundano y sin sentido.

Más sin embargo tanto su corazón, como su mente se habían puesto de acuerdo en decirle lo que tenía que hacer, llevaba demasiado tiempo evadiendo su encuentro con Lucy y esta vez la única persona que parecía entender a su hermana no se encontraba por lo tanto tendría que hacer esto sola.

Justo como debió haber hecho hacé ya muchos años.

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Cierro loa ojos y me veo a misma como una pequeña bebe de un par de meses, la cual es sostenida por un niño de no más de tres años. Aquel niño sonríe mientras me sostiene con ternura y me habla de cosas que no puedo comprender.

Continuó con los ojos cerrados y puedo ver al mismo niño, sólo que un par de años mayor el cual juega conmigo dentro de esta mismas cuatro paredes, el niño me cuenta sobre su dia más sin embargo yo no le prestó atención, al igual que todas las personas dentro de esta casa.

Continuó con los ojos cerrados y puedo ver a ese niño, ahora es un jovencito de once años, esta vez soy yo la que se acerca a él con un trozo de papel en mis manos. Le pido que escuche mi poema el cortésmente dice si, recitó mi macabraobra mientras la confusión combinada con el terror se apoderan de su rostro. Terminó de recitar mi poema y aquel chico me dice que es excelente, algo oscuro pero muy bueno. No lo demuestro pero ese comentario me hace muy feliz.

Vuelvo a cerrar mis ojos, pero esta vez no veo a aquel chico, sólo veo una caja de madera en frente de mi persona, se perfectamente el tipo de caja que es, las he visto durante muchos años y podría reconocerla en cualquier lugar, en cualquier circunstancias. Es un féretro y puedo verlo desde la silla en la que estoy, a mi alrededor una gran cantidad de personas lloran....al igual que yo. Quiero acercarme al ataúd más sin embargo mis pies no se mueven, quiero acercarme para poder ver a la persona que se encuentra dentro de aquel ataúd aunque se perfectamente de quien se trata.

Nuevamentepuedo verlo, con los ojos cerrados puedo ver a aquel chico que he visto a lo largo de mi vida, puedo verlo frente a mi tan claro como siempre lo he visto, puedo verlo frente a mi sobre un tablero improvisado de invocación, lo veo depedirse, sonreír y finalmente alejarse tranquilamente de mi vida y de mi persona

Todo eso puedo ver, con los ojos cerrados son momentos de mi vida, momentos que debo atesorar en mi alma. Momentos que no volverán a repetirse los cuales flotan en este mar de pensamientos en los cuales me encuentro perdida.

No encuentro la forma de explicarlo, ni siquiera encuentro la forma de entenderlo, lo único que soy capaz de hacer, es lo que he estado haciendo las últimas semanas, llorar y lamentarme por lo que no pude hacer, lo que no pude decir y en última instancia lo que no me atreví a hacer.