Dicotomía

Capítulo dieciséis (Final): Te voy a enseñar una nueva melodía

― ¡Dice que no volverá hasta una semana más! ¡Que viajaran a Australia para hablar con no sé quién! ¿Qué es esto? ¿Las vacaciones de su vida?― Jin le miraba molesto ― ¡Quieres dejar eso ya! No están de vacaciones. Están arreglando asuntos familiares serios... ¡Vamos! ¡Ya quisiera yo que estén de vacaciones!― Tengo asuntos serios en la empresa Jin, la ausencia de Jungkook me está costando cara ― ¡Deja ya de insistir con eso! Sabes muy bien que Jungkook te lo compensará ― Nam Joon le miró asombrado ― ¿Le estás defendiendo?― Jin se hizo el desentendido ― ¡Eh! Tú ¿Ahora le defiendes? ― Jin saltó de su asiento y se plantó delante de Nam Joon marcando el pecho de este con su dedo índice ― ¡Le defiendo porque está ayudando a mí TaeTae! ¡No me hagas perder la paciencia!― Nam Joon suspiró vencido. Obviamente no podía decir nada más a Jin o este le herviría en aceite o le dejaría de hablar que para los efectos venía a ser casi lo mismo ―Está bien...no discutamos. Ya veré cómo organizo todo ― Jin se ablandó inmediatamente al ver a Nam Joon cabizbajo y de un pequeño saltito se posó en sus piernas ―Déjales que arreglen las cosas y verás que luego Jungkook estará tranquilo y sin preocupaciones. El que Tae tenga problemas también es un problema para él ― ¡Está bien! Ya dije que lo haré ― ¿Te he dicho que eres lindo? ― No lo suficiente ― ¡Eres lindo! ¡Lindo! ¡Lindo! ―

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Suga quería por todos los medios librarse de Jimin, de su compañía, pero este no estaba por la labor y al contrario, estaba lleno de propuestas para ambos ―La comida ha estado estupenda...vamos a dar un paseo― No. Quiero descansar ― A las cinco debemos estar listos para la sesión ¡Vamos! No descanses ahora, hazlo por la noche ― Jimin, de verdad me gustaría recostarme un rato y descansar ¿Entiendes? ― Jimin, se quedó serio mirándole. Por lo visto su idea de pasar más tiempo juntos se iría al traste De todos modos no te puedo obligar ―Lo siento...iré a dar un paseo. Regresaré antes de las cinco ― Suga le vio alejarse y sintió como su corazón delataba esa partida. No quería dejarle marchar, pero debía hacerlo. Bajó la cabeza y se dirigió a su habitación.

Jimin caminó por los alrededores del Hotel y después de un rato se sentó a admirar el paisaje marino. Tal vez estaba forzando demasiado las cosas con Suga, tal vez se había hecho la loca idea de que estaba interesado o podría interesarse, pero si algo de eso había él no lo demostraría. Jimin se sintió confuso. Jamás había estado en esa situación, nunca nadie le interesó como para ser él mismo quien insistiese ¿Cuánto más puedo insistir sin que se me rompa el corazón?