CAPITULO 42|Recapacitando|

964 45 9
                                    



Mi voz sonó natural, pero ellos me entendieron. Raramente yo estaba mal por algo y muy raramente lo demostraba.

—Supimos todo–Murmuro Tincho.

—Gracias por guardar el secreto Pablo–Lo fulminé con la mirada.

—Son los únicos que saben hermano–Se defendió.

Me quedaron mirando nostálgicos, pero como siempre Tincho y Pablo no sé quedaron atrás haciendo bromas y diciendo estupideces.

—¿Y sabes por qué sigues vivo?–Preguntó Tincho alzando sus cejas.

Enarqué una ceja mirandolo.

—Porque sabes que debes ir a ver a _______.

—No me hables de ________–Suspiré tocando mi nuca.

—¿Por qué?

—Me odia hermano, piensa que me olvide de todo y que no me importa..Es solo que he estado teniendo tantos problemas que no quiero hacerla entrar en mi vida para soportarme.

—Sabes que ella de todas formas te soportaría–Contestó Marcos—Ella no tiene la culpa de nada.

—Tampoco yo..–Dije dolido.

—Nadie tiene la culpa Agustin, así es la vida y ya está. Tienes a tus dos hermanas hermosas y nos tienes a nosotros más Milagros, Camila y _______ que no te dejaremos solo–Comentó Pablo con una sonrisa en su rostro.

Sonreí en silencio mirandolos.

—De verdad gracias chicos, estaría más hundido de lo que estoy sin ustedes.

Ellos sonrieron y luego me obligaron a levantarme. Me duche y me vestí con la misma rutina de siempre: Sacarme las vendas, ducharme, secarme, volver a las vendas, vestirme y finalmente tomarme los anti–inflamatorios. Ya estaba acostumbrándome.

Fuimos a comer a una pizzería, conversamos demasiado y también me hicieron reír euforicamente, necesitaba despejarme con mis amigos.

Casi cayeron atacados cuando les dije que no podría jugar F.A en dos o tres meses..Exclusivamente porque se acercaba un campeonato importante y yo no estaría ahí quizás..Todo depende de como siga mi rodilla.

Al llegar a casa, nos dedicamos a jugar playstation mientras Pablo y Tincho coqueteaban con mi hermana haciendole bromas estúpidas.

—¿Entonces? ¿Cuándo vamos a donde ________?–Preguntó Tincho pasandole el mando a Marcos porque había perdido.

Tinco se sentó a mi lado y me observó atónito.

—Definitivamente no estoy preparado–Respondí complicado.

Tinco soltó una carcajada.

—Pareces un pájaro recien nacido–Se burló.

—Imbécil–Reí.

—Vamos hermano, todo saldrá bien–Dijo dandome unas palmaditas en la espalda.

—¿Qué voy a decirle?

—Pues..La verdad.

—¿Vive muy lejos?

—A unas dos horas de aquí, igual que yo.

—¿Vives cerca de ella?–Pregunté sorprendido.

—Si, a unos diez minutos caminando. Te puedo hospedar si algo sale mal, aunque lo dudo. Su mamá te amará y sabiendo que vienes de aquí, hará que te quedes. Aparte, _________ ya estará queriendote nuevamente–Aseguró.

Eres Mío Imbécil (Agustín Casanova y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora