Eres Mío Imbécil (Agustín Casanova y Tu)

|CAPITULO 44|Juntos|

Después de un rato, mi mamá se ducho y se vistió muy bonita. Nosotros se lo hicimos saber y ella se alegró bastante.

—Bueno chicos, me voy. Deseenme suerte–Dijo abriendo la puerta.

—Suerte–Dijimos al mismo tiempo.

Ella cerró la puerta y escuchamos el motor encenderse y luego irse.

—¿Qué haremos?–Pregunté mirando a Agustín.

—¿Regalonear?–Sonrió abrazandome.

Lo abracé y bese sus labios.

Agustín llamó a Tincho y a su hermana para decirles que todo estaba bien y se quedaría conmigo esta noche.

Subimos a mi habitación y comenzó a hacerme preguntas mientras yo quitaba los peluches de mi cama para hacerle un espacio a el.

—Asi que estás bajando tus notas en el instituto–Dijo mirando mi cama.

—Un poco–Respondí inocente.

—Arreglaremos eso.

—¿De qué hablas?

—Voy a ayudarte a estudiar.

—¿Estás bromeando?–Enarqué una ceja mientras me deslizaba por mi cama cubriendome con las sabanas.

—Claro qué no–Rió.

El se sacó sus short quedando en boxer, se tomó unos remedios y luego se tendió a mi lado sin polera.

—¿No tienes frio?

—No–Sonrió cubriendose cuidadosamente.

Agustín apagó la luz y al entender que no podía moverse por su pierna, volteé a mirarlo y puse mi brazo izquierdo rodeando su tórax. El sonrió tranquilo y besó mi frente.

—Gracias por estar aquí–Dije mirandolo a través de la oscuridad.

—Gracias a ti princesa, por no sacarme de tú corazón.

Sonreí en silencio y apoyé mi cabeza en su hombro.

● ● ●

—Agustín despierta–Susurré en su oído.

El sonrió con sus ojos cerrados y luego los abrió rapidamente asustandome ya qué me sobresaltó

—Idiota, me asustaste–Reí.

—Esa es mi chica–Rió mientras se sentaba.

—Debo volver a casa hoy–Comentó mirandome.

—No te preocupes, mamá te irá a dejar.

—¿De qué hablas?

—Sabe que no puedes flexionar tú rodilla e irse en el bus significa estar dos horas con la pierna flexionada, así qué iremos a dejarte en el auto.

—Oh _______, realmente no es necesario.

—Tranquilo Agustín, ella se ofreció.

—Gracias–Respondió algo incómodo.

—Vamos, levantemonos.

||Agustín||

Realmente todo lo que hacía la mamá de ______ por mi, no era necesario. Me hace sentir bien, pero a la vez muy incómodo.
Ver a _______ sonreír y con ganas de hacer todo me pone muy feliz y sé que ahora no nos alejaremos fácilmente.

Me duche a mi paso en el baño de ______ y luego salí a su habitación cerrando la puerta con llave. _______ entró a bañarse después que yo. Me puse boxer y luego comencé a ponerme lo de mi rodilla. Ella salió en el momento que estaba entablillandola.