CAPITULO 30|Celos, Detalles|

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Camine en silencio un momento devolviendome hacia la cabaña y divisé a Zabdiel  qué se dirigía hacia mi.

—Hey Agustín –Dijo haciendo qué me detuviera en seco. Lo mire en silencio y levante mis cejas en forma de ¿Qué quieres ahora?

—¿Has visto a ________?–Preguntó nervioso, parecía preocupado por algo. Quise decirle qué no, pero ¿Qué más da?

—Si, está en la piscina ¿Por qué?

—Por nada, tengo qué hablar con ella.

Bufe molesto y seguí caminando a la cabaña..Definitivamente este chico me hacia sentir celos.

||________||

Esa mini–charla con Agustín  me dejo pensativa. Aún no asimilaba qué le confesé a Agustín  en otras palabras qué me estaba confundiendo.

Tendí la toalla en el cesped y me acoste sobre ella mirando el cielo, me puse lentes y audifonos para hundirme en mis pensamientos. Esto parece irreal, no puedo creer qué la persona qué destruyó mis recuerdos, esa persona qué odio con mi vida ahora estaba haciendome sentir insegura y confundida, sé qué no me quiere y no le molestará hacerme daño, por eso debo aprender a llevarlo y qué no destruya mis sentimientos.

Cerre mis ojos y sentí qué alguien me miraba, no tenía ganas de estar con nadie, pero se iluminó mi vista al ver a Zabdiel  de pie mirandome. Retiré los audifonos de mis oidos y me saqué los lentes. El me sonrió y sentandose a mi lado para luego besar mi mejilla.

—¿Como estás?–Preguntó sonriente.

—Bien, gracias ¿Y tú?

—Bien–Sonrió.

Lo quede mirando en silencio.

—Te noto un poco extraña ¿Te pasa algo?–Preguntó notando mi rostro de pensamientos hundidos.

—No–Mentí—Estoy pensativa, solo es eso.

El rió burlón mientras me miraba.

—No te rías–Sonreí golpeandolo.

—¿Vamos al agua?

—Vamos–Dije mientras me ponia de pie.

Zabdiel  se saco su polera dejandome ver su tonificado cuerpo, no tanto como el de Agustín , pero no estaba mal. Dejo sus zapatillas junto a las mias y mientras yo me sacaba mis short y polera el me miraba sonriente.

Caminamos a la piscina mientras conversabamos y las miradas se fijaron en nosotros. No quise tirarme en seguida, pero Zabdiel  lo hizo en seguida. Luego se salió y camino hacia a mi.

—Vamos ¿No te mojarás?–Rió mientras se acercaba.

—Como qué se me quito el calor–Sonreí inocente.

A Zabdiel  no le importó y me abrazo dejandome toda mojada, reí en silencio para luego alejarme de el frunciendo el ceño. El me observo travieso, me tomo entre sus brazos y rápidamente se tiró a la piscina junto a mi.

—Idiota–Reí mirandolo.

El me guiño un ojo sonriente.

Estuvimos bastante tiempo en el agua riendonos y haciendonos bromas, qué hasta hizo qué me olvidara de todas las estupideces qué pasaban por mi cabeza.

Mientras nos salíamos divise a Agustín  junto a Pablo  conversando y en momentos muy cortos fijaba su mirada en mi, pero lo ignoré.

—¿No tienes toalla?–Pregunté mientras recogía la mia del cesped.

Eres Mío Imbécil (Agustín Casanova y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora