DAIMON II Las Puertas Del Infierno Están Abiertas.

Capítulo 21

Narración

Los días pasaban en el campamento de los licántropos y la desesperación era lo que más se hacía notar estos momentos, los Génova, matt y daimon, estaban al filo de la locura si alex no llegaba antes, el viaje de su amigo se había alargado más de lo planeado y si el no venia pronto no sabían que es lo que pasaría con ben y arianna. Por otro lado tenían otra preocupación, los lobos no habían podido casar y a los Génova se les habían acabado las reservas de sangre, estaban vulnerables y débiles, sin contar la tristeza que se reflejaba en sus rostros.

Pov Ben Génova

Sentía pesado hasta mover un solo dedo, las torturas no solo habían sido para arianna, ahora también las aplicaban conmigo, estábamos lo bastante débiles como para no lograr pararnos, sin sangre y sin comida humana no nos respondían nuestros músculos, el color grisáceo en nuestra piel era terrible, al igual que las marcas negras debajo de nuestros ojos, una vez en mi vida había estado sin alimentarme unos días lo que provocaba que mis ojos estuvieran inyectados de sangre y ardieran por la misma causa, era un ardor insoportable del cual jamás te acostumbras, era evidente el porque arianna no podía mantenerlos mucho tiempo abiertos. Trataba de calmarla en los ratos que se desesperaba, no era para más yo estaba igual, ninguno de los dos habíamos recibido jamás una tortura así, podía saber por las veces que nos han torturado que habían pasado muchos días desde que nos tienen aquí, tal vez más de ocho días, las torturas eran cada vez más duras, no sabía cuanto más aguantaríamos hasta que nosotros mismos duplicáramos morir, la sangre humana de arianna aun no desaparecía por completo de su cuerpo lo cual la hacia más vulnerable ante el nieto de algul.

Había estado intentando armar varias teorías del por que aún no nos han matado, si tenían todo en su poder, a arianna, la espada de la muerte y a un brujo que practica a la perfección la magia negra, pero ninguna se me hacía que era la correcta, que es lo que buscaban, torturarnos más o había algo más en todo esto.

Sentí a en mi brazo removerse algo, voltee y mire que solo era la cabeza de arianna que había podido despertar, últimamente con tantas torturas y sin sangre en su sistema solo la a pasado inconsciente, con alucinaciones hablando con su padre y daimon, lo peor era cuando despertaba y se daba cuenta que seguíamos aquí.

-¿Aún seguimos donde mismo no? -abrio un poco sus ojos pero los volvió a cerrar por culpa del ardor.

-Quisiera decir que no, te lo aseguro -respondí viendo hacia enfrente.

Tras los cristales donde estábamos encerrados habían agentes y algunos licántropos que están del lado de cameron.

-No han venido -tenía la voz rasposa al igual que yo -Cuando no e estado inconsciente e pensado que tal vez cameron se encargo que algul los asesinara -solto un sollozo.

En el fondo yo también lo había pensado por un momento, pero después caí en conclusión que si algo les hubieran echo cameron y algul ya nos lo hubieran restregado en la cara.

-Ellos están bien, piensa que si ellos les hubieran asesinado ya nos lo hubieran dicho para dañarnos más -

-Cameron es mi tío -

Deje de mirar hacia en frente para verla sin poder creerlo, tal vez arianna seguía alucinando.

-¿Estás alucinando? -pregunte queriendo darle un toque de burla.

-Ojala fuera así, me entere cuando fuimos a registrar mi casa, mi padre tenía unos papeles donde lo decía -explico mientras su voz se iba apagando poco a poco, era evidente que se iba a quedar inconsciente.

-¿No se lo dijiste a mi hermano verdad? -pregunte por si aún estaba consciente.

-Me avergonzaba ser familia del asesino de mi padre -susurro.

Iba a decir algo cuando mire pasar a Beatríz junto a marc.

***

Tal vez había pasado una hora desde que arianna se había quedado inconsciente de nuevo, tenia la cabeza gacha por que con cada segundo que pasaba me volvía más débil ante la necesidad de sangre, cuando escuche la voz de Beatríz que venia del otro lado del cristal, trate de alzar un poco mi cabeza para verificar si en verdad era ella o ya estaba empezando a alucinar al igual que la chica de mi lado. Pero cuando alce por completa mi cabeza pude que de verdad si era ella, vestía unos pantalones negros junto a una sudadera del mismo color, tenía los ojos maquillados de un color negro lo que hacía que sus ojos azules se intensificaran más, estaba hablando con un agente que estaba cuidando la puerta de entrada a la caja de cristal, algo le dijo lo cual no pude escuchar perfectamente ya que el poder de escuchar a distancias estaba fallando, el agente asintió y camino saliendo del lunar dejando a Beatríz a solas viendo hacia donde me encontraba con arianna, a los segundos una luz verde ilumino dentro de donde nos encontrábamos, Beatríz se acerco hacia el cristal y abrió una puerta pudiendo entrar.

Se acerco a pasos apresurados hacia donde me encontraba junto arianna y hablo.

-Ben se que estás débil, pero tienes que esforzarte y levantarte ahora mismo para que me ayudes con arianna -se agacho hasta quedar en cuclillas y hablar en susurros.

-¿Por que? ¿Quieres asesinarla acaso? -trate de responder pero mi garganta ardía y no estaba seguro si me logro escuchar.

-¡Jamás haría eso! Quiero sacarles de aquí, el agente que viste irse trabajo para el padre de arianna y quiere ayudarle, nos esta esperando en un coche fuera de donde sea que estemos, ahora no hay nadie a estas horas siempre se van a practicar con una mafia a la cual están aliados, por más que te cueste creer no son muchos podemos salir de esto -trato de explicarme pero yo no sabía que pensar.

-Nos traicionaste una vez, ¿por que debería de creerte? -pregunte viéndole con desconfianza lo que hizo que por un segundo viera en sus ojos tristeza y culpa.

-No me creas, te lo demostrare, ahora solo levantarte y se el mismo ben del que me enamore, ese chico imbécil y rudo -me sonrió con algo de melancolía.

No se por que Sonreí al escucharla decir eso, no se como o de donde saque fuerzas pero me levante, con algo de ayuda de parte de ella pero lo hice.

Ella tomo a una arianna débil como un papel por los brazos hasta ponerla en una altura donde yo pudiera agarrar uno de sus brazos y ponerlo sobre mi hombro.

-Si salimos de está y de verdad es cierto que aún me amas, te juro linda, que te haré mi esposa -la mire por un segundo, pero solo pudo ser eso antes de verla caer al piso con una herida en su cabeza.

Pov Matt

Daimon y yo nos la habíamos pasado detrás de una de las cabañas que quedaron un poco completas, nos apartamos de los licántropos, daimon no se encontraba bien desde que arianna y ben estaban desaparecidos, se había peleado incontables veces con eder, estaba consumido por los nervios y yo ya no sabía como alentarlo.

-Llego alex -luke llego un tanto encalmado a nuestro lado.

Daimon por primera vez volteo a ver alguien más que no fuera la tierra del suelo.

-¿Donde está? -Pregunto levantándose rápidamente.

-Vengan conmigo -

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(¡NUEVO CAPITULO! ESPERO LES GUSTE)

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BESOS:*