Dicotomía

Capítulo siete: Tú, eres mío

Jimin había vagado un rato por un par de bares y en ninguno se encontraba a gusto. En principio por que estaba disgustado y también porque el tema de conversación con todo aquel que se encontraba era la aparición de JJK en el evento benéfico. Había mentido sobre las circunstancias, porque tampoco era cosa de explicar que no sabía nada sobre Jungkook porque era un ermitaño huraño al que no había acceso posible aunque pertenecían al mismo grupo. Él fue el último en unirse a Opus net y aunque el recibimiento por parte de J-Hope y Suga fue cálido, pronto se dio cuenta que con Jungkook no sería igual. Le consoló el saber que a sus compañeros les trataba con igual frialdad y que la única forma de llegar a él era ser sobresaliente en el trabajo. Jimin trabajó duro para serlo, sobre todo porque Jungkook le llamó la atención como algo más que un compañero de grupo, pero aquello se quedó nada más que en eso, porque Jungkook era un muro imposible de franquear.

Estaba perdido en sus pensamientos cuando una voz femenina le habló ―Jimin bebiendo solo ¿Y tus mosqueteros? ― Jimin la miró con un poco de hastío ―Vaya ¡Tú también estás muy bien acompañada! ― Jolin sonrió ― A pesar de tu cara sigues siendo tan tú ― ¿Qué? ¿Te aburres? ― Jimin la volvió a mirar. Jolin tenía unos veinticinco años, pero su aspecto era de una cría de quince, tenía la lengua más mordaz que él recordase y era considerada en el medio una rebelde. Cantaba como los ángeles, pero sus canciones eran como ella, contestaría y crítica, así es que sus fans eran bastante reducidos y solo se movía en ciertos círculos porque el resto había terminado por ignorarla, ya que no tenía el perfil que interesaría masivamente al público―Honestamente sí ― Si buscabas a Suga no ha venido ni vendrá, así es que...― ¿Qué te hace pensar que busco a Suga? ― Siempre que le ves terminas hablando con él ― ¡Es cierto! Es que me gustan las conversaciones inteligentes ― Jimin le dirigió una mirada mortal, pero ella solo se limitó a sonreírle encantadoramente ― Además, creo que Suga me tolera mejor que tú ― Eso es cierto, pero no te sientas mal por ello ― ¿Debería? No te preocupes, cuando salgo dejo los sentimientos en casa por si alguien me los pisotea ― Jimin bebió un poco más de su cerveza mientras pensaba que tal vez lo mejor era guardar los sentimientos en un baúl. Jolin pidió la cuenta y pagó ― ¿Ya te vas?― Preguntó Jimin ― Espero no haberte espantado ― ¡Que va! No eres de los que me espanta. Voy al mar y quiero llegar antes que se haga de noche ― ¿Al mar? ¿A qué? Si se puede saber ― Me gusta el mar de noche ― Jimin no lo pensó, normalmente no era de los que pensaba demasiado en nada, así es que se encontró preguntando ― ¿Puedo ir contigo? Si sigo aquí acabaré borracho ― Jolin tampoco era de las personas que buscaban algo más en las palabras o acciones que lo ellas mismas expresaban ― ¡Vale! Vente ―.

Ya en el coche saliendo de Seúl, Jimin empezó a arrepentirse. Por unos minutos incluso pensó en decirle que le dejará en algún lugar de la carretera, pero luego pensó que ella le tomaría por un tonto ― ¿Estás arrepentido de venir? ― ¿Qué? ¿Por qué? ― Ella sonrió ― Sé leer la mente ― Jimin rió y se soltó un poco ― La verdad es que sí, pero da igual. Hoy es uno de esos días en qué no sé qué hacer con mi vida― ¿Solo hoy? ― Preguntó Jolin muy seria. Jimin se limitó a sonreír quedamente, bajando un poco la cabeza ― Tal vez sea bueno ir al mar ― Ella le miró de reojo mientras conducía ―Para esos días grises no hay nada mejor que un poco de trot ¡Cheer Up!― dicho esto le dio al play y la música inundó el coche. Jimin le miró desconcertado cuando escuchó que empezó a cantar y al poco de mover la cabeza incrédulo, empezó a cantar también.

∞

Le había enviado varios mensajes a lo largo de la tarde y apenas había respondido "todo bien, no te preocupes", pero ya empezaba a preocuparse. Había visto los vídeos y al menos sabía con quién estaba, pero no sabía que tan bueno era eso. Es bastante grandecito, no puedo estar siempre pendiente de él. Además si no ha llamado es porque todo va bien, de otra forma me habría avisado... Estaba tan absorto en sus pensamientos que se sobresaltó cuando sintió vibrar el móvil en su mano.